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Alba:
-¿Natalia?-pregunte sorprendida.

-Hola-susurro.

-¿Pasa algo?-pregunté preocupada.

- En realidad es que venía a hablar contigo Reche- dijo sin apartar los ojos de mi.

-Pasa-añadí haciéndome a un lado de la puerta.

-¿Estás sola?-pregunto cuando entró al salón.

-Si, sabela trabaja ya lo sabes y maria bueno.. es un espíritu libre- bromee.

Curvo levemente la comisura de sus labios dejándome ver una tímida sonrisa.

-¿Querías decirme algo ?-insisti ansiosa.

- En realidad tenía un discurso pensado que quizá te dejase sorprendida pero creo que sólo puedo hacer una cosa.

Y antes de dejarme decir nada sus labios cubrieron los míos despacio. Me beso con delicadeza mientras acariciaba mi mejilla pero tuve que apartarme.

Apoyé mi frente sobre la suya y suspiré recobrando el aliento.

- No podemos Natalia-susurre.

-¿Por que?- dijo en el mismo tono.

-Soy muy mayor y tú eres menor de edad-añadí.

-Mirame Reche-pidió.

Levante la vista de sus labios dejándola en unos ojos marrones que me miraban intensamente.

- No me importa en absoluto que tengas 24 años y yo 17 . Contra todo pronóstico me gustas rubia-añadió.

Me hizo sonreír su confesión pero deseche la idea de revelar que yo sentía lo mismo.

- No podemos, de verdad que no-dije de nuevo.

-Hagamos un trato-añadió-dejame demostrarte que podemos hacerlo que no está prohibido,  déjame intentarlo al menos-suplico.

-Natalia de verdad que yo...

Pero no me dejo acabar , colocó su dedo sobre mis labios cerrando la puerta a mi palabras.

- No pongas más escusas Reche, no te voy a pedir matrimonio sólo quiero que me dejes demostrarte que no soy una cría como cres-dijo.

- No es por que seas una cría Natalia, es que encima eres menor de edad Dios mio , puedo meterme en un gran lío-añadí.

- Me gusta vivir al limite-susurro con una sonrisa prepotente.

Golpee su hombro de broma mientras ocultaba una sonrisa estúpida.

- Pero a mi no Natalia, déjame pensarlo ¿Vale?, no prometo nada -dije.

Asintió no muy convencida y colocó sus manos en mis caderas acercándome a ella. Nuestras narices rozaban y podía notar el calor de sus labios quemar los míos.

-Puedo esperar hasta que te decidas pero no hagas lo que otros quieran que hagas rubia, tu eres la única que puede decidir lo que quiere hacer-finalizo antes de besarme nuevamente.

-Para por favor,  no hagas esto más difícil-suplique mientras la empujaba levemente .

Suspiro y dejó un beso en mi mejilla antes de abandonar el piso.

"¿Qué clase de broma es esta? Pensé .

Por la forma en que sus ojos me miraban supe que cada palabra que me decía era cierta, quería demostrarmelo pero yo no quería tener problemas.

Aparte de la ilegalidad que suponía mantener relaciones sexuales con una adolescente también estaba el tema de mis miedos personales.

Aún que parezca insignificante el hecho de que mi ex prometida me abandonase de tal manera quedo en mi subconsciente grabado a fuego.

Desde aquel momento nunca volví a tener una relación sería y ya habían pasado dos años de aquello.

Aún que sabía que con la joven Lacunza no tendría nada serio me acojonaba sólo de pensar que algo asi pudiese pasar. Me jure no volver a enamorarme nunca e iba a cumplir mi juramento.

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Hola

No matarme

Os quiero

¿Qué hará Natalia?
¿Cumplirá Alba su promesa?
¿Se dejará llevar?

Descubramoslo

-BLUE💙

TODO CAMBIÓ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora