Valide Sultana Ayşe me llamó a sus habitaciones solo unas horas antes del viaje a Amasya. Al contrario de lo que pensaba, Sultana Hatice no estaba con ella. Tal vez estaba ayudando al Şehzade a prepararse.
- Nuestro Imperio tiene pocos herederos en comparación con los antiguos reinados. Los sultanes ya han tenido más de veinte hijos, pero el Sultán actual solo tiene tres şehzades. Es por eso que nuestros şehzades son como tesoros para nuestra dinastía, ¿me entiendes Hürrem?
- Si, Sultana.
De hecho, no podía entender a dónde iba a conducir esta conversación. Era un hecho que un hijo asegura el linaje, el Sultán ya tenía tres, y eso era suficiente de donde yo venía.
- Nuestro Şehzade más viejo, Mustafa, tiene una sola hija. Y nuestro segundo Şehzade Bayezid tiene un solo hijo. Aquellos que pueden asegurar su linaje son solo aquellos bendecidos por Allah. Que él quiera que nuestro şehzade Mehmed sea bendecido también.
Sus palabras comenzaban a tener sentido. ¿Entonces ella quería que yo le diera al hehzade un heredero? No era algo que pudiera controlar, además, no estaba segura de si quería hacerlo.
- Sultana. No estoy seguro si entiendo.
- Hürrem, te elegí para ir con nuestro şehzade porque a pesar de tu edad pareces ser una chica fuerte. El tipo de chica que crece para convertirse en una mujer luchadora. Quiero esto para Mehmed. Como tercer hijo tiene pocas posibilidades de heredar el trono, pero hasta entonces quiero que esté en compañía de buenas personas.
- Haré todo lo posible para acompañar a lo Şehzade, Sultana.
- Hay personas que pueden querer dañar nuestro şehzade, dentro y fuera del palacio hay enemigos. Quiero que me cuentes todo lo que sucede en Amasya.
- Si, Sultana.
- Si haces que mi león sea feliz y leal, siempre me tendrás contigo.
- Gracias Sultana, no olvidaré tus enseñanzas.
- Puedes irte ahora. Termina de empacar tus cosas.
Me incliné y me fui.
Dioses, qué conversación tan tensa. ¿Por qué el Şehzade tendría enemigos si no es una amenaza para el trono? ¿Y por qué tuve que cuidarlo pronto?
Suspiré sintiéndome impotente. No podía huir, nadie lo logró.
La idea de que ya no podía ver a Jon o Robb me llenó de tristeza. Mi padre y el viejo Ama, las tierras heladas con nieve infinita.
Una lágrima corrió. Lo limpié rápido para que nadie lo viera y respiré hondo.
Lyarra se ha ido. Hürrem está aquí. Eso fue todo en lo que tuve que concentrarme
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