Capítulo 29

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Los años pasaban y pesaban, a Dilaşud, ya no era aquélla joven enamorada de Ahmed, ahora ya era abuela,  tenía años esperando a que Mustafa tuviera piedad por sus hermanos y los liberará pero ahora eso era imposible, sus hijas poco a poco se despegaban de ella, las menores se estaban por casar y las que ya lo estaban se estaban yendo de su lado.

Cada año que pasaba deseaba volver a tener a sus hijos pequeños, inocentes y puros, pero ya no se podía regresar el tiempo, Mustafa era cruel y eso lo demostraba siempre.

Dos años atrás Hoşyar se había ido con sus hijos a Manisa, Ümügülsüm y Rukiye también, al tener tantos varones se le hacía más fácil matar a sus hermanos, pero aún eso era imposible.

Dos años atrás Hoşyar se había ido con sus hijos a Manisa, Ümügülsüm y Rukiye también, al tener tantos varones se le hacía más fácil matar a sus hermanos, pero aún eso era imposible

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—¡Sultana!—dijo una alegré Hoşyar entrando a los aposentos

—Querida Hoşyar, al fin llegas—sonrió

—Ya hacía falta regresar, me he enterado de que su majestad esta desconfiando de Ümügülsüm

—Si, ya estamos cerca de deshacernos de ella—sonrió

—Hace tantos años que no venía, pero se que algo tiene ¿Puedo saber?—dijo

—Estoy enferma Hoşyar, siento que tarde o temprano moriré —confesó

—Allah no lo quiera—susurró —Mi amado hijo llegará mañana junto a su favorita y su hijo—sonrió, la joven Hoşyar ahora era abuela, pensó Dilaşud

—Allah los bendiga, Mihrişah y Rukiye llegaron ayer, quieren verte—dijo riendo

—Si, Nihal, Ayşe, Ismihan y Esmehan ya están aquí también —dijo riendo —casi se matan en la entrada

—Siempre lo mismo






—Pero que dices Onur paşa, te ordene que lo matarás, que lo quemaras vivo y al otro que le sacarás todo, ¿No entendiste a caso?—gritó Mustafa, la gente ya estaba Harta de su cruel actitud, mujeres, hombre y jóvenes eran condenados a muertes cruele...

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—Pero que dices Onur paşa, te ordene que lo matarás, que lo quemaras vivo y al otro que le sacarás todo, ¿No entendiste a caso?—gritó Mustafa, la gente ya estaba Harta de su cruel actitud, mujeres, hombre y jóvenes eran condenados a muertes crueles, ni los Ulemas o Jenizaros seguirían aguantando tanto, pero nadie podía hacer nada, solo Allah.


—Su Majestad usted sabe muy bien que matar a esos nombre  nos traería problemas—dijo con nervios

—¿Prefieres que te mate a ti?—dijo —Estoy Harto de esos rumores, bien sabes que la traición se paga con muerte, Ümügülsüm, Yusuf paşa y Halil agha tienen que morir.

Y en efecto, una criada que la valide mando a Amasya confirmo que Ümügülsüm había pasado varias noches con ambos hombres, pero las palabras de la criada aún no eran validas sin pruebas.

—Hijo—dijo Dilaşud

—¿Estas de acuerdo con que ejecute a Ümügülsüm?—Dilaşud sonrió, era su oportunidad de vengar a Murad

—Si, ¿Cómo es posible de que esa mujer tuviera un hijo cuando estaba en la provincia de su hijo lejos de ti?— lo miró —Matala

—Mañana que llegue se le encerrara, ahora vete quiero ver a Nihal—Dilaşud lo miró ofendido y luego salió

—Más te vale que tu no seas igual de víbora que Hoşyar —dijo Dilaşud viendo a Nihal

—No me compraré con esa mujer —susurró viéndola irse.






—Sultana, Zeynep Kalfa ahora se encuentra en la presencia de allah—dijo Meleki con tristeza, a Zeynep le pesaron los años, de todas las amigas de Atike sultán sólo ella estaba viva, Şah sultán murió tres años después de Atike, de las hijas de Atik...

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—Sultana, Zeynep Kalfa ahora se encuentra en la presencia de allah—dijo Meleki con tristeza, a Zeynep le pesaron los años, de todas las amigas de Atike sultán sólo ella estaba viva, Şah sultán murió tres años después de Atike, de las hijas de Atike sólo quedaba Hürrem y Raziye, poco a poco se iba perdiendo el legado de Atike y sólo quedaban pequeñas historias, cosa que no fue así, Zeynep semanas antes le había entregado un libro con las vivencias de su fallecida Sultana, ella quería que la recordarán hasta el final de los tiempos y así sería.




—Meleki, quiero que consigas a los mejores escritores, sacaremos varias copias del libro "la Sultana Olvidada" de Zeynep kalfa—sonrió triste—Fidan encargate de que Zeynep sea sepultada diganmente.

El Sultanato de Mustafa el cruel© Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora