El cabaret de los hombres perdidos (TERMINADA)

La persona indicada

Unas semanas después...

Emi: (abre la puerta)
Martha: (la abraza)
Emi: ...
Martha: (se separa) Perdón. Martha. Nicolás me hablo mucho de vos, es como si te conociera desde hace mucho
Emi: (sonríe) Tambien a mí me habló de vos. Adelante. Bienvenida
Martha: Gracias (entra) Que linda casa
Emi: Gracias. Nicolás está arriba jugando con Celeste. Voy a buscarlo
Martha: No, no hace falta. Estuvo tanto tiempo separado de ella. Mejor te ayudo a vos (deja su carrera y su abrigo sobre el sillón)
Emi: Vení por acá (la lleva a la cocina) Me dijo Nico que preparara algo típico de acá. Espero que te guste
Martha: Huele muy rico
Emi: Estaba con el postre
Martha: Genial. El baño? Me lavo las manos y te ayudo
Emi: Arriba
Martha: Gracias (va)
Diego: (entra en la cocina arreglandose la empuñadura de la camisa) Vida, salgo
Emi: Donde estabas vos?
Diego: En el despacho terminando de rellenar unos papeles para una entrevista de trabajo
Emi: Una entrevista de trabajo?
Diego: Sí. Tengo que conseguir plata para mudarme
Emi; Papá...
Diego: Estoy grande para charlas de este tipo
Emi: (suspira) Está bien, hace lo que quieras. Solo me preocupo por vos porque tenés una edad y estás muy castigado, pasaste mucho tiempo en el campo
Diego: Todos esos temas, son cuestión de actitud y mentalidad. Uno es tan joven como se siente y yo me siento un nene
Emi: (se ríe) Ah bueno, genial, entonces adelante. Dónde vas ahora?
Diego: A comer con Alma
Emi; Ojito eh
Diego: (sonrie) No te prometo nada (le pellizca la nariz y se va)
Emi: (abre la boca tentada mirandolo irse)
Celeste: (entra a la cocina) Ma, ya llegó la amiga de papá? Me preguntó él (mete el dedo en el postre)
Emi: Celeste!
Celeste: (se chupa el dedo sonriendo) Está rico
Emi; (sonríe) Sí, llegó ya. Está lavandose las manos
Martha: (entra en la cocina) Hola
Celeste: Hola
Emi: Es ella
Martha: Martha
Celeste: Voy a avisar a papá (se va)
Martha: Se parece mucho a ustedes. A los dos
Emi: (asiente)
Martha: Bueno, que hago? (Se acerca)
Emi: Corta estas frutillas. Que bien hablas castellano, no?
Martha: (asiente) Hablaba mucho con Nicolás
Emi: Ah
Martha: (la mira) No tengas celos. Está enamorado de vos. Enserio
Emi: (la mira)
Martha: Entiendo que no te gusta que sea su amiga, pero...
Emi: Para nada Martha, no. Es más, te tengo que dar las gracias por todo lo que hiciste por él
Martha: Al principio estaba enamorada. Nunca te enamoraste de un actor de cine? Más o menos igual
Emi: Lo que sería un amor platónico
Martha: Sí. Pero él te ama a vos entonces nunca me miró. Además soy una nena en comparación con vos
Emi: Bueno, tan nena no sos
Martha: Para él sí. Cuando me enseñó una foto tuya entendí todo. Sos hermosa
Emi: Gracias. Vos también sos muy linda
Martha: Te parece?
Emi: Claro que sí
Martha: No sé
Emi: Que no sabes?
Martha: Es que hasta ahora me fue tan mal en el amor...va, no me fue, nunca tuve nada con nadie
Emi: Porque no apareció la persona indicada
Martha: Y si no aparece nunca?
Emi: Sos muy joven aún Martha. Cuántos años tenés?
Martha: 23
Emi; Viste? Sos muy joven, tenés mucho tiempo aún. Tal vez lo encontrás acá, en Argentina. Querés que salgamos algún día y te fijas si hay alguno que te gusta? Hasta cuándo vas a estar acá?
Martha: (sonríe) Vos harías eso por mi?
Emi: Obvio, hace mil años no salgo por la noche. Malena trabaja en un bar al lado de un cine. Podemos ir ahí
Martha: Me encantaría
Emi: El sábado te va bien?
Martha: Perfecto. Y como me visto? Puedo ir con pantalones?
Emi: (sonríe) Querés ir con pantalones?
Martha: Sí. Vi mujeres que los llevan y me gusta
Emi; Anda con pantalones entonces
Martha: Si mi familia se entera, seguro me matan
Emi: Pero no se van a enterar (le guiña el ojo)
Nico: (entra en la cocina) Ya veo que me cambiaste
Martha: (deja las cosas) Nico (va a saludarlo)
Nico: Llegaste temprano, no?
Martha: Quería ayudar
Nico: Doy por hecho que ya se presentaron y todo
Emi: En realidad no hizo falta. Nos conocíamos bastante la una a la otra. O no?
Martha: Sí. Estamos haciendo un postre
Nico: Veo. Que rico (mira a Emi) Y que onda? Bien?
Emi: Bien, sí. Qué me miras con esa cara?
Nico: Nada, nada. Las dejo que sigan con el postre. Yo voy preparando la mesa (le da un pico a Emilia y se va fuera)