El regalo de los dioses [KookV]

[03]

Jungkook abrió ambos ojos y lo primero que logró ver fue el hermoso y perfecto rostro del pelinegro Kim Alexander Taehyung enfrente de él, quien estaba durmiendo como un bebé delante suyo, Jungkook no pudo evitar sentirse un poco atraído por ese hombre, le confundía pues nunca había sentido aquella sensación en su cuerpo, en verdad solo Taehyung lo hacía ponerlo.

El castaño dejó de pensar en ese tipo de cosas y se levantó sin hacer mucho ruido para no despertar a Taehyung, salió de su habitación y se encaminó al baño, tomó una ducha corta y luego se arregló para tomar un entrenamiento matutino en su jardín.

Mientras Jungkook entrenaba golpeando al sujeto de madera, varios recuerdos llegaban a su mente, la primera vez que tuvo que salvar a Yugyeom y desde ese momento se habían vuelto muy amigos a pesar de que tuviera que salvarlo de varias situaciones, luego recordó aquella batalla, aquella batalla que fue la gota que derramó el vaso para que el rey lo nombrara general, a él y a Hoseok de Tracia, todos sus logros y todo lo que había hecho gracias a su gran sacrificio y su instinto de supervivencia... Pero entonces llegó aquel recuerdo, aquellas palabras que había pronunciado Yugyeom "Jungkook es hijo de la diosa del amor y ni siquiera ella se digna a verlo" ¿Por qué demonios Yugyeom sería tan desagradecido? Después de todas las veces que le había salvado el trasero... La furia de Jungkook fue creciendo y el castaño comenzó a golpear cada vez más fuerte a aquel muñeco de madera.

Jungkook siguió golpeando al muñeco arrancando un pedazo de madera a la vez, Jungkook estaba echo una furia, quería hacer algo como venganza, pero no sabía cómo vengarse en contra de Yugyeom, tenía que darle en donde más le doliera, pero solo había una persona que se podría considerar su punto débil, Penélope.

El castaño dejó de golpear al muñeco y se dirigió a su casa, una gran idea se había cruzado por su mente y no dudaba en llevarla a cabo.

Más tarde Jungkook logró invocar a uno de sus hermanos, Eros el dios de la fertilidad, lo había citado en el jardín de su casa ya que no iba a salir de su hogar por la seguridad de Taehyung.

-Jungkook, lo que me pides... ¿Hablas enserio?

Preguntó Eros un poco inseguro ante la idea de su hermano menor.

-Quiero que Penélope olvide a Yugyeom y que me ame a mí, solo a mi

El rubio observó a su hermano menor con una ceja encarnada, sabía lo que estaba pasando.

-Jungkook, sea lo que sea créeme, no vas a querer eso, estás cegado por la furia por alguna extraña razón, además, creo que tu corazón no quiere en verdad a Penélope ¿Cierto? Es solo venganza... Creo que tu corazón quiere a alguien más

Jungkook se quedó callado, sabía que su hermano mayor tenía razón, el solo quería hacer eso por venganza, en realidad no le llamaba la atención Penélope, porque la única persona a la que se le acercaba a sentir algo era Taehyung, ese hombre era totalmente diferente y eso era lo que le llamaba la atención. Entonces el castaño volteó a ver a su casa, logró ver que el pelinegro ya se había levantado y estaba caminando con una bata puesta a la cocina para comer algo, Jungkook suspiró y volvió a ver a los ojos a su hermano.

-Tienes razón, pero en verdad quiero vengarme de Yugyeom

-Bueno, primero ve a la cocina y tómate algo que pareces un idiota, deja que el enojo se vaya y luego piensa el algo, si necesitas mi ayuda ya sabes en donde buscarme

Entonces Eros se fue caminando lejos de Jungkook dejando al castaño solo.

Jungkook se fue a la cocina como su hermano le indicó y pasó de largo a Taehyung quien estaba comiendo de forma tranquila, se sirvió un vaso con agua y se lo acabó en tiempo récord