V. "La Canción"

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Tercera noche...

Después de la extraña noche de ayer el día había pasado tranquilo, habíamos salido a pasear un rato por el bosque inclusive hicimos un pequeño picnic en un claro que encontramos, estuvimos escuchando algo de música y luego regresamos a la gran casa.

Nos pusimos a investigar un poco encontrándonos con muchos libros y periódicos viejos, pero no vimos alguna foto, inclusive el cuadro de la otra noche no estaba. Algunas de las habitaciones estaban cerradas al igual que el sótano y no encontramos forma alguna de abrirlos. De los muebles que estaban en la sala cubiertos con sabanas blancas que ya eran grises debido a la cantidad de suciedad que tienen acunuladas encontramos un gran piano de cola averiado.

El sistema del interior estaba totalmente dañado, haciéndo que algunas teclas sonarán horribles o ni si quiera sonaban.

En estos momentos eran las 10:30pm, nos disponíamos a dormir pues había sido un largo y agotador día lleno de muchas cosas viejas. Así que ya era hora de un largo descanso.

(...)

Trataba de conciliar el sueño pero me era imposible a pesar de lo cansado que me sentía, daba miles de vueltas en mi bolsa de dormir tantas que parecía carne en vara, ninguno de los chicos seguía despierto así que no tenía nadie con quien hablar.

Me levanté y tomé una linterna dispuesto a encontrar algo que hacer, buscar un libro fue la mejor opción que conseguí sólo esperaba que nada extraño me sucediera.

Baje al salón principal y me dirigí con cuidado al librero en donde habíamos encontrado aquellos libros, muchos eran sobre leyes y esas cosas; algunos de arte; otros eran de conocimiento general, historia, geografía, ciencias; y muy pocos eran los libros de historias ficticias o novelas.

Habían libretas con anotaciones y datos relevantes, pero que realmente no llamaban mi atención y seguí rebuscando un poco más entre ellos. Más de una vez estornude gracias a la cantidad de polvo que algunos tenían, parecía un gatito resfriado.

Me senté en el suelo frustrado por no conseguir nada, pero al tocar el suelo sentí una pequeña desvariación en este a lo que me levanté y con la linterna ilumine en donde me había sentado topandome con un libro de caras celeste del cual salía una pequeña cinta blanca.

Lo tomé y lo observe por encima tratando de recordar que era, pero al no encontrar respuesta a simple vista lo abrí topandome con lo que eran anotaciones diarias de alguna persona, la que al parecer practicaba mucho la caligrafía y cuidaba la ortografía.

Los textos se veían perfectamente redactados, sin ningún error ortográfico y la letra era ligera y fina, bien redondeada y pareja.

Cerré aquel objeto y subí a la habitación dispuesto a leerlo, la curiosidad que tenía por aquello era demasiada.

Me acosté nuevamente en mi bolsa de dormir y lo abrí leyendo uno de los capítulos o mejor dicho días que tenía este:

"20 de Octubre de 2005..."

Aquella fecha me tenía sorprendido porque primeramente es la fecha de mi cumpleaños en ese entonces cumplia cuatro años y si juntaba todo lo poco que sabía de aquella familia podría ser que ellos estaban en ese momento de mi vida.

Me disponía a leer más cuando un hermoso sonido cautivo mis oídos, hasta que caí en cuenta que era el sonido de un piano y por lo cerca que se escuchaba venía de abajo, pero el piano que esta en el salón principal está averiado.

El sonido era melodioso, suave y constante. No se escuchaba desafinar y era sumamente perfecta la transición del sonido.

Mis recuerdos saltaron debido a la hermosa canción que escuchaba. Era la canción que mamá me tocaba y con la cual me enseñó a tocar piano.

Pero ese momento lo borre de mi mente al caer en cuenta de que era imposible que aquel artefacto se estuviera escuchado también llenándome de temor instantáneo y otro recuerdo paso por mi cabeza.

"Además de su gran talento para el arte, la pasión que tenía por la música era inigualable. Sabía tocar el piano a la perfección y juraría que su voz era la de un ángel la cual te abrazaba los oídos y llenaba tu alma..."

Trague duró mientras tomaba la linterna y me dirigía a donde estaba el piano. Al llegar se escuchaba más fuerte el sonido, me acerqué al instrumento musical y vi a una hermosa chica de cabello largo que llevaba puesto un vestido blanco, tocándolo.

Por unos segundos subió su mirada y choco con la mía provocándome un gran escalofrío, parpadee y ya no vi nada, incluso el piano estaba cubierto con una sábana como lo habíamos dejado temprano pero la canción seguía escuchandose.

Busque desesperadamente de donde provenía el sonido y me percaté de que llevaba mi teléfono el el bolsillo del cual se reproducía la melodía que usaba para engañar a mi padre cada vez que me fastidiada tocar el piano para que creyera que lo tocaba.

Lo saque, observe que eran las 3:00am, el tiempo se habia ido volando, confundido lo apague y estaba intranquilo con lo que había sucedido pues mi teléfono estaba cargándose arriba y yo en ningún momento lo había agarrado.

Lo saque, observe que eran las 3:00am, el tiempo se habia ido volando, confundido lo apague y estaba intranquilo con lo que había sucedido pues mi teléfono estaba cargándose arriba y yo en ningún momento lo había agarrado

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!Hey! Aquí les traigo el quinto capítulo. Espero les haya gustado y ya saben, dejen su estrellita y su comentario ahí abajito 👇👇👇
¡Los estaré leyendo! 👀

Att: Maruu💕

ALMAS | Adrien Agreste | ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora