XVIII

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—¿Qué pasa?—. Preguntó nervioso.

—....¿Podemos ocultar nuestra relación?, s-solo por ahora—.Propuso el castaño bajando la mirada. —Por favor no pienses que haz hecho algo malo, solo por estos momentos—.

Yoongi asentía decepcionado, pero no quería cuestionar sus razones.

La campana sonaba indicando que los alumnos tenían que regresar a clases.

—Es hora de que regresen a clases—. Menciono Yoongi dejando a los chicos para ir con el profesor de deportes.

—¡Yoongi hyung!—. Exclamó el castaño acercándose al mayor. —Te esperaré cuando termines tu entrenamiento—. Se despidió, besando rápidamente la mejilla del pelinegro, sin que nadie pudiera darse cuenta, a excepción de Taehyung.

Los ánimos del pelinegro habían regresado.

Taehyung se llevaba a Hoseok al salón, ahora ellos compartirían clases.

—¿Que clase toda ahora?—. Preguntó el castaño sentándose junto a su nuevo amigo.

—Realmente no es de mi agrado, pero toca inglés—. Respondio Taehyung sacando su libreta del morral. —Espero que seas bueno, porque yo soy pésimo recordando verbos—.

Los recuerdos del hospital llegaban a la mente del castaño, pues Jungkook no era para nada bueno en inglés y recordar cómo trataba de crear conversaciones con Jimin y Jin era más que gracioso.

—No te preocupes, te seré un poco de ayuda—. Sonrió. —Dime Taehyung ¿desde cuándo Yoongi y tú son amigos?n-no es que sea un entrometido, sólo qué nos conocemos hace 5 años...es raro no saber esto de él—.

—¿Hmm? Somos amigos de la infancia, cuando vivíamos en Daegu íbamos en la misma escuela pero él se mudó a Seúl y nos separamos por un largo tiempo—.

—¿Cuando volvieron a reencontrarse?—. Preguntó Hoseok aún más curioso.

—Cuando entramos al instituto, hace menos de un año—. Respondio Taehyung mirando hacia la puerta.

—Es cómo Namjoon y yo, nos separamos cuando teníamos 7 años y hace tan solo  poco tiempo nos volvimos a encontrar—. Divago el castaño sonriendo inconscientemente.

La clase había empezado, el profesor se presentó a la clase una vez más, era un profesor nuevo.

Las clases eran tediosas para Taehyung, pero Hoseok se notaba más entusiasmado y alegre.

La campana sonó por última vez en el día, indicando la salida para todos los alumnos.

—¿En dónde esperarás a Yoongi?—. Preguntó el peliazul, acomodando su lugar.

—Afuera del gimnasio, debo irme para llegar pronto. ¡Nos vemos Taehyung!—. Se despidió Hoseok saliendo del aula.

Los pasillos llenos de alumnos eran más que cansados.

El menor por fin veía la puerta del gimnasio, Yoongi salía con el cabello mojado debido al sudor.

—¡Yoon...!—. El castaño fue interrumpido por aquella chica de tez canela que había acorralado al mayor.

Yoongi buscaba con la mirada al castaño para zafarse de aquella situación.

Por fin aquellos cabellos castaños fueron vistos por el pelinegro.

—¡Hoseok!—.Exclamó agitando su mano una y otra vez.

La mirada de aquella chica representó lo disgustada que estaba.

—Es hora de irnos Hoseok. Lo siento Minsoo, pero estaré ocupado está semana, no me busques—. Yoongi tomó la mano de Hoseok para por fin salir del instituto.

Las risitas de ambos no podían ser escuchadas por el escándalo de los alumnos entre los pasillos.

—Ella no es tan mala cómo parece Hoseok, solo es un poco fastidiosa—. Rompió el silencio mientras trataba de recuperar el aire.

Hoseok asentía sin decir nada, su corazón volvía a punzar pero no eran tan fuertes como la última vez.

—Es mejor ir a casa Yoongi hyung—.

Sunflower  𖧷MY+JH𖧷  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora