Diez mil porqués || Albalia

IX

Había llegado el verano y hacía bastante calor en madrid, y pronto era tu cumpleaños, así que decidí organizar algo así como un día todos juntos para celebrar tu 19 cumpleaños.

-si?- se escuchó la voz de marta al otro lado.

-ey! A ver marta, soy yo alba, mañana es el cumpleaños de natalia, y me gustaría prepararle algo en la playa, un día todos juntos y luego ella y yo ya haremos algo, que os parece?- lo dije en bajito para que no me escucharas.

-me parece súper buena idea alba! Ahora creo un grupo y lo comento! Mañana no?-

-si, es mañana, así que que confirmen rápido, y así le voy diciendo que nos vamos a la playa, que ella cree que tiene que ir a trabajar-

-genial alba, luego hablamos! Adiós!- Marta era una persona increíble, y era una de mis mejores amigas.

Te desperté a besos y ronroneaste como de costumbre, llevabas un mes viviendo en mi casa, y todo iba sobre ruedas.

-eyy, dormilona-

-albi... déjame dormir-

-nooo, venga a desayunar!-

Te saque de la cama a base de cosquillas y al final cediste a levantarte y a hacerme tus famosas tostadas.

-estoy enferma y me haces hacerte el desayuno, te odio- dijiste bromeando, aunque yo no te veía tan mala.

-mañana es tu happy birthay- comenté

-no sabía que sabía inglés- te mofast

-te odio, venga, que mañana te espera un largo día-

-si, currando-

Recibí un mensaje y no te contesté, miré el mensaje, ponía Marta en la pantalla y me alegre.

-han dicho que si, a que hora?-

-a las 9:00 de la mañana en la estación de autobuses- escribí

-ahí nos vemos!

-chauu-sonreí victoriosa y te sonreí.

-y esa cara de felicidad?- arqueaste la ceja.

-mañana nos vamos a la playa!

- pues que suerte, yo curro

-no, no curras, mañana tienes día libre, y nos vamos a la playa

-que dices alba? Mi madre me va a matar

-ya he hablado con ella Idiota, te vienes a la playa, si o si

Tu cara era un cuadro, no te creías que había hablado con tu madre para que te vinieras a la playa. Sonreíste y me diste un beso dejando las tostadas en la mesa. Estabas más feliz que 8 felices como tú dirías.

El día transcurrió tranquilo, tú trabajaste y yo también, estuvimos hablando por teléfono en nuestro descanso que coincidía a la misma hora. Comimos en casa y nos quedamos dormidas viendo Netflix, tú tenías bastante dolor de garganta así que me levante y hice un té, seguramente te vendría bien.

Sobre las 18:00 de la tarde te despertaste y no podías ni hablar casi, eso me preocupaba así que te di el té.

-toma, ten, bébetelo-

-Gracias albi- dijiste muy suave por tu falta de voz.

-sh, no hables nat-

******

-Natalia! Venga coño!-

Eran las 8:00 de la mañana y aún no le habías levantado, teníamos una escasa hora para prepararnos así que baje a desayunar, y te vi aparecer por la puerta. Sonreíste y te abrazaste a mi. Te había hecho tu desayuno favorito, huecos rotos con tostadas de aguacate y un café.

Me abrazaste con fuerza y me agarré a tu cadera colmo si del fin del mundo se tratase. Nos entendíamos sin decir nada, y nuestros corazones latían por la otra fuertemente.

-felicidades cuquita-

-te quiero albi-

-y yo nat-

Te sentaste a desayunar mientras yo subí a vestirme. Me puse un bikini negro que me compro Rafi, mi madre y me arreglé un poco, me puse la camiseta ancha y unos pantalones y te vi entrar en la habitación en ropa interior, no solías usar pijama. Venias directa a mi.

Me abrazaste moviéndome hacia la pared y me agarraste por la cintura haciendo fuerza hacia la pared, chocaste mi cabeza con la tuya en para cuando me quise dar cuenta tenía tu lengua en mi boca. Puse las manos detrás de tu nuca y mientas hacia fuerza hacia mi nuestras lenguas jugaban entre ellas. Parecía que tú controlabas todos los movimientos que hacías con tu boca, pareciendo estar calculándolo milímetro a milímetro, baste hasta el cuello y dejaste varios besos y te separaste, con una sonrisa victoriosa, sonreí y me separe.

-va nat, que vamos a llegar tarde-

-preferiría quedarme aquí contigo solas-

-Bueno, cambiar de sitio no está nunca mal- dije bromista

-no pensarás hacerlo en la playa no?- dijiste riéndote

-por que no- levante una ceja buscando alguna reacción en tu cara pero seguías riéndote.

Pues claro que no lo quería hacer en la playa! Eso era muy vergonzoso!

Me mire el cuello y maldije todo lo que había pasado, eras una puta animal dando besos en el cuello Natalia.

-eres una bestia natalia, mírame el cuello-

-ups- levantaste los hombros y sonreíste tímidamente- te ha gustado y lo sabes- sonreíste otra vez victoriosamente buscando mi aceptación, no me quedaba más que aceptar que si, así que suspire y nos fuimos.

Llegamos y todos te abrazaron, María lo único que hizo es flipar con mi cuello.

-Ostia la alba!- rio y me avergoncé muchísimo.

-es esta que es una bruta- dije sonriendo y pegándote una colleja.

-te ha encantado, y lo sabes- dijiste con el orgullo alto como de costumbre.

-Natalia! Cállate!-

Empezaron todos a reír y nos montamos en el bus, teníamos una hora de trayecto así que nos quedamos sopas y cuando llegamos tuvimos que andar 10 minutos hasta llegar.

Íbamos hablando del siguiente año, ese año empezábamos la universidad, la mayoría teníamos 18, la universidad nos daba un poco de miedo, más que nada porque el grupo de iba a romper, Damion África y marta se iban a BCN a estudiar, y jo, me daba mucha pena.

Te noté bastante tensa hablando de ese tema, a lo mejor te ibas y no me lo habías dicho, aunque lo dudo, estabas muy contenta en madrid.

-estás bien nat?- te pregunte acariciando tu brazo

-si, por?- dijiste tragando saliva, estabas rara.

Heyyyy!!!! Que tal las vacaciones? Os va gustando la novela? Dejadme en los comentarios que os parece porfi y si queréis que los haga más cortos o como!