•Inolvidable• Ae & Pete COMPLETA

12

-Chompoo... ¿Qué haces aquí?

-Quería verte Ae, desde hace días que no nos vemos. T-te extrañaba amor...

-Ae ¿Quién es?

-Ae.. ¿Quién esta contigo?

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Desde mi encuentro con Pete, no hemos dejado de hacerlo, todos los días viene, e incluso a veces también se queda a pasar la noche.
Eh dejado de ver a Chompoo porque él me lo pidió. Pero sabía que esto terminaría pasando.

Seguíamos en la cama después de arduas horas de "trabajo", por lo que no teníamos intención de levantarnos. Estábamos acurrucados pacíficamente, cuando alguien a medio día, empezó a tocar la puerta, Pete insistió en que no le prestará atención, pero parecía que la persona que estaba tocando estaba realmente impaciente.
Por lo que tuve que levantarme y vestirme lo más rápido que pude para evitar que mis tímpanos se vieron más afectados por el sonido chocante del timbre.

Mi sorpresa fue ver a mi "novia" Chompoo enfrente de mi departamento, quien ansiosa por verme se lanzó a mis brazos tan pronto como abrí la puerta.

Me costó un par de segundos liberarme de ella para por fin preguntarle lo evidente.

-Chompoo... ¿Qué haces aquí?

-Quería verte Ae, desde hace días que no nos vemos. T-te extrañaba amor...

-Ae ¿Quién es? - me había tardo en regresar al cuarto, por lo que sabía muy bien que Pete no tardaría mucho en preguntar por mi ausencia.

¡Mierda! A lo mejor Chompoo no lo escuchó.

-Ae.. ¿Quién esta contigo? - Chompoo se asomó un poco para ver si podía ver algo dentro de mi departamento mientras preguntaba confundida.

Empecé a rascarme la cabeza repetidas veces, intentando mantener con mi cuerpo y con mi otra mano a Chompoo lo suficientemente lejos para que no pasará, ni pudiera ver nada.
-Ae... Dime ¿Quién esta contigo?

-Ae te estoy hablando. ¿Quién es? - Pete salió del cuarto en boxers dejándose ver completamente por Chompoo

-Chompoo.. Y-yo puedo explicártelo...

¡Idiota! No importaba cuanto intentará explicárselo, la evidencia era notable en el cuerpo de Pete. Sus labios estaban hinchados, e intensamente coloridos, su abdomen estaba lleno de marcas: chupetones, besos, incluso mordidas se posaban sobre su piel blanca.

Chompoo tenía los ojos cristalizados, se mordía los labios y pasaba sus ojos entre Pete y yo. -Tú y él...

-¿Qué hace ella aquí Ae?

-¿Qué hago yo aquí? - en cuestión de segundos el rostro triste de Chompoo cambió a uno totalmente lleno de furia en cuanto escuchó a Pete.

-Si. ¿Qué haces aquí?

La situación era demasiado tensa, ambos tenían miradas atemorizantes, con cada dialogo que intercambiaban su tono de voz iba en aumentó.

-Eso tendría que preguntar lo yo. Ae es mi novio.

-¿Tú novio? Jaja eso ni tú te la crees.

-Si mi novio, yo no me olvidé de él.

-¡Pues yo no lo hice a propósito!

-Que conveniente ¿no lo crees? ¡Ni siquiera lo recuerdas y te estas acostando con él!

Ninguno de los tenía intenciones de parar, estaba en medio de ambos sin siquiera poder decir algo a mi defensa.
Aunque en el momento en que Chompoo dijo eso, me di cuenta realmente de lo que estaba pasando entorno a Pete y a mi.

Él y yo solo estábamos teniendo sexo, pero no porque nos amáramos, sino porque yo amo a Pete y siempre deseó complacerlo, sigue sin recordarme, pero aún así, él me busca para complacerse a si mismo.
Si desea que no este con nadie más no es porque me ame, es porque no desea que complazca a nadie más.

-Ae... Me dijiste que intentarías quererme...

-Chompoo... Yo

-Él no te ama, ni siquiera te quiere. ¿Por qué no dejas de molestarlo?

-¡Pete basta!

-Sabes algo Pete probablemente Ae jamás me quiso y probablemente nunca lo haga, pero por lo menos no estoy jugando con él como tú. ¿Sabes cuánto a sufrido por ti? ¿Te has preguntado cómo se siente con todo esto? O ¿Te has preguntado si esto lo hace aferrarse más a ti? No verdad, porque ni siquiera te importa, sólo piensas en ti y en lo que tú quieres como el niño mimado que eres. Así que no tienes derecho al decir que debería dejar de molestarlo.

-Ae era mi novio, por supuesto que tengo el derecho a decirtelo.

-Tú mismo lo dijiste, era, lo suyo se acabó porque no lo recuerdas. A diferencia de ti, yo si lo amo.

-Yo lo amaba....

Cierto. Pete me amaba, antes, en el pasado realmente ambos nos amábamos. Realmente Pete me amaba y de eso estaba totalmente seguro.

Mi Pete había muerto desde el accidente, la persona con la que me había estado acostado, no tiene nada que ver con la persona que yo amaba, aún siendo su cuerpo, su voz y todo aquello que indicaba que era él, la realidad era diferente. No tenía la misma esencia, no sentía aquella calidez que tenía antes, mucho menos me miraba con amor, era indiferente después de hacerlo, se negaba siempre a salir conmigo o a hacer algo diferente. Todo el tiempo sólo era sexo y aunque la primera vez en volver a hacerlo había sido totalmente pasional, en el transcurso de los días se había vuelto simplemente en algo que Pete me exigía para su satisfacción.

Chompoo tenía razón, Pete ni siquiera pensaba en como me sentía y yo aún como antes, como siempre haría todo para hacerlo feliz, porque cada vez que estoy con él siento que puedo morir entre sus brazos, porque aunque me niega puedo perdonarlo fácilmente, porque no importa que me haga mientras pueda tenerlo junto a mi, porque aún lo amo como la primera vez que lo conocí.

-Ae.. Intentó entenderte. Pero tú ni siquiera lo intentas ni un poco.

-Chompoo por favor perdóname, por favor. No te mereces esto.

Mi voz se estaba quebrando, sentía como mi corazón se contraía, como si una gran presión en el pecho empezara a doler conformé me daba cuenta de las cosas.

-Tienes razón, yo no me merezco esto, pero tú tampoco mereces que él haga lo que quiera contigo. Tin me dijo que de nuevo se estaban viendo... Supuse que sólo era para "eso" y vaya que no me equivoqué. Será mejor irme ya.

Chompoo se dio la vuelta y se marchó. Me quedé parado unos minutos en la entrada, tomando la puerta con fuerza. Y aún después de cerrarla, no podía girarme, no podía verlo.

Dándole la espalda rompí con el silenció que se había implantado en el departamento. -Pete... ¿Qué sientes por mi? En estos momentos. ¿Qué realmente sientes por mi?

-Ae.. Por favor puedes dejar esto ya.

-¡Pete!

-Yo... Me agradas Ae.

-¿Te agrado?...

-Mm me agradas..

Jamás pensé que una desilusión amorosa podía lastimar tanto hasta el punto de sentir que podías romperte por completo.
Porque sólo esas dos palabras bastaron para sentir que todo dentro de mi se había roto.

No se que es peor en estos momentos, haberlo perdido o sentir que de verdad ya es demasiado tarde para nosotros.

-Ae

-Pete. Por favor ¿Podrías irte?

-Ae... Yo quiero explicarte.

-Por favor Pete, vete.