El regalo de los dioses [KookV]

[08]

Pasaron dos días y mientras el amor de Taehyung y Jungkook se hacía notar en diferentes aspectos Jimin comenzaba a alejarse más de sus amigos, permanecía solo en su casa pensando en qué podría hacer para que Taehyung y Jungkook se separaran unas horas tal y como se lo había dicho Príapo... Aunque en verdad le parecía muy ridículo todo esto y sería mejor dejar todo ese plan, pero no podía dejar el alma de Yoongi, en verdad quería volver a tener a su hombre cerca de él.

Ahora el peliplata se dirigía a la casa de Jungkook, comenzó a correr cuando estaba a muy poca distancia de esa casa para parecer que estaba cansado de correr tanto, llegó y tocó la puerta muy fuerte como para parecer que estaba muy alterado.

Jungkook abrió la puerta algo confundido al ver a Jimin de esa forma tan agitada.

- ¿Park Jimin? ¿Qué sucede?

Jimin se levantó con su respiración agitada.

- ¡Jungkook, gracias a Zeus que te encuentro... Ha pasado algo horrible

Jungkook algo preocupado agarró a Jimin de los hombros.

- ¿Qué sucedió?

-Ah... Han llegado los romanos de sorpresa al otro lado de la ciudad y están atacando a las fuerzas espartanas que están ahí... Necesitan tú ayuda Jungkook

- ¿Y por qué has venido tú?

Preguntó Jungkook con sus cejas encarnadas.

-Porque al ver eso me vine corriendo hasta aquí

Jungkook comprendió lo que estaba sucediendo.

-Está bien, necesito que mantengas a Taehyung aquí en casa hasta que vuelva

Dijo Jungkook y se fue corriendo de la casa.

Jimin dio un ligero suspiro cuando vio a Jungkook irse de su casa, estaba realmente feliz porque había cumplido con su trato con Príapo y al fin podría tener de vuelta a su amado Min Yoongi, el peliplata se dirigió a donde estaba Taehyung viendo a su querido amigo muy feliz.

-Hola Tae...

Jimin no pudo terminar la oración pues quedó inconsciente en el suelo.

Taehyung volteó a ver a Jimin, pero lo único que logró ver fue a su querido amigo tirado en el suelo mientras detrás de él se encontraba el dios secundario de la fertilidad.

- ¿Qué le hiciste a Jimin?

Preguntó muy asustado Taehyung.

-Nada... Solo lo mandé a dormir por unas horas

Dijo Príapo con una leve sonrisa en su rostro mientras se iba acercando a Taehyung lentamente sacando el arco de Eros ya que se lo había "Tomado prestado sin avisar" a su querido hermano, todavía recordaba todo lo que había hecho para distraer a su hermano y quitarle su arco justo en el momento indicado.

Taehyung dio unos pasos hacia atrás sintiéndose muy asustado, no sabía qué hacer.

- ¡Jungkook! ¡Jungkook!

Gritó Taehyung, pero nada sucedió.

-Jungkook está ocupado resolviendo un altercado imaginario al otro lado de la ciudad

Príapo soltó una leve risa y colocó una flecha en el arco apuntando a Taehyung quien sin dudarlo comenzó a correr por toda la casa intentando esconderse de Príapo. Corrió por todas partes hasta llegar a su habitación donde se encerró en su armario, no era el mejor escondite, pero estaba muy asustado como para pensar en una buena estrategia.

Entonces Príapo entró a la habitación con pasos suaves esperando encontrar a Taehyung aquí mientras que el menor veía por una rendija al pelinegro como si se tratara de un monstruo.