Mi Guarda espaldas |TERMINADA|

Capitulo 3 - Protegiendote

Por décima vez sacudí la cabeza fuertemente, intentando controlarme.
  No lograba concentrarme, estaba sentada en mi escritorio en la sala de mi casa, tenía unos libros amontonados, las tareas que debía realizar era inmensa.
  Hace una hora que estoy sentada aquí , aún no e hecho Nada!!... Mis pensamientos, mi cabeza, estaban ocupados, demaciado.
  Él, o mejor dicho, Sesshomaru, no logró sacarlo de la cabeza en el momento en que sus ojos se posaron sobre los míos aquella tarde.
  Aquellos ojos ámbar, únicos, con un brillo tan sin igual, ojos fríos pero bellos, oscuros pero de seguro gentiles, esa mirada, mi perdición.
- Tonta, tonta, tonta, Concentrate!! - me reproche a mí misma mientras me golpeaba las mejillas, eso andaba haciendo desde hace una hora, pero cada vez que recordaba esa mirada mis mejillas se tiñaban de rojo, no lo podía evitar.
  Era raro, al principio ni su nombre sabía, y lo más raro era que de mis guarda espaldas anteriores tampoco sabía nada, ni nunca me intereso, desearía saber porque ahora estoy tan interesada en él, cuál es la diferencia.
- Tal vez por sus ojos, Si eso debe ser!! - concluí, tenía mucho sentido, desde el principio me llamaron la atención sus ojos, tal vez era sólo eso.
  Suspiré, y está vez me puse en marcha con mi tarea.
  Dios, como odiaba la física, tantas ecuaciones que siempre confundían, podía jurar que de mi cabeza salía humo de tantan neuronas que ando concentrando para tratar de entender algo, pero aún así nada.  Crucé mis manos en la mesa y recosté mi cabeza en ella, rendida, ya estaba algo cansada, ya eran dos horas y media que estaba aquí, y ni logré hacer ni la mitad mis deberes; cerré mis párpados, y la mente se me apagó.

                   ~Narra Sesshomaru~

  Dos días, hace dos días que ando atrás de la hija del presidente de Tokio. El pago es bastante bueno, de eso no me quejo.
  Francamente, aquella chica, Rin, era algo diferente de lo que imagine. Normalmente, o cómo yo había visto, las hijas de personas  importantes siempre son bastante engreídas, populares, creyendo siempre que el mundo girá alrededor suyo, pensar que mi trabajo era lidiar con ese tipo de chicas me ponía de mal humor, pero no fue así.
  Admito que la juzgue sin conocer, ella es todo lo contrario, ella es diferente.
  No sabría como explicarlo, de hecho mi actitud fría es gracias a que el mundo ahora está lleno de personas desagradables, aquellas que sólo te quieren para un propósito y luego te votan, pero como lo e dicho, ella es diferente, ella no me desagrada, en lo absoluto.
  Estaba parado al lado de la puerta que daba a la sala, esperandola.
  Ya hace como tres horas que estaba ahi, ella me había dicho que sólo le dedicaría dos horas y después saldría, pero ya pasaron tres horas.
  Si no supiera que ella había entrado sola, juraría que había alguién más ahí. En todas esas tres horas había escuchado, gritos, como de fastidio?, no sabía bien, el punto era que como hace una hora que ya todo era silencio.
  Ya eran las 20:50 de la noche, decidí ingresar, y para mi sorpresa, aquella chica estaba dormida, eso explicaba.
  Observé las hojas todas borroneadas que tenía, algunas arrugadas, por lo que veía no entendía las ecuaciones.
Pero si eran bastantes simples, gráficas los vectores y resuelves varios problemas.
  No podía dejarla ahí, así que con todo el cuidado a no despertarla, la cargue en mis brazos.
  Era tan liviana, no pesaba nada, parecía una muñeca.
  - Muñeca??? Aaagghhh - me reclamé a mi mismo, en que estaba pensando? Dios.
  La llevé a su habitación y la recoste en su cama, y salí de ahí,
  Su olor... Ella olía a flores, que fragancia más Exquisita.

                       ~Narra Rin~

  Los rayos del sol me obligaron a abrir los ojos peresosamente, me senté y me froté los ojos.
  - Eh?, M-mi Ca-cama - cuando llegué aquí?, y cómo? No lo recuerdo.
  Decidí no darle importancia y me levanté, fui al baño a asearme, al salir mi vista se fijo en mi reloj de la pared.
  - 6:50??? Maldicion, llegaré tarde!! - me cambié rápidamente y salí a pasos locos, pero al abrir la puerta, choque bruscamente con el torso duro de cierta persona.
- Ya estas lista? - me habló Sesshomaru con su voz gruesa y sus ojos dorados fijos en mi
- S-si, me quedé dormida, pero ya estoy! - aseguré - mejor vámonos o llegaré tarde - dije y baje y salí apresurada de mi casa con él tras mío.
  Subí al auto y me llevó rápidamente a la preparatoria, tanto que llegamos justo a tiempo.
Ingresé a la clase justo cuando el profesor estaba por ingresar, Ufff, llegué a tiempo.
  Las clases transcurrieron normales, la hora del descando por fin llegó, como siempre saqué mi almuerzo de mi cartera y salí en camino al patio cen...
- Aaahaaahgggggg - grité mientras caía al suelo bruscamente, alguién me había empujado con su cuerpo, mi recipiente cayó por mi cabeza y la comida se desparramó por todo mi cuerpo. Que vergüenza, era el hazme reir de todo el mundo
  Observé como a lo lejos un chico se giró a verme fríamente, hasta malvada, y luego continuó su paso.
- Oyeee - lo llamé y traté de levantarme - Aahggg - mi tobillo, lo volví a lastimar.
  En eso me sorprendí al ver a Sesshomaru acercarse a mi y se arrodilló para estar a mi altura.
- Puedes levantarte? - pronunció de manera sería
- M-mi tobillo, me duele demaciado, no puedo levantarme - dije, me estaba ardiendo de dolor, me mordí el labio inferior, intentando aguantar las ganas de llorar.
  En eso y en un acto sorpresa me sorpendio como Sesshomaru me agarraba de la cintura con una mano y con la otra de mis piernas y me cargaba dulcemente.
- Q-que h-haces? - le recriminé nerviosa, y con las mejillas sonrojadas.
- Déjame cumplir con mi trabajo, protegerte y cuidarte - pronunció, juraría que mi cara estaba como tal tómate.

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🌼Buenaaasss

Aquí dejo otro capítulo más de este fic, espero que les sea de su agrado ^ ^
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🌻 Bye bye