El cabaret de los hombres perdidos (TERMINADA)

Creo que sos un ángel

Alberto: Te veo en otra, se puede saber qué te pasa Emilia?
Emi: Mira, en otro momento te habría mentido y habría respondido "nada" pero no me sale. La fiesta tiene que acabar ya
Alberto: (se ríe un poco) Que decís? Sabes lo que nos costó armarla?
Emi: Alberto, estoy muy agradecida, pero no es un buen día
Alberto: Para vos no hay buenos días desde que volvimos de Alemania
Emi: (suspira) Perdón
Alberto: No tenés que pedir perdón. Solo disfrutar la fiesta. No es tan difícil. Hay comida para todos los gustos, música en directo, gente feliz. Qué más querés?
Emi: (va a responder)
Alberto: No hace falta que respondas, te leí la mente
Emi: (sonríe) Te iba a decir que nada, listo (lo abraza de lado) Gracias por todo
Alberto: (le da un beso en la cabeza) Solo queremos verte bien
Emi: (asiente)
Alberto: El cumpleaños solo pasa una vez en el año, pensalo, no deberías perder tanto tiempo. Además nunca más vas a cumplir 31 (le ofrece la mano) Bailas?
Emi: Anda a bailar con Malena mejor, creo que le hará más ilusión
Alberto: Con ella bailo cada noche. Preparamos el tocadiscos y nos dejamos llevar al compás del jazz o del vals, abrazados
Emi: No sé si quiero tantos detalles (sonríe) Bailemos mejor y deja de hablar (le da la mano)
Alberto: (se ríe y le da vueltita) Te sienta perfecto el vestido

• FLASHBACK •

Nico: Le gustaría que ponga algo de música?
Emi: (medio ida) Jazz
Nico: Por supuesto. Tiene muy buen gusto (se acerca al tocadiscos y después de mirar un par de vinilos se decide por uno. Lo pone y la invita a bailar)
Emi: (sonríe y accede)
Nico: (muy suavemente coloca sus manos en la espalda de ella)
Emi: (le rodea el cuello con los brazos)
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Emi: (se ríe)
Alberto: Qué?
Emi: Me acordaba de cuando...nada, deja, no importa
Alberto: No, decime
Emi: Mejor que no (lo suelta) Voy a por algo de tomar, tengo la boca seca (se acerca a la mesa de bebidas y llena un vaso)

La fiesta llegó a su fin, como toda fiesta. Aunque a Emilia le parecía que no terminaba nunca y es que, el tiempo pasa tan lento para los que esperan...

Diego: (saca los últimos platos de sopa a la mesa)
Emi: (se sienta) Bueno, tengo que contarles algo ahora que al fin estamos tranquilos
Diego: (se sienta)
Emi: Tarde o temprano lo van a saber así que prefiero que sea ahora (mira a Alma)
Alberto: No arranques a dar vueltas, hablá
Emi: Nicolás volvió
Alma: Qué?
Emi: Lo vi. Estuvo acá
Alma: (mira a Diego)
Diego: (baja la mirada) Mi vida
Emi: No me lo estoy inventando. Lo vi. Lo abracé, lo besé
Alberto: (carraspea y baja la mirada al plato)
Emi: (los mira) No me creen, no?
Malena: Yo...yo ya te dije lo que te tenía que decir. Está en Alemania, no puede estar acá
Alma: Si volvió, por qué no vino a saludarme?
Emi: No lo sé
Alma: (suspira y come sopa en silencio)
Diego: Emilia, creo que lo imaginaste. Entendemos que tenés muchas ganas de qué esté acá pero...
Emi: (sonríe molesta) Estás insinuando que estoy loca?
Diego: No, no nada que ver
Emi: Yo sé lo que vi. Celeste tambien lo vio. Quieren que la despierte para que les cuente? (Separa la silla de la mesa)
Diego: No, no deja
Emi: Mañana mismo voy a ir a buscarlo al hotel y lo voy a traer
Diego: Por qué mejor no comes? Se te va a enfriar
Emi: No tengo hambre (se levanta y se va)
Diego: (se mira con los demás integrantes de la mesa. Se limpia las manos y va a buscarla) Hija (llama a la puerta)
Emi: No estoy
Diego: (sonríe y abre) Y entonces quien me respondió? (Entra y se sienta a su lado) Yo sé que tenés ganas de que esté acá, pasó mucho tiempo, pero...
Emi: (se sienta de golpe) Si no lo inventé en 9 años, por qué lo voy a inventar ahora? No tengo 10 años
Diego: No digo que lo inventaste, digo que a veces, la mente humana es compleja y...
Emi: Si me vas a seguir tratando de loca, andate por favor. Gracias (se deja caer de nuevo sobre la cama)
Diego: No es de loca, es solo que quiero que entiendas que tú imaginación, te está jugando una mala pasada
Emi: (no responde)
Diego: Y lo peor es que no solo te afecta a vos, le afecta a Alma tambien
Emi: Te dije que Celeste tambien lo vio
Diego: Pero entendes que es imposible? Es imposible
Emi: Por qué? También era imposible que vos salieras del horror y lo hiciste, por qué él no puede haberlo hecho también?
Diego: Porque...porque...
Emi: Lo ves? No sabes ni qué decir. Vos no querés que vuelva, no? Es eso. Una vez me lo dijiste, no te gusta Nicolás
Diego: No digas estupideces, lo adoro. Lo conozco desde bebé, lo que no me gusta es que se acerque tanto a vos
Emi: Llegaste tarde, tenemos una hija
Diego: (suspira. En silencio mira algún punto en el piso durante un minuto. Se levanta y se va)
Alma: Y?
Diego: Insiste y no da su brazo a torcer. Está muy segura de que vio a Nicolás
Malena: Y si es verdad? Digo...vos volviste Diego, él también puede volver, o no?
Diego: Sí, puede
Alma: (se levanta y también se va)
Diego: (baja la mirada)
Alberto: (la mira irse)
Diego: La entiendo. Todo esto la debe sobre pasar
Malena: (suspira y come la sopa)
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