El regalo de los dioses [KookV]

[09]

Habían pasado días, Eros no había regresado y Jungkook se sentía tan desesperado, no sabía que hacer por lo que prácticamente se aislaba de todos tanto de SeokJin como Hoseok de Tracia, ni siquiera podía ver a Park Jimin ya que seguramente lo mataría, en verdad no sabía qué hacer, sentía que iba a llegar al borde de la locura.

Mientras que por otro lado estos días Príapo se había aprovechado mucho tiempo de Taehyung y se había olvidado por completo de su hermano quien permanecía encerrado en la cárcel de hierba en el gran jardín.

Jungkook ahora estaba en su casa entrenando desde hace 5 horas, golpeaba un muñeco de madera con su gran espada mientras era observado por SeokJin quien lo veía con sus ojos brillosos como si fuera lo más bello del planeta.

El castaño se detuvo, estaba muy cansado y digamos que no estaba en las mejores condiciones para seguir entrenando por lo que, ignorando a SeokJin se adentró en su casa y se fue a su habitación siendo seguido por el rubio.

- ¿Puedes dejar de seguirme? Necesito estar solo... Dijo Jungkook al llegar a su habitación

-Es que eres tan hermoso que se me hace imposible no poder vivir sin ti

Dijo SeokJin con una gran sonrisa viendo como Jungkook solo rodaba sus ojos.

-Ya basta, necesito pensar en cómo traer a Taehyung por mi propia cuenta

El castaño se acostó en su viendo al rubio quien permanecía en el marco de la puerta.

- ¿Y si le rezas a otro dios? Tal vez pueda ayudarte

Propuso SeokJin, pero Jungkook negó con la cabeza

-No hay ningún dios que me pueda ayudar en esto

Jungkook dio un suspiro cerrando ambos ojos

-Puedes rezar a Afrodita, es tu madre así que ella podrá ayudarte

Propuso SeokJin.

-A nosotros nos recompensó llevándonos a éste increíble lugar

Jungkook dio un suspiro, no podía creer que SeokJin diera esa propuesta, pero por ahora era su mejor opción.

-Bien... Tú ocúpate de llamarla, yo hablaré con ella

SeokJin entró a la habitación y comenzó a rezar a Afrodita para que se presentara en esa habitación, pero nada sucedió.

-Pfff... Lo sabía, es una pérdida de tiempo

Dijo Jungkook y se acostó en su cama viendo de repente como aparecía aquella hermosa diosa del amor con su imponente presencia hacía los mortales.

SeokJin dio un chillido de alegría al ver a Afrodita, la hermosa diosa del amor estaba frente a sus ojos... No podía creer que este día habría llegado, pero no de la mejor forma.

- Hola, necesitamos de su ayuda para una situación muy complicada

Afrodita volteó a ver a SeokJin quien estaba sonriendo con sus ojos brilloso.

-Bueno... Por eso estoy aquí

Jungkook dio un suspiro y se levantó de su cama viendo a su progenitora a los ojos.

-Necesitamos que me lleves a los aposentos de Príapo

Dijo de forma seria y sencilla.

La diosa del amor observó a su querido hijo un poco triste.

-Ya veo... ¿Qué a echo ahora tu hermano?

-Mira, te voy a decir lo que hizo, secuestró a alguien que es importante para mí y con el arco de Eros hizo que éste se enamorara de mí y justo cuando Eros fue a investigar desapareció