El Bosque Caníbal ~M.Yg

EPILOGUE (1)

ADVERTENCIA

Para entender este capitulo tuviste que haber leído la historia "un ángel o un demonio", ya esta a tu criterio leerla o no, pero si desean pueden esperar a que suba el otro epilogo el cual sería un final alternativo que independiza la historia.

(...)

Y como siempre el tiempo paso, para ser exactos casi un siglo, Yoongi y Tn habían vuelto a nacer, pero esta vez siendo lo que verdaderamente son, Un ángel y una híbrida... Estos ya tenían más de 90 años y ahora eran unos de los ángeles que designaban un ángel guardian a cada persona.

Para volver a encontrarse tuvo que pasar un largo tiempo, y no fue hasta el día donde a una de las amigas demonios de Tn le dio la idea de ir a donde estaban los ángeles que al fin lograron reencontrarse.

Cuando los dos se volvieron a ver fue como un flechazo de cupido para los dos, como volver a tener el dulce sentimiento presente en los dos, aun sin conocerse, el cual Tn al principio no quería aceptar, pero conforme paso el tiempo lo logro y el sentimiento fue creciendo.

Ellos de nuevo vivieron una vida donde se le colocaron muchos dificultades a lo largo de ella, pero después de todo lo que pasaron, en esta si pudieron tener el final feliz que se merecían desde un principio.

Increíblemente después de tanto tiempo, Tn logro recordar todo lo que había vivido en su antigua vida.

Todo paso una mañana de un lunes, Tn se había enfermado y llevaba casi dos días enteros durmiendo sin despertar, Suga junto a Jinhee estaban muy preocupados por ella y no se habían separado su lado ni un segundo, así estando pendiente de ella y cuidandola de que no empeorara.

Aquella mañana Tn despertó de aquel largo sueño, sueño el cual era un recuerdo, Suga y Jinhee estaban a su lado durmiendo, en su rostro se les notaban lo cansados y preocupados que se encontraban.

Al despertar Tn no dejaba de mirar a su pequeña hija, aquella hermosa niña que no había alcanzado a conocer en su anterior vida, y que a pesar de que llevaba junto a ella casi doce años, le parecía increíble que estuviera a su lado, aquella hermosa niña la cual era la combinación perfecta de ella y Suga.

Sus ojos se llenaron de lagrimas y solo la abrazo, un abrazo tan delicado con miedo a que todo fuera una mentira, como si todo fuera un realidad muy frágil.

-No puedo creer que espere casi un siglo para poder conocerte, hija mia-susurro con emoción.

Después de aquel abrazo miro a Suga, su único amor, estaba tan tranquilo durmiendo, tan lindo, que la hacia sentir plena de tan solo verlo, a pesar de que llevaban tanto tiempo juntos no dejaba de sentirse aun más enamorada de el, cada día.

Se acerco a el y le dejo un casto beso en la comisura de sus labios.

-Gracias por estar siempre a mi lado, mi amor-dijo susurrando.

Sg-Te dije que jamas te dejaría sola, en ningún momento-dijo abriendo los ojos mientras entrelazada sus dedos con los de su amada.

-¿Tu también recuerdas?-dijo impresionada.

Sg-Si... Cada momento que estuve contigo, desde el más simple hasta el más hermoso-dijo sonriendo.

-No lo puedo creer...

Sg-Después de todo si pudimos conocerla-dijo viendo a su hija, la cual estaba profundamente dormida.

-Si... Mirala, es tan parecida a nosotros-dijo mientras le colocaba un mechón de pelo a Jinhee detrás de su oreja.

Sg-Es hermosa, porque es la evidencia de que nuestro amor es verdadero y real.

-Lo se-dijo para luego besarlo.

Cuando recordaron Tn y Suga volvieron a tenerle el mismo odio a Jackson a pesar de haberlo perdonado, pero después de todo, ya no querían venganza, no querían que sus vidas se llenaran de cosas negativas, pues ahora su vida era tranquila y estaba bien, lo más importante eran muy felices, además ellos sabían que después de todo Jackson, cada día que pasara en el limbo recordaba sus malas acciones y como esto lo llevo a estar encerrado allí, sufriendo por el peso de la culpa.

En fin... Después de todo Tn y Yoongi tuvieron su final feliz de cuento de hadas, aun viviendo su amor como si este a penas empezara.

Y como siempre, llego el final de la historia que fue contada, la otra parte siempre sera un gran misterio.

Fin