Capítulo 16

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Mi corazón latía con fuerza, el miedo y la angustia acompañadas de una gran dosis de adrenalina corrían por mis venas de una manera increíble. Me escabullí de su agarre y salí de ahí lo más rápido posible. Corrí hacia la habitación y cambié mi ropa con una velocidad que jamás pensé lograr.

Debía salir de ahí. Bajé las escaleras con rapidez dirigiendome a la entrada sin mirar atrás.

—¿Vas a escapar de esto?

Paré en seco al escucharlo, ni siquiera habia notado su presencia en aquel lugar. Su voz profunda llenó mis oidos por completo pero no podía hacerlo. Debía salir de ahí ¡AHORA!

Seguí corriendo como si la vida dependiera de ello, necesitaba llegar hasta el hospital. Abrí las puertas y miré con rapidez a mi alrededor, no había nadie. aproveché de correr hacia la habitación de Alice.

Ella estaba profundamente dormida y probablemente sedada. Busqué entre los cajones un lápiz y un papel, escribí la pequeña nota y salí de ahí de nueva cuenta. Antes de llegar a la puerta principal del hospital mi desesperada caminata se vió interrumpida.

Noté como mis manos temblaban, como me sentía desorientada y totalmente asustada, debía escapar.

—¿Qué ocurre, Rysh?

La voz de Dexler lleno mis oídos pero no podía escucharlo con claridad, no quería hacerlo. No le presté atención y seguí con lo mío.

¡ESCAPAR!

Escuchaba el eco de los gritos de Dexler detrás de mí mientras lo hacia pero no podía parar ¡NO! no debía escucharlo, solo necesitaba aquello. Debía hacerlo antes de que fuera demasiado tarde.

Me adentré en el bosque y corrí hasta que mis pies no aguantaron más. Veía los árboles pasar rápidamente mientras yo avanzaban con la Máxima velocidad que mis piernas me permitían. Cada vez la visibilidad iba siendo más escasa en cambio el dolor en el pecho iba dandose aquel conocido lugar. La luna estaba dejando de ser mi acompañante y poco a poco iba aceptando que me quedaría completanente sola ahí pero ya no importó.

Perdí la noción del tiempo mientras escapaba, noté lo lejos que estaba y miré a mi alrededor, mi compañera me había abandonado ya hace varios metros atrás. Me senté al lado de un gran árbol tratando de controlar mi agitada respiración y entonces fue cuando me atacó.

Aquel sentimiento que parecía haber olvidado me llenó por completo de golpe. Me desesperó y poco a poco fue destruyéndome. ¿Ahora dónde estaba? Tapé mi cara con ambas manos mientras las sentía temblar. Aquellas emociones estaban consumiendome. ¿Qué es lo que haría ahora? Esto no podía empeorar.

Y Llenó todo mi ser, grité con frustración tratando de alejarlo moviendo la cabeza con fuerza. Debía alejar aquel mal recuerdo, tenía que hundirlo en mi mente.

No puedes dejar que salga, Rysh.
¡NO LO DEJES ESCAPAR!

Me levanté de ahí con lentitud y sentí lo mareada que estaba, mi cabeza daba vueltas y el corazón bombeada con una fuerza increíble. Mi cuerpo empezaba a reaccionar. Caminé lentamente sin saber a dónde ya ni siquiera sabía dónde me encontraba. Mi sentido de la orientación había desaparecido totalmente y la visibilidad era casi nula, ya apenas podía distinguir. Los árboles del bosque taparon todo rayo de luz que quisiera entrar a salvarme.

Estaba agotada había corrido más que en toda mi vida y no tenía conocimiento alguno de a dónde me dirigía.

Paré en seco y miré a mi alrededor con cautela. ¿Qué había sido eso? Traté de calmar mis nervios esperando que así mi sentido auditivo mejorara y pudiera captar algo más. Dejé de hacer cualquier movimiento y me mantuve alerta ¿Qué era aquél sonido?

