14.

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'¿Cuándo crees qué podemos repetirlo?'

...

Lo jodi todo.
Y cuándo me refiero a 'todo', es todo.

Dios mío, son estos momentos de 'trágame tierra'.

No hay nadie qué me salve de está mierda.

Justin no hablaba, nadie hablaba después de haber salido de la habitación. El coche estaba a su alta velocidad y miraba a todos lados menos a la mandíbula apretada, ojos completamente negros y llenos de rabia, nudillos blancos, y la expresión más dura qué he visto en toda mí vida qué estaba a mí lado.

Aparcamos bruscamente frente a la casa y Justin salió cerrando la puerta del coche tan fuerte qué estaba segura qué iba a caerse. Con todo mí cuerpo temblando igual qué hace una hora antes, salí cuidadosamente. Él no me espero, entro directamente a la casa y justo cuándo yo estaba detrás de él, lanzó la mesa de la sala de estar por los aires.

Luego los vasos de vidrio, las botellas, las sillas de madera, estaba rojo y respirando cómo un animal rabioso.

Iba a ser una larga noche.

...

Justin Bieber.

'El FBI llegó'  Tome uno de los vasos qué teníamos llenos de alcohol mientras discutíamos sobre una mercancía y lo estrellé contra la pared. 

'El FBI llegó'  Tome la botella exacta de la qué estábamos tomando y hice lo mismo.

'El FBI llegó' La TV se colocó en mí campo de visión y justo cuándo estaba a punto de tomarla para hacerla pedazos, unos brazos me agarraron.

— ¡La maldita televisión no, bro! — Escuche la voz de Christian mientras Ryan me agarraba fuertemente.

— ¡Suéltame! — Le grité pero no me hizo caso. Necesitaba sacar toda la ira y el miedo dentro de mí. Me estaba consumiendo, estaba volviéndome loco y cegado por romperle el rostro a alguien.

— Primero debemos saber todo lo qué le preguntaron y después rompes lo qué se te pegue la gana, pero por ahora contrólate. — Asentí lentamente mientras trataba en lo posible de reprimir mis ganas de matar, cerré mis ojos soltando un suspiro largo y dejando caer mis hombros.

Volteé a mirar a Emma quién me observaba con la misma expresión de está mañana. El remordimiento volvió, la forma en la qué me miraba con desprecio y odio de nuevo, la bofetada por haberle dicho qué era una cualquiera, cuándo dijo qué había cruzado una línea y se fue. Debería tatuarme en la maldita frente lo imbécil y cabron qué era.

Fui detrás de ella para qué me explicará lo qué sucedió con Dan y disculparme sí lo tome por el camino qué no era para luego enterarme de qué el maldito FBI fue a verla.

Extendí mí mano para qué la tomara y nos sentáramos pero ella sólo paso por alto el gesto y se sentó alado de Ryan.

— Está bien Em. Cuéntanos. — Ethan le dio una mirada de aceptación para qué hablará, sabía qué eso le daba a entender qué el idiota aquí ya estaba calmado.

— Cómo había dicho, el FBI llegó a la oficina para hacerme un par de preguntas. — Se tomo algunos segundos antes de seguir hablando. Podía sentirla nerviosa. — Más qué todo me preguntó cosas personales, cómo qué en dónde vivía y con quién, sí estaba saliendo con alguien, la relación con mis padres, algunas cosas de mí niñez y el desarrollo de mí empresa. 

— ¿Cuántos eran? — Mí voz la tomo por sorpresa porqué se corto.

— Dos, eran dos agentes. El más viejo se llamaba Brandon Thompson y el otro un poco más joven era James Blound. El último no hablaba, a decir verdad sólo me miraba cómo sí estuviera analizándome o desnudándome en su cabeza.

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