四十二

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Gerard no me había vuelto a enviar mensaje o llamarme después de nuestra videollamada, si se le puede decir así. Comprendía que el estuviera ocupado trabajando, pero ya había pasado más de una semana desde aquello y no quería verme desesperada o peor aún fastidiosa. Iba tan perdida en mis pensamientos que no me había dado cuenta que llevaba el semáforo en verde casi un minuto completo hasta que comenzaron a tocar el claxon salí de mi trance. Me dirigía a la escuela, hoy sería mi primera clase de recuperación con el profesor Iero y estaba bastante nerviosa a decir la verdad.

Me estacioné lo más cerca posible al instituto, baje del carro y me dirigí al salón de clases asignado por el profesor. La clase estaba vacía, decidí sentarme en el mesa-banco que estaba hasta enfrente. Tratando de disminuir mis nervios prendí la pantalla de mi celular esperando a que Gerard me hubiese mandado mensaje, pero eso no había pasado, no tenía ninguna notificación en la pantalla. Suspiré irritada, el profesor Frank entro por la puerta, me acomode en el asiento y espere a que comenzará a dictar algo sobre lo que estudiaríamos, pero en cambio se sentó en su escritorio frente a mí y cruzó sus brazos llenos de tatuajes.

-Buenos días señorita Hamilton.- Podía sentir su mirada penetrante en mi.

-Bu-Buenos días profesor.- Podía sentir como me sonrojaba fuertemente.

¿Que me está pasando?

-La oferta sigue en pie.- Sonrió, seguía sentado en el escritorio.

No podía evitar no compararlo con Gerard, el profesor era unos centímetros más pequeño que Gerard, mientras que Frank tenía su piel repleta de tatuajes Gerard tenía la piel limpia. Ambos eran totalmente diferentes, lo único que compartían era el cabello negro largo y sedoso.

Era tentador la oferta que me había hecho unas semanas atrás, aún más con el hecho de que Gerard me estaba ignorado y eso me hacia querer decir que si.

-Si salimos en al menos 2 citas no tendrás que volver a venir a recuperación.- Lo observe realmente tentada a decir que si.

Si las cosas con Gerard nunca hubieran cambiado y siguieran como estaban anteriormente no hubiera dudado en decir que no, hubiera preferido mil veces venir dos semanas completas a clases cuando no tenía razón porque.

-Esta bien.- Susurré, rezando que Gerard nunca se enterará de lo que haría.- Saldré contigo en dos citas.-

-Perfecto, pasaré por ti a las 8:40.- Me acomodo un mechón de mi pelo detrás de mí oreja y acaricio mi mejilla.- Vístete formal.-

Beso mi el dorso de mí mano, camino hasta la puerta y se detuvo pasándose la mano por el cabello.

-Me alegra que eligieras correctamente.- Sonrió coquetamente antes de salir del salón.

[•]

Mis palmas estaban sudando, podía sentir mi estómago revuelto mientras observaba la pantalla bloqueada de mi celular mostrando que no tenía ningún mensaje de Gerard, Frank había dicho que ya se encontraba en camino y que llegaría en cualquier momento.

Escuché el timbre sonar y rápidamente me mire en el espejo que tenía en la puerta de mi cuarto, observé mi vestido negro de terciopelo, las medias negras que tenía y mis tacones gruesos. Me miraba bien, tenía que admitirlo, pero me remordía la conciencia el vestirme así de bien por otro hombre que no era Gerard.

Baje las escaleras, me limpie el sudor de mis manos en mi vestido pase, acomode mi cabello y le abrí la puerta al profesor Iero.

Tenía un ramo de lilas entre las manos y una sonrisa que aumentó su tamaño al verme.

Crybaby ♡ daddy kink ! [gaw]Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt