Romance Prohibido

Simplemente no es lo mismo

"Ya odio este trabajo", le dijo Tia a Nel cuando salían de la habitación con sus nuevos trajes de marinero en... sus uniformes de trabajo. "Se está congelando y quiere que corramos con trajes de marinero. ¿Es estúpido?"

"Sé lo que quieres decir, y sí, creo que lo es", respondió Neliel mientras se dirigían al comedor de la tienda.

El sexto sentido de Tessai afortunadamente se activó y rápidamente sacó a Jinta y Ururu de la habitación en un instante.

"Oh, ¿no se ven hermosas?" Dijo Kisuke sonriendo detrás de su abanico.

"Te odio", dijeron Nel y Tia al mismo tiempo.

"Ma... , ma... , no hay necesidad de palabras como odio. Ahora, tu primer trabajo es entregar este paquete a través de la ciudad a un club llamado After Life", dijo Kisuke dándoles un paquete a los dos, su sonrisa jovial nunca se desvaneció.

"¿Qué hay ahí dentro?" Preguntó Tier.

"Ustedes son chicas de recados, no entrevistadoras. ¡Ahora váyanse!"

...

"Eso fue ... diferente", dijo Ichigo cuando él y Yoruichi entraron a su oficina en el cuartel del decimocuarto escuadrón mientras cerraban la puerta detrás de él.

"Oh, no lo niegues. Te gustó", bromeó Yoruichi con una sonrisa maliciosa mientras se tumbaba en el sofá que estaba frente a la mesa en su oficina.

Ichigo suspiró cuando se quitó el haori, lo dobló y sentó el Chacal y las fundas en el escritorio. "No es importante si me gustó o no. Importa si tú, Tia y Nel están deacuerdi con eso", dijo acostado junto a Yoruichi, poniendo su brazo alrededor de ella.

"¿Qué pasa si alguien entra aquí y nos ve así?" Yoruichi preguntó mirando a Ichigo de quien simplemente le sonrió.

"Ya no me importa", dijo él haciéndola sonreír cálidamente y acariciarle la cabeza contra su pecho.

Los pusieron allí abrazados y haciendo una pequeña charla durante aproximadamente una hora antes de que la puerta de la oficina se abriera para ver a Alucard sonriendo.

"Supongo que la pasaste bien?" Ichigo preguntó mientras se sentaba.

Alucard no habló, sino que caminó alrededor del sofá y detrás del escritorio solo para sacar una botella de vino de color carmesí. Luego tomó una copa de vino y la llenó hasta la mitad antes de ir a la esquina y sentarse en una silla de terciopelo, su sonrisa nunca se desvaneció. Un momento después soltó dos palabras. "Joder, sí".

...

Dos horas antes de la hora actual ...

Alucard caminó casualmente a través del Rukongai sin ninguna preocupación en el mundo. Sus manos estaban metidas descuidadamente en sus bolsillos y una sonrisa se dibujada en su rostro. Pronto encontró su camino hacia un bar y se sentó en una cabina.

"¿Qué puedo conseguir para ti?" preguntó el camarero mientras caminaba hacia la cabina.

"Una botella de tu mejor vino", respondió Alucard jovialmente mientras se quitaba el sombrero y las gafas de sol para sentarlos en la mesa frente a él.

"De inmediato", dijo el camarero antes de alejarse.

Después de un minuto de espera el camarero regresó con una botella de vino y una copa.

Recibiendo un asentimiento del hombre vestido de forma extraña, comenzó a servirle Alucard lleno a Alucard.

El materializado zanpakto vestido de rojo se quedó pensando durante una media hora antes de mirar a un grupo que estaba jugando al póquer. Alucard se encogió de hombros, volvió a ponerse el sombrero y las gafas, y se acercó con el vaso en la mano.