5

2.4K 265 29
                                    


Joshua estaba caminando, solo y ansioso por un encuentro que no esperaba que fuera tan pronto. Pensó que Jeonghan lo contactaría una semana después o no lo haría. Tenía la imagen de un profesor Yoon bien racional y correcto.


Solo se encontraba con sorpresas. 


Esa mañana del domingo a la hora de misa, le llego un mensaje. No es que fuera a la iglesia, pero justo había acompañado a su abuelita ese día. Yoon Jeonghan le había preguntado si estaba libre esa tarde y si podría ir a su departamento.


Luego de despedirse de su abuela quien antes de liberarlo le pregunto si estaba comiendo bien, al fin respondió al mensaje, obviamente con una afirmación. Fue a su casa a ducharse, vestir ropas no difíciles de quitar y guardo un cambio en una mochila solo por si acaso. Mientras hacía eso, Seungcheol le pregunto si podían juntarse esa noche, a lo que obviamente respondió con un no. Era tan divertido ver a su amigo quejarse como un niño llorón, de que nunca se juntaban ellos solos como amigos, pero al final acordaron juntarse el martes.


Finalmente, llego al edificio. Sentía sus nervios a mil cuando toco el timbre del departamento número 04, pero estos se deshicieron al ver a Jeonghan abrirle y luciendo absurdamente adorable. Tenía el cabello desordenado, unas gafas que le quedaban perfectas, un pijama de polar holgado de colores pastel y pantuflas de conejo.


- Deja de mirarse de esa forma y entra – Pidió algo avergonzado – Sé que no estoy tan arreglado como la otra vez, pero... - Se calló cuando Joshua al pasar a su lado, le dio un corto beso sobre los labios.


- Te vez muy hermoso, hasta me dan ganas de comerte a besos por lo adorable que luces – Cuando escucho la puerta cerrarse detrás suyo, recordó como el viernes fue empujado hacia la muralla, pero esta vez, tan solo fue abrazado perezosamente por la cadera, sintiendo un escalofrío por sentir su cuello ser besado suavemente por Jeonghan – Te vez cansado – Comento con extrañeza, pues era fin de semana.


- Después de que te deje, volví a casa y no deje de trabajar revisando informes, controles y preparando algo para dar esta semana – Murmuro débilmente, mientras metía sus manos por debajo del suéter del menor, quien se tensó por sus frías manos.


- Que trabajador – Se puso firme de pie, porque cada vez Jeonghan recargaba más su peso sobre el menor. Se notaba realmente cansado, por lo que no pudo evitar preocuparse - ¿Has comido bien? ¿Te has duchado? ¿Has dormido correctamente? – Jeonghan refunfuño contra su cuello.


- ¿Eso importa? Solo quiero metértela - Murmuro, presionando su cadera contra el trasero de Joshua, quien se excito un poco, pero era más fuerte su preocupación. Saco las manos del mayor de debajo de su ropa y se giró, sujetando a Jeonghan por los hombros.


- A mí me importa. Debes cuidar bien tu salud, Jeonghan – Noto sorpresa y algo de fastidio en el rostro del profesor.


- Te envié el mensaje para relajarme, no para que te aparezcas con faceta de madre preocupada – Dijo con frialdad. Joshua abrió mucho sus ojos por cuanto le sorprendieron sus palabras, para luego bajar la mirada al suelo, dolido por eso. Dolió mucho, demasiado.

Why not? (JIHAN)Where stories live. Discover now