Guardé completo silencio durante unos minutos que parecieron eternos y al fin deducí que solo se trataba de un sonido típico del bosque. Suspiré con alivio y frustración a la vez y entonces seguí mi camino.

Volví a escuchar aquello una vez más, ¿Eran hojas? Sí. Era el sonido de las hojas al ser pisadas. Mí cuerpo se alertó y la desesperación empezó a reinar.

No estaba sola.

Me mantuve estática durante un tiempo, traté de enfocar toda la capacidad de mi sentido auditivo en ello, miré a mi alrededor buscando algo pero ahí no había nada. Di mi mayor esfuerzo tratando de acostumbrar mi vista lo más que pude a aquella horrible oscuridad pero solo era una humana.

Volví a dar un paso cuidadosamente y fue cuando lo escuché otra vez, estaba cerca...muy cerca.

Mi cabeza golpeó el suelo con fuerza y grité al ver a mi atacante ¡ERA UN LOBO! Traté de levantarme y correr pero fue más rápido. Mi grito fue tan fuerte al sentir como sus dientes penetraban mi piel que sentía como desgarraba mi garganta.

¡ESTABA ATACANDOME!

Traté de defenderme, traté de golpearlo pero era mucho más ágil. volví a escuchar como mi garganta reaccionaba dejando salir otro fuerte grito.

Podía sentir como esta ardia lastimada, el ardor en la zona era tan grande que dude poder hablar otra vez. Quemaba como mil demonios.

Logré darle una patada logrando que se alejara brevemente, escuché su fuerte gruñido lleno de furia. retrocedí aún en el suelo mientras él se acercaba a mí.

—Por favor...–supliqué– Basta.

Notaba como la sangre escapaba de mi cuerpo por las profundas heridas que había provocado, ardian de una forma inigualable. La sangre salía de mí manchando con aquél intenso rojo toda mi ropa. En cambio el dolor iba en aumento cada vez más.

Mi voz sonaba tan lastimada, desgarrada.

Otra vez su gruñido se hizo presente y luego sus dientes penetraron mi piel con fuerza nuevamente, mi lastimada garganta volvió a reaccionar.

¡IBA A MATARME, SOLO ESTABA TORTURÁNDOME!

Empecé a ver todo en cámara lenta, todo daba vueltas y mis sentidos se fueron apagando poco a poco. Mis ojos empezaron a cerrarse con lentitud y solo podía sentir como perforaba mi piel. El lobo seguía mordiéndome con entusiasmo pero mi cuerpo ya no reaccionaba.

Todo mi ser empezó a apagarse, sentí aquel dolor y presión en el pecho. Aquella desesperación y angustia de no poder hacer nada más. Aquella alerta que tu cuerpo manda a tu cerebro tratando de salvarte me invadió con fuerza, pero ya no reaccioné...ya no era capaz.

Había perdido.

Mi sentido principal empezó a abandonarme, podía ver puntos negros oscilando en lo poco y nada que lograba captar. Entonces entendí que estaba apunto de apagarme.

Noté aquel suspiró débil que se escapó de mi boca, mis ojos iban a cerrarse por completo. Mis recuerdos me llevaron instantáneamente a él, volví a ver su perfecta sonrisa y sus profundos ojos azules.

Escuché el débil grito que escapó de mi boca al sentir como penetraba mi piel con fuerza una vez más, pero el dolor había desaparecido... ya no podía sentirlo.

Aquél horrible zumbido llenó mis oídos por completo, sentí mis párpados pesar y la oscuridad fue consumiéndome

Fue entonces cuando...lo ví.

Mi atacante salió disparado por el fuerte ataque contra él, escuché los chillidos de aquel lobo, escuché sus horribles quejidos y como intentaba defenderse en vano y luego...

Nada.

Solo un frío silencio y sus ojos dorados.

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Gracias por todo el apoyo ❣️ ojalá les guste.

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