DADDY [Dean Winchester]

16. Viaje Express

[Dos semanas y algo después...]

Despierto cuando el ruido de la mañana interrumpe mi buen sueño y lo primero que escucho claro es el suave tintineo de la vajilla chocando y el lejano sonido de una conversación en la planta baja, seguramente de mamá y Dean como todos los días Sábado por la mañana. 

Sintiéndome consciente de mi hedor matinal y de mi cabello despeinado, decido salir de mi cama de una vez por todas e ir a bañarme antes de bajar a desayunar. 

Cada vez que sé que Dean está en casa, tengo que estar presentable.

Las cosas han estado extrañamente calmadas estas últimas semanas, mamá ha estado ocupada con su trabajo, Sam solo estuvo unos días y luego volvió a California; por cierto tuve que volver a prometerle que no abriría la boca respecto a sus sentimientos ocultos.

A Dean lo he visto algunas veces al almuerzo y otras solo cuando viene a quedarse con mamá. Escuché que él también ha estado ocupado con lo de su taller mecánico y eso. 

Mis amigas vienen de vez en cuando a mi casa, o a veces decidimos salir a tomar algo a mitad de semana. Anna sigue al día con todo mi asunto por supuesto, y cuando vio a Dean por primera vez y se presentaron de manera oficial, dijo haber comprendido mejor el por qué de mis locos y confusos sentimientos hacia mi "daddy" como lo llama ella.

Jack, por otra parte, se ha convertido en un gran amigo poco a poco, y me ha ayudado bastante a olvidar mis prohibidos sentimientos hacia mi nuevo padrastro, al menos por momentos. 

Aún no le he contado nada en absoluto sobre Dean además de que es el novio de mamá. No creo poder hacerlo, y siento que tampoco necesito hacerlo. 

Jack me gusta, no lo niego. Pero lo que siento por Dean es... joder, mil veces más intenso. 

Yo mientras tanto, he estado yendo a mis clases de baile, pasando tiempo en casa de Anna o de Jack, encerrada en mi cuarto viendo la televisión, o haciendo cualquier cosa lejos de casa; evadiendo así la presencia de Dean y a la vez, cualquier sentimiento fuera de lugar que el rubio pueda llegar a provocarme.

Recostada en la pared de mi ducha, dejo que el agua caliente corra por mi piel. Me siento refrescada de inmediato, y mientras vuelvo a enjabonarme una vez más, trato de planear qué haré hoy para evitar los ya repetidos "Sábados en familia". 

Mientras me mojo rápidamente el cabello enjuagándolo por última vez con shampoo, escucho algunos ruidos que vienen del exterior, pasos subiendo la escalera al segundo piso. 

Se sienten más pesados ​​que los de mamá, así que asumo al instante que solo puede ser Dean. 

Un suave golpeteo de nudillos contra la puerta de mi baño me hace sobresaltar y detener rápidamente la caída del agua.

-¿Mad? -escucho la voz de Dean desde afuera y de inmediato mi corazón se acelera. 

-¿Si? -respondo obligándome a reaccionar a tiempo.

-Melanie pregunta si quieres algo en especial para tu desayuno, yo estoy haciendo tocino y huevos revueltos -dice animado.

-Amm... -frunzo el ceño. -No quiero nada especial en realidad, gracias -río. -¡Aunque un poco de cereal y yoghurt estaría bien! -digo aún medio confundida. 

¿De cuándo mamá me pregunta qué quiero para el desayuno?

-¿Quieres algún cereal en particular? Puedo dejarlo en la mesa para ti -ofrece.

-Amm, no... no te preocupes Dean, no tienes que hacer eso -digo tímidamente, sintiendo muchas emociones distintas a la vez. 

-Hey, sé que no tengo que hacerlo, pero quiero. Déjame ser útil mujer -lo escucho reír entre dientes desde el otro lado.