Sunflower 𖧷MY+JH𖧷

XIV

Los chicos corrían entre las calles de Seúl ¿Para qué? La sorpresa de Hoseok se encontraba cerca de ahí.

—Yoongi hyung...es tan...tan ¡Lindo!—. Chillo de alegría, acercándose a un banquillo.

—Sé que no es mucho, pero el tiempo en que no fui a visitarte trabaje un poco para poder comprar esto, espero que te haya gustado—. Dijó ocultando su cara por la vergüenza.

—Yoongi hyung, me alegraste el día desde que te ví en el hospital, gracias por tu esfuerzo—. Respondio Hoseok besando tiernamente la mejilla de su mayor. —Vamos, comamos juntos.

La sorpresa no era más que una cita entre Hoseok y Yoongi, en un parque, comían un poco de kimchi, brochetas y otras decilicias mientras charlaban.

La tarde paso en un abrir y cerrar de ojos, Namjoon aún no se presentaba y eso le preocupaba al menor.

El celular de Yoongi vibraba continuamente, varios mensajes llegaban sin parar.

La noche se presentó y las estrellas iluminaban junto a la luna aquel lugar.

—Es hora Hoseok, vamos—.

El menor pensó qué tal vez era hora de regresar al hospital, pero no fue así, la dirección que se tomó era la contraria.

—¿A dónde vamos hyung?—.

—A un lugar muy cercano, cuando lleguemos verás—.

Cerca de un lago se encontraba Namjoon con una máquina.

—¡Namu! ¿Que haces aquí?—. Pregunto entusiasmado el castaño.

El de tez morena apretó un botón con mucha emoción.

Los fuegos artificiales eran hermosos, iluminaban el lago y el brillo en los ojos de Hoseok no tenían comparación.

El castaño aplaudía con mucha emoción, era tan hermoso el cielo, las luces iluminaban las modernas calles de Seúl, un espectáculo increíble.

—Yoongi hyung ¿Tu preparaste esto para mí?—. Preguntó, tomando la mano del mayor.

—Si...—. Respondió apenado el pelinegro.

—Es el mejor regalo que me han dado en toda mi vida—. Agradeció Hoseok besando nuevamente la mejilla de su hyung.

Yoongi respiro profundamente, volteó su rostro hacia la dirección del menor y dijo firmemente.

—Hoseok te...—. Los fuegos artificiales retumbaron.

Las mejillas del menor estaban completamente coloradas y sus ojos se volvían cristalinos.

—Yoongi hyung......yo también te amo —. Respondio besando los rosados labios del mayor, tomando él la iniciativa.

Una explosión de emociones se manifestaba en ambos, una sensación desconocida, extraña y placentera, ninguno de los dos quería separarse, sólo deseaban permanecer así toda su vida.

Pero era hora de regresar al hospital, Yoongi aún no podía creer que aquel Sol correspondió a sus sentimientos.

—Mañana vendré a visitarte...—. Dijo el azabache aún ruborizado.

—Esperare con ansias—. Respondio el menor besando nuevamente los labios del mayor. —Nos vemos hyung—.

—Nos vemos mi Sol—.

🌻🌻🌻
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