El cabaret de los hombres perdidos (TERMINADA)

La esperanza es lo único que nos queda

Paul: (entra alterado a la habitación) Hay nuevos presos!! (Traga saliva con dificultad) Dijeron que uno es argentino
Nico: (se sienta de golpe) Argentino? Cómo es? Lo viste?
Paul: De lejos. Lo sé por lo que se rumorea
Nico: (se levanta de la cama) Tengo que verlo
Paul: (lo frena) Estás loco?
Jean: Paul tiene razón Nicolás, no importa
Nico: Y si es Diego?
Jean: (se mira con Paul)
Nico: Tengo que descubrirlo (se va caminando rápido)
Jean: (lo sigue)
Paul: (va con ellos también) Y si no es?
Nico: Pero y si es, qué? Si nos preguntan donde vamos, decimos que nos mandaron limpiar los baños inmediatamente, me escucharon?
Paul: (asiente)
Nico: Perfecto. Hace mucho los viste? Deben tener ya una habitación asignada?
Paul: No
Nico: Entonces vamos a la zona de recién llegados (giran a la derecha)
Jean: Un día nos mataran por tu culpa
Nico: Aún falta mucho para eso Jean, tranquilo. Vigila. Paul, ayudame
Paul: (se agacha y coloca las manos)
Nico: (pone un pie)
Paul: (lo impulsa)
Nico: (se agarra a la repisa de la ventana y hace fuerza para arriba) Aaaagh
Jean: Deprisa
Nico: La puta madre, maldito el día en que aprendiste castellano Jean (mira)
Jean: Hay algo?
Nico: Sí, veo mucha gente...a ver para
Paul: Está Diego?
Nico: No lo veo...lo veo!! Lo veo sí, es Diego (se intenta bajar)
Paul: (lo ayuda)
Nico: Gracias (le da una palmada en el hombro) Hay que esperar a que lo saquen de ahí, lo seguimos y vemos donde lo van a meter
Paul: Con los demás judíos
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Alberto: (entra en la habitación) Emilia, desperta. Nos vamos
Emi: (abre los ojos molesta. Se frota el ojo derecho) A donde vamos? (Bosteza)
Alberto: (abre el placard y saca algunas prendas de abrigo) No lo sé todavía pero es peligroso estar acá. Estuvimos hablando con Louisa y tiene razón, si se llevaron a Diego lo más lógico sería que no hubiera nadie en su casa. Te pensás que no saben que vivía acá? Estos tipos controlan todo
Emi: (se levanta pesadamente) Pero si no sabes dónde vamos es peligroso
Alberto: Louisa habló sobre una pensión a las afueras
Emi; Y como vamos a llegar hasta allá?
Alberto: Con un auto
Emi: En mitad de la noche?
Alberto: No. Por el momento vamos a ir a una que queda a unas cuadras de acá y mañana partimos hacia la otra
Emi: Vos estás seguro de que está tal Louisa es de confianza?
Alberto: Lo que nos contó parece bastante real
Emi: Sí, no sé...no sé
Alberto: Qué no sabes? No tenemos más opciones que confiar en ella, tiene razón, en algún momento se van a dar cuenta de que hay gente acá y van a venir a por nosotros
Emi: Está todo tan raro que ya no sé en quien se puede confiar, y en quien no
Alberto: Te dio mala sensación?
Emi; No
Alberto: Entonces? Dale vamos y deja de pensar tanto, no tenemos tiempo (se va)
Emi: (lo sigue) Para para Alberto (se apoya en la pared)
Alberto: Que?
Emi: (estira un brazo hacia el)
Alberto: Te sentís mal? (Deja las cosas y la agarra del brazo)
Emi; (se desmaya)
Alberto: (la agarra) EMILIA!! La puta madre
Malena: (sube corriendo) Que pasó?!
