HILO ROJO •[ HopeV]• Omegaverse

•| Capitulo 7 |•

Jung Hoseok:

Hundido en mis pensamientos mientras trataba de ignorar a Kook que seguía insistiendo con lo de "pareja predestinada", en unas dos horas empezaba mi primera clase sentía curiosidad sobre qué tema hablarían.

Comportamiento del consumidor, analizarlo, entenderlo, escucharlo, saber por qué compra un producto más mi mente se fue a otro lado porque mi alfa empezó a gruñir por aquel aroma que no había olido hace tanto tiempo....vainilla y menta...mi alfa gruñó y arañaba queriendo ir tras ese aroma.

—¡Hobi!, ¡¿A dónde vas?!

Sin notarlo mis piernas actuaron por sí solas en busca del aroma, me paré en seco en la puerta de ¿La enfermería?

—Hoseok ya cálmate, ¿qué sucede?

Calme mi respiración por unos momentos hasta que abrí de golpe la puerta encontrándome con lo que ya me imaginaba.

—Taehyung.....

Omniciente:

(Minutos antes)

Taehyung había llegado a la enfermería olvidando, más bien queriendo olvidarlo, a su aroma adictivo que quería sentirlo más cerca, su lobo había despertado después de tanto tiempo pero él se negaba a volver allí, lo olvidaría, no se cruzaría con él, no más.

Mientras que Jimin, preocupado por su amigo le entrego un vaso de agua viendo que se calmara, no lo veía bien, lo notaba como angustiado y casi nunca lo veía así, ni cuando sabía que sus celos se acercaban.

—Toma.

—Gracias.

—Tae me puedes decir y se sincero, ¿Por qué te quedaste mirando a esos chicos?

Dejó el vaso ya vacío en una mesita que había suspirando pesado, no se sentía preparado aun para verlo, ya no era un niño ansioso por volver a verlo, ya se consideraba un adulto maduro y debía afrontarlo, al menos sentía el apoyo de su amigo, no podría pedir más.

—Uno de los chicos se me hacía conocido al chico que te dije que se fue...

JM: Ohhh pero...

De un portazo alguien entro en la enfermería interrumpiendo a JiMin, provocando que miraran a esa dirección y no lo podía creer....ahora se sentía mejor ese olor a Canela y miel...era él...después de tantos años por fin lo vio, sus lobos no dejaban de saltar de felicidad queriendo salir a encontrarse pero su lado humano, ambos se encontraban estáticos viéndose el uno al otro como si solo estuvieron ellos dos en aquel cuarto.

Mientras el omega quería salir corriendo de allí, el alfa tan solo se preguntaba, ¿Quién era ese alfa que estaba a su lado?, ¿Su pareja?, ¿Lo estaba cortejando?, porque estaba....¿Celoso?.....su lobo seguía rasguñando por querer tenerlo ya entre sus brazos, salió de su ensoñación cuando su amigo lo sacudió trayéndolo a la realidad.

—Hoseok...¿Qué pasa?

—Yo.....¿Como?, ¿Qué haces acá?

Sin duda el destino es muy caprichoso y ninguno se salvaba de ello, ambos pensaban lo mismo, celosos de los amigos de ambos, el omega enojado por ver al alfa y este contenido por querer abrazarlo además de querer matar a aquel alfa que lo acompañaba.

¿No son sin duda el uno para el otro?

El omega sacudió su cabeza quitando cualquier otro pensamiento y entrelazó su mano con la de su amigo provocando que el alfa gruñera por la cercanía.

—Nosotros ya nos vamos.

Soltó saliendo lo más rápido de allí jalando a JiMin, de lejos se notaba que estaba nervioso y a la vez ¿Celoso?, lo quería negar, quería dejar de pensar en esas cosas, sobre todo en él. Llegaron hasta al jardín donde soltó su mano y casi se arranca los cabellos en ese momento.

—¿Por qué salimos rápido?

—Me sentía incómodo.

—¿Pero por qué? ¿Él no era el chico de...

—Si él era, me sentí extraño volverlo a ver.....después de años.

—Ya veo y el chico que llego a su lado ¿era su omega?

—Yo que mierda se Jimin, no tengo ni la más puta idea, ya te dije que no sé nada de él desde hace mucho tiempo y mejor dejemos de hablar sobre el tema, ya no me interesa, me importa una mierda saber de él.

JiMin se quedó callado, ¿Qué más podría decir también?, el omega necesitaba su espacio, necesitaba pensar y relajarse porque ahora se encontraba molesto y no quería que se desquitara con él pero hasta él mismo había visto como el alfa lo miraba, como esos ojos se llenaron de brillo y felicidad, de seguro por haberlo encontrado, solo la madre luna sabía lo que pasaría pero de que se extrañaban, se extrañaban no cabía duda de eso