Estúpidos Sentimientos (Thiam) SIN EDITAR

XV

Después de que Liam y Mason comieron tranquilamente, o al menos para Masón, ya que para Liam no era tan tranquilo. Mason siempre trataba de que Liam hablara sobre Theo, y Liam, lo genio que es, siempre le pedía que le platicará sobre él y Corey, y funcionaba, Mason sonreía estúpidamente y le contaba a Liam cada detalle, Liam quedó perturbado.

"Amigo, tengo que ir por Corey. Quedamos esta tarde para ir a comprar unas cosas" avisó su amigo mirando su teléfono. Liam asintió "Te dejaré en tu casa"

"Está bien, Mason, gracias" sonrió y miro por la ventana.

"Oye...creo que deberías hablar con Scott" murmuró su amigo. Liam solo suspiró. "Al menos dale la oportunidad de disculparse, yo lo escuché realmente arrepentido"

"Vale, hablaré con él" gruñó Liam.

Ninguno de los dos volvió a hablar y a Liam le alivió.

Cuando Mason lo dejó en su casa, lo primero que hizo fue meterse a bañar. Se sentía agotado y frustrado.

Quería ver a Theo, hablar con él y tal vez besarle un poco...vale, Liam le quería besar mucho.

Es mejor a que mañana lo busque.

Salió de la ducha y se colocó un boxer negro. Se dejó caer frente a su videojuego y decidió jugar solo. Necesitaba al menos enojarse con la estúpida computadora.

"Vamos a perder el tiempo" murmuró y comenzó a jugar.

Liam era muy bueno jugando, pero cuando jugaba contra Mason, el pobre siempre perdía contra él.

Jugó unas cuantas partidas cuando se dio cuenta que se estaba haciendo tarde y que volvía a tener hambre de nuevo.

Se puso de pie y caminó hasta la cocina donde se encontró con un pedazo de pastel y una nota encima de él.

«Cariño, tengo que hacer doble turno, tu padre también. Te deje esto para que te lo comas de postre.

Te amo, Mamá»

Liam sonrió y se comió el pastel en casi dos minutos. Sabía delicioso, era su favorito, sabor cereza con chocolate. Sí, Liam tenía gustos raros. Y sí, Theo era uno de ellos.

Volvió a subir a su habitación y puso algo de música, bajo el volumen hada convertirlo en un suave y delicado sonido. Liam se dejó caer en su cama, bocabajo y cerró sus ojos.

Estaba mas relajado, y eso era ya un gran esfuerzo.

Suspiró y dejó llevarse por sus recuerdos, que eran muy obvios de quien se trataba. Liam recordó cuando había discutido con Theo en la veterinaria, y recordó sus crueles y feas palabras hacia la quimera y como este le miraba dolido. Ahora Liam por fin lo entendía, entendía porque siempre aparecía Theo a salvarle su culo, porqué siempre Theo estaba ahí, apoyando, aunque siempre jodía pero ayudaba. 

Liam suspiró al recordar el beso, no el que había sido en el bosque, el que Liam y Theo compartieron en su camioneta, era exquisito.

Liam sintió una suave brisa, pero dejó pasarlo por alto, el estaba relajado, se sentía bien estar ahí, en bóxer tumbado bocabajo en su cama. Se estremeció al sentir como algo le recorría desde la nuca, hasta su cintura, por toda la columna vertebral. Era como una pluma, pasando por toda su piel. Inconsciente suspiró y susurró:

"Theo"

Liam volvió a sentir como algo le recorría la columna. Y cuando iba a abrir los ojos, sintió un dolor que procedía de su trasero. Se volteo y abrió sus ojos con enojo.

Frente a él estaba un Theo muy sexy, aunque a Liam le cabreo porque sonreía con travesura.

"¿Qué es lo que te crees? ¡¿Me has mordido el trasero?!" Gritó y se sentó, quedando a centímetros de Theo. Este se rió.