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• O8 •

La mañana siguiente fue un poco rara, pero a la vez hermosa. Luego de despertar fuimos a desayunar a un café que había en el centro del pueblo. Después fuimos por los niños.

— Mami, ¿Cedric se quedara con nosotras más tiempo?

—No, hijita, tienen que volver a su casa.

— Pero yo me quiero quedar — hizo un puchero.

— Debemos irnos.

En verdad estaba incómoda, debía despedirme y no sabía cómo exactamente, podía ser mala y despedirme sin ningún aspecto físico o hacer lo que quería y darle un beso, pero los niños lo vería y no tenía idea de cómo reaccionarían. Me acerqué a él e hice el amague de darle un beso en la mejilla, pero él fue por uno en la boca, reímos y esta vez yo fui por la boca y el por la mejilla. Reímos, tomó mi cara entre sus manos y me besó. Un simple beso.

— Diuuuu — se escucharon a los niños atrás al unísono. Reímos y tome la mano de Kate listas para irnos.

— ¿Eres mi nuevo papá? — preguntó inocente Kate dirigiéndose a Gilbert, yo me puse roja de la vergüenza.

— Eso depende de tu madre — le respondió poniéndose a su altura.

— ¡Hey! No me dejes toda la responsabilidad a mi sola — le reclamé.

Ahora si, tomadas de la mano, Kate y yo nos fuimos.

•••

— Debo conseguir trabajo.

Luego de estar ya un mes y medio en Avonlea, debía empezar a ganar dinero para mantenernos a mi y a Kate.

— Si quieres puedo ver qué hay en Charlotte cuando vaya el lunes — ofreció Gilbert.

— Gracias, eso sería estupendo.

Empezamos a preparar el almuerzo, Kate y yo ya básicamente vivíamos en la casa Blythe, ambas ya teníamos ropa aquí, así cuando nos quedábamos a pasar la noche no nos preocupábamos al día siguiente por cambiarnos. Cedric y Kate tenían una relación hermosa, nunca vi dos niños mas unidos que ellos. Y con Gilbert, eso era todo un tema, en realidad, no era nada.

Nunca hablamos, nunca tocamos el tema, las cosas sólo fluyeron y nunca fue incómodo. Excepto esa vez, cuando Kate nos sentó a ambos...

𝙁𝙡𝙖𝙨𝙝𝙗𝙖𝙘𝙠

— Bueno, ya que los tengo a ambos aquí tengo algo que decirles — hablo Kate seria, Cedric no estaba ya que se había ido a pasar el día con su tía, se le notaba un poco decaída pero con una sonrisa siempre.

— Dime cariño — exclamé yo.

Ella puso sus manos en forma de pistola, con sus dedos sobre su boca, como reflexionando algo.

— ¿Que pasa entre ustedes? — pregunto directa. Gilbert y yo nos miramos, sorprendidos.

— ¿A que te refieres? — habló Gilbert esta vez, haciéndose el desconcertado.

— Ya saben a lo que me refiero, no se hagan — dijo achinando los ojos.

— ¿Que? Eres demasiado inteligente para tu edad.

— Lo sé — hablo mientras se tiraba su pelo hacia atrás — ¡Oigan! ¡No me cambien de tema! — nos reprendió.

— ¡Llegamos! — habló la tía de Ced entrando con el por la puerta.

— ¡Cedric! — gritó emocionada Kate, corriendo a él, el perro los siguió hasta afuera, donde jugaron juntos.

𝙁𝙞𝙣 𝙛𝙡𝙖𝙨𝙝𝙗𝙖𝙘𝙠