43. Preparen el molcajete

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NICK: 

Después de todo no sé por qué me preocupé tanto por que papá me echara de casa, si casi ni estaba. Así que podría decirse que todo volvió a la normalidad una vez que se fue a Escocia para un nuevo documental. 

Pasé más tiempo con Josh, que no estaba satisfecho con mi explicación de por qué no había podido volver a casa. 

ㅡPorque no. 

ㅡ¿Pero por qué no? 

ㅡPues porque no. 

En cambio, Hunter ya no tenía tanto tiempo para mí. Pasaba, según mamá, toda la tarde jugando con Noa en el patio. En estos días se habían vuelto inseparables. Tanto así que Hunter aceptó cuando Noa ofreció enseñarle a bailar ballet como ella. 

Tanto así que los vi compartir un beso desde la ventana de la cocina. Pero tal vez no tanto, porque luego Noa gritó y se fue corriendo de vuelta a casa de los Maddox, y luego Hunter se echó a llorar. 

Apreté los labios para no reírme. Respiré muy profundo recordándome que yo era el adulto y salí a preguntar qué había pasado. 

ㅡNo volveré a amar ㅡ declaró Hunter tumbado en el suelo del barco con aspecto dramático. 

ㅡ¿Ah, no? ¿Por qué? 

ㅡLas mujeres son crueles. Les das tu corazón y ellas te dan popó de bebé. 

ㅡ¿Por qué popó de bebé? 

ㅡPorque apesta mucho. 

ㅡTiene sentido ㅡ me senté a su lado ㅡ. ¿Y dices esto por... Noa? 

ㅡNo digas su nombre, que hieres mi corazón. 

Pensé en la Rosa de Guadalupe. 

ㅡ¿Quieres contarme qué pasó? 

Me miró en silencio por un momento. Traté de mostrarme serio y genuinamente interesado, aunque por dentro me partía de la risa. 

ㅡEstá bien, pero no le digas a mamá ㅡ tomó aire ㅡ. Es que Noa dijo que somos novios porque pasamos todo el día juntos, y que los novios se besan. Y nos besamos, pero ella gritó y se fue ㅡ se quedó pensando y sentándose de golpe con un ápice de esperanza, preguntó: ㅡ ¿Eso es normal? ¿Peige grita cuando la besas?

ㅡNo. 

Ella muerde, pensé. 

Hunter resopló decepcionado y se dejó caer nuevamente. 

ㅡ¿Qué voy a hacer ahora? 

ㅡOye, eres joven ㅡ le di un golpecito en su pequeño hombro ㅡ. Hay muchas sirenas en el mar, todavía te queda una vida por delante. 

ㅡPero yo la quiero a ella. 

ㅡPero tienes seis años. 

ㅡPara el amor no hay edad. 

ㅡSi de algo sirve, ahora tendrás más tiempo para jugar con Josh y Carlos. 

ㅡ¡Oh, es cierto! ㅡ se levantó de un brinco ㅡ ¡Adiós!

Oh, vaya, todo fuera como eso. 

***

No hay nada como las vacaciones de invierno. Estar en pijama todo el día y tomar chocolate hasta reventar. Este era el último día de clases y en la escuela ya había un ambiente decembrino donde algunas personas iban por ahí dando regalos navideños a sus amigos, y donde otros simplemente ya no asistían, como Charlotte, por ejemplo. Una semana atrás me dio un bastón de dulce y dijo que la última semana de clases es para nerds, antes de no volver más. 

¡Ella me acosa!Donde viven las historias. Descúbrelo ahora