Alberto: Se desmayó
Malena: Es normal en su estado, tranquilo. Vamos a llevarla a la cama
Alberto: (la lleva) Cuanto más prisa tenemos, más cosas pasan (bufa)
Malena: Bueno che las cosas biológicas no avisan, pasan y punto
Louisa: (sube apurada. Se acerca a la cama preocupada)
Malena: Está bien. Es por el embarazo (hace signos de panza)
Louisa: (asiente) La puedo revisar si quieren. Soy ayudante de enfermera
Malena: Enserio? Buenísimo!
Louisa: (se sienta a su lado y le busca el pulso en la muñeca. Después le inspecciona la panza presionando en varios puntos)
Alberto: Está todo bien?
Louisa: Cuanto mes?
Alberto: 4 meses?
Malena: Sí
Louisa: Ajam (le levanta la ropa para verle la panza) Parece bien
Emi: (se comienza a despertar)
Malena: Es mejor que la dejemos descansar
Alberto: (suspira) Ok, ok la dejamos descansar. Me voy a dormir yo también. Mañana salimos a las 5:55. Deberian irse también a dormir ya. Mañana las quiero puntuales (se va)
Louisa: Enojado?
Malena: Sí, no sé, quien entiende a los hombres. No importa
Louisa: (mira a Emi) Bien?
Emi: (asiente) Un poco mareada, pero tenemos que irnos (trata de levantarse)
Louisa: Nicht / No
Malena: Salimos maña muy temprano. Descansa. Nosotras nos vamos también a dormir ya
Louisa: (se para) Gute nacht (se va)
Malena: Buenas noches (se va apagando la luz y entrecerrando la puerta)
***
Alberto: (se saca la camisa)
Malena: (se acerca y le pone las manos sobre los hombros. Las desliza por el pecho de él y le da un beso en el cuello) A veces las cosas no salen como uno quiere
Alberto: Tengo mucho miedo por todos. Louisa tiene razón en lo que nos dijo que irnos de acá (se da vuelta) Alguien le pone la mano encima a alguna de las dos y yo me muero
Malena: (sonríe y le da un pico) Mañana vamos a salir muy temprano, va a estar todo bien
Alberto: Eso espero
Malena: (lo besa)
Alberto: (sigue el beso)
Malena: (apoya la frente con la de él rozandole la nariz)
Alberto: Por qué tan mimosa?
Malena: (se ríe) Tan raro te parece? Lo decís como si fuera una arisca
Alberto: Pero estás de más (la besa llevandola para la cama)
Malena: (cae con él arriba. Le acaricia la cara) No puedo hacerle unos mimitos a mi novio? Creo que los necesitamos en un momento como éste. Hay mucha tensión, mucho miedo. Está bueno que nos relajemos un poco (le mira la boca) No te parece?
Alberto: (sonríe) Me parece. Me re parece
Malena: (sonríe)
Alberto: (la besa intensamente)
Malena: (lo sigue enredando los dedos entre el pelo de él. Enreda las piernas en la cadera de él)
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Jean: Estoy cansado de ser siempre el que vigila
Nico: Yo te enseñé castellano para conquistar a aquel español, te acordás? Me debes muchas
Jean: (bufa)
Nico: (se cuela en la habitación y se acerca a la cama de Diego. Lo mueve un poco)
Diego: (abre los ojos)
Nico: (le tapa la boca) Shhh soy Nicolás (hablando en susurro)
Diego: Nicolás
Nico: (sonríe) Sí, soy yo
Diego: (se le humedecen los ojos) Nicolás (le pone la mano en la cara)
Nico: (se ríe un poco) Quien diría que nos encontraríamos acá, no?
Diego: (se sienta y se abrazan) Dios no lo puedo creer  (lo mira) Estás bien
Nico: Y los demás chicos del cabaret también. Vos en cambio no estás muy...te golpearon?
Diego: Bastante (suspira)
Nico: Son unos hijos de puta
Diego: Como sabías que estaba acá?
Nico: Esto es como un pueblo, todo se sabe. No es muy grande el lugar
Diego: (se ríe un poco mirandolo)
Nico: Qué?
Diego: (niega con la cabeza) Cosas mías. Se puede hacer algo para mandar cartas fuera de acá?
