10

2.4K 291 113
                                    

*:・゚✧ *:・゚✧ *:・゚✧ *:・゚✧

1 año después

-Por favor permita que me lo llevé. Por favor. No puedo dejar que Pete se quedé aquí. 

-Lo siento joven, pero si su padre no llena la alta de salida o de trasladó no puedo permitir que él paciente salga.

-Se lo ruego, si dejó que él se quedé aquí su padre lo desconectará, sólo necesita más tiempo. Usted más que nadie sabe que he luchado todo este tiempo para tenerlo aquí.

-Lo siento de verdad joven Ae, por más que quiera ayudarlo me es imposible. Lamento que tenga que pasar por esto.

Ae le rogaba no solo a los doctores, sino también a las enfermeras que lo dejarán salir con Pete. Se cumplía ya el plazo de un año, Pete no había despertado, sabía muy bien lo que eso significaba.
Si Pete se iba, si lo desconectaban entonces él ya no tenía motivos para seguir adelante, si le quitaban a la persona que más amaba ya nada tenía importancia.

Desde un mes antes había intentando nulas veces sacar a Pete del hospital, pero él padre lo había planeado bien todo, eso ya lo tenía previsto. Ae no podría hacer nada para detenerlo.

-Por favor Pete.. T-te lo r-ruego amor... Por favor... Despierta... No puedes abandonarme, no ahora. Hemos luchado tanto Pete.... Por favor.. - Ae abrazaba el cuerpo de su amado Pete pidiendole por milésima vez que despertará, lloraba desesperado por no poder hacer nada, por no poder protegerlo. -Pete por favor perdóname, soy un maldito idiota que no pudo cumplir con su promesa, perdóname por nunca haber sido suficiente para ti...

Pete escuchaba cada palabra de Ae desde lejos, era como estar en un profundo sueño al que nunca le vería fin.
Podía siempre escuchar a Ae, pero nunca lograba entender nada, nunca podía comprender alguna de las palabras del chico que le hablaba. Pero esta vez su sueño era distinto, podía entender con mayor facilidad lo que él chico le decía, podía escuchar alto y fuerte los sollozos desesperados que le pedían despertar.

Y por primera vez le hizo caso a la voz lejana. La conocía tan bien, le tenía tanto cariño a esa voz que siempre le hablaba tan dulcemente. Pero al despertar se dio cuenta de que no podía recordar ni al chico, ni nada que tuviera que ver con él, le dio tanto miedo que todo hubiera sido inventó de su imaginación que siempre pidió tener lejos al chico de la voz amorosa.

-¿D-dónde... E-estoy?...

-Pete...

-Disculpa. ¿Te conozco?

-¿Qué? Pete por favor basta de bromas ¿si amor?

-De verdad no se quien eres... ¿Por qué me dices así? ¿Quién eres?

-Por favor Pete no me hagas esto, por favor perdóname

-¡Será mejor que te largues de aquí, ya fue suficiente el daño que le hiciste a mi hijo!

Y como si fuera una mala jugada del destino, cuando Pete despertó, su padre llegó justo en el momento indicado para hacer que Ae quedará como un maldito, para que él quedará como él padre preocupado que siempre estuvo ahí para Pete.
Que él olvidará a Ae era lo mejor que tenía que pasar, tal vez siempre debió ser así. Ae jamás perteneció a su mundo, por más que tratará, ellos nunca podrían ser felices de verdad.

Como si de una obra de caridad se tratase él padre de Pete fue "bondadoso" y le permitió a Ae que lo cuidará en su recuperación, que se acercará a Pete como un amigo más como "paga" del año que estuvo con él y que aunque no lo recordará él le hablaría del "buen amigo" que siempre fue de Pete, cosa que nunca cumplió. Jamás se esperaron que Pete sería él que no querría estar cerca de Ae.

Ae le pidió a todos sus amigos cercanos, de él, de Pete y de ambos, que nunca le contará respectó a su relación, les rogó que nunca lo mencionarán si les era posible. Hacer que nunca existió un "ellos", fingir haber sido un buen "amigo" y que con el tiempo su relación se rompió.
Ae ya estaba rotó por la evidente separación, pero era aún peor de lo que esperó cuando Pete le pedía que se fuera y que se alejará de él, era doloroso ver como Pete no podía ni verlo, ni acercarse a él, lo destrozaba cada semana que Pete pedía sus cosas fuera del departamento para evitar el trató con él. Y era aún más desgarrador que Pete no lo recordará.

*:・゚✧ *:・゚✧ *:・゚✧ *:・゚✧


-Pete.. Voy a irme de Tailandia... Le pedí a Chompoo que sea mi novia, también le pedí irme con ella a Estados Unidos. Así que puedes dejar este juego aquí, probablemente tú padre te pidió que hicieras todo esto para ponerme a prueba, pero soy un hombre de palabra, cumpliré con lo que le prometí. 

-Tú y yo jamás terminamos, así que no tienes derecho a salir con alguien más y si se trata de eso, entonces yo también puedo mudarme a Estados Unidos. Mi padre no me pidió nada, estoy aquí porque quiero.

-Pete ya basta, estoy con Chompoo, tú y yo ya no somos nada, no quiero que vayas a Estados Unidos.

Pete se levantó, tirando del brazo de Ae para llevarlo de regresó a su departamento.



Llegando al departamento ambos entraron y Pete aventó a Ae al sillón de la sala, haciendo que este cayera sobre el, quedando casi acostado.

-¿Qué diablos haces Pete?

-No voy a permitir que estés con ella, mucho menos que te vayas y me dejes. No importa que digas para mi nunca terminamos.

Pete se puso sobré Ae, tomándolo de ambas manos y acercándose más a su rostro empezó a verlo directamente intentando contener las ganas inmensas que tenía de besarlo.

-Pete... Por favor.. ya basta...

-Dime que ya no me amas y te dejaré.... Dime que ya no sientes nada por mi y me iré, esta vez prometo hacerlo de verdad.

Incluso si intentaba desesperadamente convencerse a si mismo de lo contrario sabía que le era imposible no amar a la persona que tenía encima, lo amaba como la primera vez, lo amaba incluso más que antes.
Tenerlo tan cerca hacía que todo en él se alterará, quería tomarlo, besarlo, hacerlo suyo, deseaba tanto volver a tocar cada parte de Pete, deseaba que Pete volviera a amarlo. Deseaba al amor de su vida más que a nada, no quería dejarlo ir, pero tenía que alejarlo por el bien de Pete.

-Y-yo... N-no..... - cuando intentaba negar su amor por él, basta con verlo a los ojos para convencerse de que no podía negarlo. -Si te amo Pete... - su inconsciente lo invadió de nuevo. Las palabras te amo salieron por si solas.

Y sólo eso bastó para que el hombre alto se lanzará a sus labios.

•Inolvidable•  Ae & Pete COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora