Hola soy Jason

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    Mi nombre es Diego Molinary soy escritor. Tengo una vida bastante ocupada, escribo bajo el seudónimo de "Susurros del viento". Escribo novelas de amor. No me quejo las ventas son bastante buenas.

Mi editora me pidió una historia basada en en la época victoriana con todo en romance y "culcileria" posible pero vivo en la ciudad es tan ajetreada que no logro concentrarme así que decidí mudarme a las afueras de la ciudad para tener paz y tranquilidad para inspirarse.

Al  llegar al lugar todo parecía de ensueño una cabaña rústica pero acogedora en su interior rodeado de árboles y flores e incluso podían oírse los pájaros cantar en la lejanía, el lugar perfecto para inspirarse. Ya pasaban las 6:00 de la tarde cuando terminé de acomodar todo y me dispuse a tomar un baño. Luego del baño y de cenar algo ligero me acosté para poder levantarme temprano y comenzar a trabajar.

Me levanté de un brinco al escuchar un horrible ruido de guitarras eléctricas y una voz horrible que parecía venir de ultra tumba, las ventanas de la cabaña se estremecían y sentía que pronto se desplomaría el techo debido al fuerte ruido de la música. Desorientado miré el reloj y marcaba las 6:00 a.m de la mañana.

Miré al rededor buscando un pantalón de pijama que ponerme ya que duermo en ropa interior, lo tomé de una de las cajas que estaba terminando de desempacar me puse un suéter de mangas largas ya que hacía bastante frío. Me puse unas pantuflas y salí al balcón para ver de dónde venía el horroroso ruido.

Busqué con la mirada hasta dar con una cabaña igual a la mía pero frente a mí caminé unos cuantos pasos y toqué la puerta, no hubo respuesta volví a tocar otra vez no hubo respuesta. Toqué con mi puño y nada.

No se me ocurría nada hasta que la música se detuvo. Toqué el timbre nadie abrió me dí medía vuelta para irme a mi casa cuando de pronto la puerta se abrió de golpe dejando a la vista un chico pelirrojo semi desnudo con una toalla envuelta en su cintura.

Mis ojos no podían creer lo que veían el chico era alto y guapo su cuerpo bien trabajado y gotas de agua resbalando por su torso desnudo.

Aparté mis ojos de su cuerpo y tomé valor para hablar.

- disculpe, pero vine hasta aquí por qué su música me despertó, me mudé ayer y estoy bastante cansado para escuchar su " música" .

Dije con toda la amabilidad del mundo. El chico me miró de arriba hasta abajo sonrió de lado y me guiño el ojo y dijo con toda la naturalidad del mundo.

- hola, soy Jason y lamento si te desperté  pero esa es mi manera de despertar y ejercitarme en las mañanas y no pienso cambiar mi rutina solo por qué a usted no le agrade.

Fué todo lo que dijo antes de cerrar la puerta en mis narices y volver a poner música a todo volumen.

Giré sobre mis talones y me encaminé a casa con la sangre hirviendo y mi corazón latiendo a mil.

Esto no se quedará así declaró la guerra al hombre equivocado,

Yo Diego Molinary le haré pagar este insulto a ese, ese estúpido pelirrojo.

Estúpido, pelirrojoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora