Mi Guarda espaldas |TERMINADA|

Capítulo 14 - Más que un protector

Con mis puños cerrados con fuerza caminé hacía el imbécil de... ¿Naraku? Una mierda me importaba su nombre!! Me encargaré de borrar su existencia ya que no se atreve a alejarse de mi Rin.
Espera... * Sesshomaru se queda paralizado unos instantes*
- M-mi Rin? - En que momento he soltado aquello? Joder, mi mente me esta traicionando.
Sacudí la cabeza, llevé mi vista hacía él nuevamente y me dispuse a ir hacia el, pero sentí como una mano pequeña me sujeto del brazo, tratando de impedir que siga adelante.
- Tu?... ¿Que diablos quieres? Suéltame Niña! - de un estirón me solté de su agarre, ya la había visto, es la amiga de Rin, Hmmm Sango, creo.
- Lo que vengo a decirte te va a interezar - dijo ella sin más, logrando captar mi atención.
- Dime de una buena vez lo que quieres decirme - lo que más odio es que la gente le de vueltas y vueltas a las cosas y nunca dice las cosas directamente.
- Naraku es muy peligroso, sé perfectamente que lo haz notado, por ello vengo a pedirte que no te descuides de el - explicó - además - Sango se cruzo de brazos - también sé que te preocupas mucho por ella, y no sólo como guarda espaldas - dijo burlona
- Es todo lo que tenías que decirme? - esta niña si que es insoportable
- Rin es mi amiga, si te preocupas por ella demuestralo, no andes ocultando y negando lo que realmente tu corazón sien...
- ¡¡Lárgate!! - grité, extinguiendo la poca paciencia que me quedaba.
Ya por buena o mala suerte, el grito logró llamar la atención de Rin, que dejo al imbécil ese y se acerco hacía mí, Sango simplemente se alejó.
- Que pasá Sesshomaru? Estas bien? - preguntó ella suavemente
- Estoy bien - llevé una mano a mi mentón, y comencé a respirar y tratar de calmarme.
- Seguro? - dijo mientras con ambas manos sujeto una de las mías, mirandome fijo
La campanilla sonó, y todos los estudiantes ya iban de regreso a su curso
- Ya vete a tu clase - mencioné mientras me soltaba de su agarre y desviaba la mirada
- De acuerdo - dijo y se encaminó a su curso.
Pasarón tres horas y fuí a sentarme aún lado de la clase de Rin, las palabras de aquella niña tonta resonaban en mi cabeza
~" Si te preocupas por ella demuestralo, no andes ocultando o negando lo que realmente tu corazón siente"~
Llevé ambas manos a mi cabeza y la apreté con fuerza, para que negarlo, sus palabras son ciertas, siempre trató de enterrar aquello que realmente siento, pero cuando estoy cerca de ella no puedo evitar descontrolarme, mi corazón traiciona a mi mente.
Me levanté de un salto, y fuí hacía el estacionamiento de la preparatoría, a respirar aire fresco y tratar de controlarme, en 5min Rin saldría de su clase.
Al salir ella la llevé a su casa, como siempre, en todo el trayecto el ambiente era puro silencio, no me atrevía a decir nada y ella tampoco, es más, en todo el camino llevaba la cabeza recostada por la ventanilla del auto, impidiendome ver su rostro.
Al llegar, le abrí la puerta del auto, se bajó con un "gracias" y subió a su habitacion sin más.
Lleve mi mirada al cielo, estaba oscuro, gris, una tormenta se venía, así que me metí para la sala de la casa y me recosté al sofá

Eran las 10:21 de la noche, el señor y la señira Taisho no se encontraban en casa, bastante raro eso.
La lluvía comenzó a caer, y varios truenos y relampagos lo acompañaban.
En una de esas, un fuerte relampago cayó y toda la luz de la casa se apagó.
- KKYYYYYYYAAAAAAAAAAAAAAAA - Apenas escuché a Rin gritar y subí hacía su habitación velozmente, espero que no le haya pasado.
Subí las escaleras de cuatro en cuatro y al llegar abrí la puerta de su habitación sin siquiera tocar.
- ¡Rin!... Estas...
Sentí como se abalanzó hacía mí y envolvió sus brazos en mi cuello, sosteniendose con fuerza.
Comenzó a sollozar y su rostro lo ocultó en mi pecho, su cuerpo estaba frío y estaba temblando mucho.
- Rin - llevé mis manos a su cintura y la apreté contra mí - te da miedo la ocuridad?
Ella simplemente asintió, era obvio, estaba temblando de miedo, se ha llevado un gran susto.
- Hey! - Con una mano la agarre del mentón y levante su rostro hacia mi
Tenía los ojos acumulados de lágrimas, comenzé a limpiarlas suavemente, lo que menos quería era verla llorar.
- Basta, no llores, yo te protegeré - traté de que mi tono de voz sea suave para calmarla.
Sentía sus latidos del corazón acelerados, la abrazé con fuerza y enterré mi rostro en su cuello, inhalando su aroma, joder, su aroma era lo que más me encantaba de ella.
- Confía, en mí, yo estaré para protegerte siempre, sea o no tu guarda espaldas eso no cambiará nunca.

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Sé que ahora mismo me odian por no subir cápitulos muy seguidos ;-; pero la verdad hago lo mejor que puedo, sorry u_u
Espero que les guste este cap. que os dejo, apoyame con tu voto >☆< y no olvides dejarme en los comentarios que te pareció :3
Trataré en lo posible de seguir con esta historia que sé que os gusta mucho, no deseo decepcionaros

🌻 Sayonara!!