capitulo 35.

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Los jenizaros lograron llegar y acabar con todos, Kösem miró con horror los cuerpos de sus hermanos  y sobrinos, jamás pensó que al ayudar a si mellizo a matar a Halime sultán iba acabar  en desgracia.

—Sultanas, estamos listos para destronar al sultán—dijo Alí agha.

—Orhan—lo miró— eres  el mayor ahora.

—Pero bien sabes que yo no seré el sultán —le susurró —ese ya no es mi derecho.

—Pero puedes ayudar, hazlo—dijo en un susurró.

—Está bien, vayan a la fortaleza, Mahmud tu te quedas—dijo serio y el joven asintió.

—Madre—dijo con preocupación.

—Hazme sentir orgullosa y mata a ese perro—dijo sosteniendo la mano de Alaadin

—Lo prometo—beso su frente y varios aghas ayudaron a llevar los cuerpos.

—¿Que hará con los cuerpos restantes?—dijo Mihrişah

—Cuando todo acabe regresaremos por ellos—dijo Kösem y se dirigieron al antiguo Palacio.

—Cuando todo acabe regresaremos por ellos—dijo Kösem y se dirigieron al antiguo Palacio

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—Hermana—dijo Mihrimah llegando hasta Kösem—¿Mehmet?—dijo en un susurró.

—Lo siento Mihrimah—susurró Kösem y Muazzez comenzó a gritar cuando miró a su hermano.

—¡Hermano! No, allah —grito—Mih, Şah, No—siguió gritando y Mihrimah miró con odio a Kösem.

—El perro de tu hermano hizo esto—grito—mato a mi hermano, maldito—sollozo.

—No es momento de echarse culpa—dijo Handan abrazandola

—¿Mis demás hermanos?—dijo Gülbahar con lágrimas.

—Están destronando a Mustafa, los que no posiblemente muertos—dijo Hoşyar en el suelo viendo a su hijo.

—¿Por que jamás vimos esto?— dijo Huricihan entre sollozos y se dejo abrazar por Dilruba.







Mustafa los esperaba desde sus aposentos, sabía que era el fin, se iría cómo lo que era, un sultán, un sultán que mato a sus hijos, hijas, hermos, hermanas y esposas, se iría cómo un sultán cruel e injusto, se iría cómo el sultán que prometió cuid...

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Mustafa los esperaba desde sus aposentos, sabía que era el fin, se iría cómo lo que era, un sultán, un sultán que mato a sus hijos, hijas, hermos, hermanas y esposas, se iría cómo un sultán cruel e injusto, se iría cómo el sultán que prometió cuidar a su família y fallo al matarla.

Mahmud y Orhan llegaron hasta el, Demir y los demás estaban a fuera peleando con los guardias de el sultán, los tres se vieron a los ojos y suspiraron.

Mahmud no quería matarlo, no quería ser cómo el, pero quería vengar a sus hermanos y hermanas.

Orhan tenía odio y resentimiento en su corazón, quería matarlo para poder vivir en paz.

Sólo había un camino, la muerte.

Mientras Orhan lo atacaba de frente Mahmud se escabullia por atrás y le clavaba la espada, Mustafa sólo pudo sentir el inmenso dolor.

—Mataste a mis hermanos, mis tíos y a varias sultanas, te admiraba más que a nadie, pero decidiste ser cruel—dijo Mahmud—Allah te perdone por que yo no.

—No me arrepiento de nada, lo volvería a hacer una y mil veces más—susurró cayendo de rodillas —todos merecían ese final traidores—y con eso último Orhan enfureció y le corto la cabeza.

Al fin eran libres, al fin una nueva era comenzaría.

—Su majestad—dijo Orhan de rodillas ante su sobrino, en sus manos tenía la espada, Mahmud suspiró, ahora el era el sultán.

Soy Mahmud, el favorito de mi madre y de mi abuela, soy Mahmud el nuevo Sultán, ese que hereda el trono maldito, el trono deseado por muchos y obtenido por pocos, soy Mahmud Khan.

Soy Mahmud, el favorito de mi madre y de mi abuela, soy Mahmud el nuevo Sultán, ese que hereda el trono maldito, el trono deseado por muchos y obtenido por pocos, soy Mahmud Khan

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El Sultanato de Mustafa el cruel© Donde viven las historias. Descúbrelo ahora