Fictober 2019 - Especial Mystic Messenger - Una historia en drabbles.

DÍA 4: NOCHE DE FIESTA

DIA 4: NOCHE DE FIESTA.

La noche de su primer día de vacaciones en grupo, había llegado.

El guía os recomendó asistir al festival que aquel pequeño pueblo realizaba, celebrando el año nuevo lunar.

Luego de haber cenado y haber hecho sobremesa, todos se ubicaron en el mirador de turistas, para poder apreciar los fuegos artificiales, siendo el mayor espectáculo de la noche.

Pero, esa noche de fiesta no parecía emocionarle demasiado a Saeran.

Su mente se encontraba en otro lado, repensando lo que había vivido hace horas.

Al ver que estaba tardando mucho en volver del baño, en aquella posada, se fue a buscarlo.

No tuvo éxito en encontrarlo en el baño, y volvió a la mesa, con la ligera esperanza de que se hubiesen cruzado, pero no.

― No te preocupes, seguramente salió a tomar aire a la terraza del segundo piso―le dijo Jaehee al notar su aflicción, tratando de calmarlo―, Seven tiende a asfixiarse cuando se encuentra en grupo, incluso en las fiestas que organizamos, solía perderse, ¿lo recuerdas?

Le tomó la palabra, ya que sabía que era cierto, aquel comportamiento de su mayor.

Pero luego de pasado quince minutos, la aflicción volvió a él, para luego levantarse y volver a buscarlo.

Dedicó varios minutos en buscarlo en la planta alta de aquel pequeño edificio, y no tuvo éxito.

Con una ligera intuición, volvió al baño de hombres.

Pero no había nadie allí, o eso pensó hasta que notó que la última casilla de los baños, se encontraba cerrada y se podía apreciar más de un par de zapatos.

Un par le era irreconocible y pertenecían a una mujer, pero el otro.

Conocía tan bien esos zapatos.

― Saeyoung... ―murmuró en un principio, analizando la situación.

Si su hermano estaba con una mujer, en el baño de hombres, en lo más apartado, solo podía significar que...

No, no podía creer que su mayor era de ese tipo de hombres que tenía encuentros casuales cuando estaba de vacaciones.

Pero ¿y si tal vez lo era? A pesar del pasado, el seguía manteniendo una imagen muy inocente de él.

Salió del lugar en silencio, y observó oculto a la distancia, para comprobar sus deducciones.

No tuvo que esperar mucho.

Fue solo un par de minutos para ver como discretamente salía una mujer joven, rubia, de cabello corto, ojos celestes, con vestimenta de los meseros que trabajaban ahí, acomodándose el cabello, que lo traía algo revuelto. Luego pasó otro par de minutos, para ver salir a hermano, también un tanto despeinado, llevándose una mano a los labios, como si tratase de limpiárselos.

No le dijo nada cuando volvió a la mesa y actuó de lo más normal, pero en el fondo, sentía que debía hablarle del tema.

― Mira Saeran, son hermosos, y enormes, me gustaría crear uno personalizado algún día ―le dijo el rojizo de lentes, sacando de su modo pensativo a su menor―. ¿Eh? Pareces algo decaído ―expresó de forma espontánea, al ver que este no sonreía al igual que el resto del grupo, ante tal espectáculo nocturno―, ¿te duele algo? Oh, no me digas que otra vez te dio diarrea... te advertí que no debías comer muchos mariscos.

Saeran, a pesar de lo terriblemente bochornoso que dijo, solo le respondió con un "no, simplemente tengo sueño", moviendo ligeramente la cabeza.

Ya hablaría y reprocharía su vida de excesos luego, cuando estuviesen solos.

FIN DEL DÍA 4.

NOTA DE LA AUTORA.

Hey! ¿Cómo están?

Uff, hoy amanecí con tos y fiebre, así que ando medicada, pero actualizando de todas formas, porque quiero cumplir con este bendito desafío xD

Gracias por los comentarios lindos que me dejan, me emociona saber que andan pendientes de este especial, o de mis otros fics similares. En verdad, muchas gracias y discúlpenme si no les respondo de forma individual.

Nos leemos mañana, en el "DIA 5: MALDITOS CELOS"

Bye bye ^^