Nico: Cartas? Para que?
Diego: Nicolás, Emilia está acá, en Berlín. Vino a buscarte
Nico: Qué?
Diego: (asiente) Te estuvimos buscando pero resulta casi imposible localizar a la gente que está acá dentro
Nico: Que hace acá? Está loca?
Diego: (sonríe) Muy loca
Nico: Y como está? Está bien?
Diego: (asiente) Muy bien. Quiero contarle que estás acá. Le hará bien saberlo
Nico: Podemos tratar de enviar esa carta pero es un poco difícil, está todo muy vigilado. Voy a ver qué puedo hacer
Diego: (asiente)
Nico: (sonríe) Emilia, Emilia
Diego: (le pega flojito en la cabeza)
Nico: (se ríe)
Diego: (sonríe) Si salís de acá, te pido por Dios que la cuides
Nico: Si salgo? Y vos qué? Los dos vamos a salir
Diego: Estoy viejo ya Nico, no aguanto igual que vos
Nico: Hay que tener esperanza
Diego: (asiente) Ojalá fuera fácil
Nico: Lo es. Hace tiempo que venimos pensando como escaparnos, sabes? Y no es tan difícil
Diego: Es difícil enviar una carta y no es difícil escaparse?
Nico: (sonríe)
Diego: (niega con la cabeza) Sos de terror. Nunca pensé que me alegraría tanto de verte
Nico: Ey
Diego: (sonríe) Es un chiste. Me hace bien que estés acá, sabes?
Nico: Lo mismo digo. Cualquier cosa, estoy acá (le da un papel)
Diego: (lo mira y asiente)
Nico: (le pone la mano en el hombro) La esperanza es lo único que nos queda
Diego: (lo mira a los ojos)
Nico: (lo abraza)
Diego: Como está tu mamá, por cierto?
Nico: (se separa) No sabe nada todavía, al menos eso creo. No sé qué hacer
Diego: De todas formas es una mujer fuerte
Nico: Lo sé. Es lo único que me deja tranquilo
Diego: De última, por ahí Emilia va a visitarla, nunca se sabe
Nico: Ojalá. Se llevarían bien ellas dos, son parecidas
Diego: (asiente)
Nico: (saca un papel del bolsillo. Lo abre)
Diego: (lo mira)
Nico: Lo dibujó Paul (le muestra el dibujo de Emilia)
Diego: Es increíble, parece una foto
Nico: (sonríe) Sí (queda mirando la foto) Si no fuera por las marcas de lágrimas. No le digas a nadie pero cada noche miro el dibujo y lloro en silencio. Puede parecer ridículo pero...estar acá, no saber cómo está, si es feliz, si encontró a otro, si se olvidó de mi. Todo eso me mata. Lloro de importancia. Me tendría que haber ido con ella cuando me lo dijo
Diego: Ahora ya es tarde para arrepentirse. Está muy bien, te lo prometo y como ves, no te olvidó
Nico: (sonríe un poco)
Diego; No veo la hora de que puedan volver a verse, creo que tiene mucho para contarte
Nico: Qué?
Diego: No puedo hablar. Ella tiene muchas ganas de contarte. Es una buena noticia, te lo aseguro
Jean: Psss
Nico: Ese es Jean
Jean: (entra en la habitación rápido) Vienen
Nico: Mierda mierda mierda... (Mira a su alrededor)
X: Ch, aquí!! (Levanta unas maderas del piso)
Nico: Gracias! (Va corriendo y se mete)
Jean: (se mete a su lado)
X: (cierra y se mete de nuevo en la cama)
👤: (entra con la linterna e ilumina el interior. Camina un poco por la habitación para asegurarse que todos duermen)
Jean: (aguanta la respiración)
Nico: (lo mira. Le agarra la mano y traga saliva)
👤: (pasa por encima de las maderas. Se va)
Jean: (respira aliviado)
Nico: (le suelta la mano y respira profundamente)
Jean: (lo mira)
Nico: (le sonríe un poco)