• O4 •

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— ¿¡Tienes un hijo!?

— Oh, ¿no te lo había dicho? — dije nervioso rascando mi nuca.

— Creo que se te escapó ese detalle— habló sin expresión en su rostro, caminamos a la sala y nos sentamos en los sillones. — Entonces, ¿Tienes esposa? — preguntó ¿Decepcionada.

— Solía tener, pero ya no sentíamos lo mismo — explique.

— Ou, ¿Cuando lo ves? A Katy no le vendría mal tener amigos para empezar la escuela. — sonrió.

— Lo veo todos los fines de semana, si quieres pueden venir a conocerlo este sábado por la tarde, vendrán algunos de sus amigos — propuse.

— Sería genial, Gil — dijo sonriendo aún más, se le veía feliz.

Luego de un largo rato hablando sobre su vida y su hijo, me pareció que ya era hora de irse.

— Bueno, deberíamos irnos, ya se está haciendo tarde — hablo levantándose, me dio una corta sonrisa y fue a despertar a Katy.

— ¡Espera! ¡No puedo irme sin despedirme de Joan! — exclamó y salió corriendo afuera, persiguiendo al perro por el patio delantero. Sonreí con ternura.

— Ya se recargó.

— Si, solo necesitaba un poco de siesta. — reímos. — Bueno, es hora de irse— dijo mientras tomaba su saco y el de Katy.

— Claro — la acompañe hasta la puerta.

Hora de la despedida pensé.

Me acerqué con cautela, mirando directamente a sus ojos, acerqué mis labios a la comisura de sus labios, dejando un beso ahí. Ella sonrió y se dio la vuelta dispuesta a irse, dio un paso, pero se dio la vuelta, ambos pensábamos lo mismo.

La acerqué a mi, tanto que nuestras respiraciones eran una, iba a acercarme aún más, pero ella tomó la iniciativa por mi.

Luego de tantos años, volvía a sentir sus labios sobre los míos. Su rico sabor a miel que los caracterizaba y los distinguía de aquellos pocos que había probado. Nuestras leguas tenía una danza dentro nuestro. La tome de la cintura para acercarla lo más posible a mi, no quería soltarla, ella puso las manos en mi pecho, tomando en sus puños mi camisa.

El dichoso aire hizo que nos separemos, ambos estábamos rojos, casi como tomates. La miré a los ojos y hablé:

— Extrañaba besarte, te extrañaba a ti.

— Yo también te extrañe, más que he extrañado a alguien en mi vida, y mira que Katy a teñido campamentos en la escuela— dijo, reímos, aún no la soltaba.

— ¡Mami! ¡Hay una señora aquí— grito Katy desde afuera. Rápidamente se sacó de mis brazos y salió en busca de su hija, la seguí.

Lucy estaba parada junto a Cedric, mi hijo.

— Hola, campeón— dije con una sonrisa, nunca me cansaba de verlo. Me puse en cuclillas y abrí mis brazos, el corrió hacia mi con una sonrisa gigante en su rostro. Cuando llegó lo alce y le di una vueltas, escuchando su risa. — ¿A que se debe esta inesperada visita, Lucy?

— Tengo una emergencia con el trabajo y debo irme de urgencia a Argentina, espero no te moleste cuidarlo unos días — dijo, bajando una valija, suponiendo que tenía las pertenencias del pequeño.

— No hay problema.

Aunque la causa del término de nuestro matrimonio no fue la mejor, nos tomamos con bastante madurez el divorcio; ambos nos tomamos el tiempo de explicarle a Ced como serían las cosas a partir de ahora; por obvias razones no le dijimos porque nos divorciamos ya que sería demasiado para el, pero lo entendió muy bien.

— ¿No nos presentarás, Gilbert?— reclamó Lucy.

— Oh, lo siento, Amabeth, ella es Lucy, Lucy, ella es Amabeth. — presente.

— Oh, así que tu eres la famosa Amy, ¿Y tu pequeña, como te llamas?

— Yo soy Katherine, pero puedes decirme Katy— dijo extendiendo la mano con total confianza, lo cual sacó más de una sonrisa.

— Un gusto. Yo soy Lucy, la mamá de Cedric. — El Niño, al escuchar que lo nombraron se escondió entre mis piernas.

— Hola.

— Hola.

Silencio incómodo.

- -
Holaaaaaa, se que no es mucho, pero tenía ganas de actualizarrrr. Amo todo el apoyo que le están dando a la segunda parte.

¿QUIEREN QUE HAYA ESCENAS SUBIDAS DE TONO?

No puedo prometer que actualizare mas seguido, porque no cumpliría xd. Pero si que esto se pondrá interesante.

¿Que les pareció Lucy? ¿Les agrada?

Pónganme en los comentarios como se imagina a Cedric, o si les gustaría que le cambie el nombre, porque no me convence.

VOTEN, COMENTEN Y SIGAN LEYENDO POEQUE AHORA SE VIENE LO BUENO.

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