Historias De Elvirion "Corrupción"

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Lord Caranthir Dilorion _ ...Ultimo alquimista de la corte del Emperador Farendall II tras la marcha de Goblius. Sus aportaciones a la alquimia son  discutibles creando un conflicto entre los historiadores en si sus pociones fueron propias o falsificadas...

Segundo hijo de la casa Dilorion se interesó en la alquimia a la corta edad de 12 años supuestamente cuando mezcló diversos ingredientes para...solamente habiendo información de su infancia pues permaneció apartado de la vida publica creando un aro de misterio incluso con el propio emperador. Según las fuentes privadas de los pocos que lo conocieron, estas cuentan que conoció a Goblius Goroblin antes de la Primera Destrucción de Core y trabajó con el en la creación de la poción...

-Biblioteca Elderiana-

Era el segundo día de los duendes en Lighthold, el sol estaba saliendo, y Goblius ayudaba a Horiól a vestirse con ropa de ceremonia, siendo el joven duende el único en no estar familiarizado.

Horiól se contempló de forma dubitativa en el espejo, imitando los movimientos de su reflejo, luego se reia, casi avergonzado.

-Estoy raro- Dijo al fin.

Miro su adornada casaca de mangas largas hecha de finas y flexibles telas, con un ajustado cinturón de cuero. Luego, paso sus manos por su tieso cuello rodeado de una lechuguilla que se alzaba como una corola.

-Mi cabeza se parece a esas bolas que usan los niños del pueblo para jugar-

-Este es el tipo de ropa que llevan todos los hijos de nobles en Lighthold (Aunque este es de mejor calidad), me sorprende que tengan de nuestra talla, dicen que todo aquel que te vea te admirará y envidiará-

-¿Con mi cabello todo aplastado?-

-Si, llevaras este sombrero de copa-

-Tienen una forma de vestirse rara-

-Te comprendo, pero aqui los raros somos nosotros, duendes rodeados de elfos... bien, no pierdas la calma y no te comportes como un niño-

-Maestro, soy un niño- protestó, observando a Goblius a través del reflejo del espejo.

-Me sorprende oírte decir eso. Cuando fabricábamos la poción en mi laboratorio lo negabas-

Horiól se rió fingidamente

-De acuerdo maestro. Seré un buen espia-

-Eso no es lo que te he pedido, no te arriesgues, no te escondas detrás de las puertas y si te atrapan no ayudarías a nadie, mucho menos a ti mismo- La mirada de Goblius miraba el cielo con su serio rostro -Debes escuchar todo lo que se dice sin parecer que lo haces y contármelo después. Bastante fácil-

-Es mas fácil decirle que hacerlo maestro, pero lo intentaré, espero conseguirlo-

-Con tu baja altura le puedes sacar provecho a la situación, suerte Horiól-

-Gracias maestro-

-Y ten cuidado con los mismos elfos, estarán pendientes de ti-

-Si...maestro-

Y un lacayo (Tan frío y mal educado como solo un lacayo arrogante puede ser) acudió a recoger a Horiól para llevarlo a donde Cercilia y sus hijos le esperaban.

Goblius los vio alejarse, pensativo.

-(Probablemente no vea nada en la Universidad y se concentre en escuchar las conversaciones, no debí haber metido al chico en semejante situación)- Y Goblius se fue al despacho de Farendall quien ya lo esperaba.