Elección (Chanbaek)

Rescate

Era de noche cuando Chanyeol llegó al molino Moon en compañía de Kris y Sehun. El lugar se veía desierto, y ningún sonido u olor  le daba a los alfas alguna señal de tener compañía.

-No me gusta esta situación- murmuró Sehun sintiendo escalofríos por su cuerpo- Se me hace sospechoso que no haya nadie esperándonos.

-¿Has podido contactar con Baekhyun?- preguntó Kris- ¿Puedes sentirlo?

Chanyeol cerró sus ojos y trató de concentrarse en su pareja. Podía sentir tenuemente la presencia Baekhyun por medio de su lazo, pero no era lo suficientemente claro como para poder localizar al omega de manera exacta. Lo único que podía decir con seguridad era que Baekhyun estaba bien físicamente.

-No logró verlo de manera clara. Solo sé que está sentado y que no siente dolor físico. Creo que alguien está con él, o tal vez varias personas, pero nadie le ha hecho daño hasta el momento.

Chanyeol miró al cielo y rogó a la luna para que protegiera a Baekhyun mientras estaban separados. Aunque no sintiera dolor en su pareja, si sentía el miedo y la ansiedad de su omega, lo cual estaba empezando a alterar de mala manera a su lobo.

De pronto, el sonido de un motor rompió el silencio del bosque, y la imagen de Baekhyun comenzó a hacerse más clara en su mente. Siendo flanqueado por dos lobos grandes, el pequeño omega emanaba el miedo en oleadas, lo cual puso en alerta al alfa. 

Los tres amigos esperaron hasta que un jeep de color negro estacionó frente a ellos. Los aromas dejaban a entrever que el auto albergaba a dos omegas y seis alfas, lo cual solo significaba que una posible pelea, y los números no estaban a su favor. Sin Baekhyun, su lobo estaba inestable y al borde de la locura, solo la fuerza de voluntad para recuperar a su omega era lo que lo mantenía racional.

-Veo que seguiste nuestras instrucciones- dijo Jongin mientras bajaba del auto, siendo acompañado por dos alfas que Chanyeol reconoció como la guardia personal del alfa líder.

-¡Quiero ver a Baekhyun!- gruñó Chanyeol mostrando los dientes- ¡Devuélveme a mi omega!

Jongin hizo una seña a uno de sus guardias, quien se adentró al vehículo, tomando sin ninguna delicadeza al omega y tirándolo al piso al lado de Jongin.

-Ahora puedes ver que Baekhyun está bien- dijo Jongin con calma.

Una delgada figura apareció de detrás de Jongin y miró directamente hacia los Chanyeol, Sehun Y Kris- Pero depende de ustedes para que esta situación no cambie- murmuró Kyungsoo con malicia, tomando el pelo de Baekhyun y tironeándolo para probar su punto.

El quejido de dolor de Baekhyun terminó por quebrar la poca cordura que quedaba en Chanyeol. Así que, sin detenerse a pensarlo, se abalanzó, sin ningún tipo de estrategia, sobre Jongin y Kyungsoo. Su lobo solo tardó 3 segundos en hacer presencia, mostrando sus dientes y gruñendo en una promesa de dolor y muerte.

-¡Chanyeol!- Chilló Baekhyun con puro terror, temiendo que Jongin y sus secuaces  sometieran a su pareja y lograran por fin su cometido de matarlo- ¡Por favor, Chanyeol, no lo hagas!

Pero su alfa ya no respondía a su lado racional. Chanyeol buscaba venganza, y la conseguiría a cualquier costo. Sintió un ruido de patas detrás suyo, pero no le prestó atención. Su objetivo era Jongin, y no le quitaría la mirada de encima.

Jongin sonrió con malicia, y, con un solo gestó de su cabeza, tuvo a los dos alfas que venían con él transformados en lobos, así como cuatro más que salieron desde el interior del jeep. 

Y la verdadera batalla comenzó.

Chanyeol se lanzó sobre Jongin, siendo flanqueado en todo momento por sus amigos. Pero el alfa no esperaba que las cosas se le hicieran fáciles. Antes de poder llegar a su objetivo, uno de los lobos lo empujó brutalmente, lanzandolo unos metros lejos de su objetivo.

Eran seis contra tres, y los lobos de la guardia eran mucho más grandes y experimentados que tres adolescentes hormonales. Lo único que estaba a favor de los jóvenes era el deseo de venganza de Chanyeol, y las leyes de la manada. 

Chanyeol no era estúpido, y sabía que. a pesar de estar enfrentándose contra el alfa de la manada, éste no estaba por sobre las leyes, y Jongin estaba quebrantando la más sagrada de todas. Los compañeros destinados eran sagrados para la cosmovisión cambiaforma, y el secuestro de uno de ellos significaba la muerte para el perpetrador de tal acto despreciable. Si Jongin creía que estaba jugando sucio al citarlo en un lugar apartado de las tierras de la manada, es que aún no conocía a Park Chanyeol.

Siendo un renegado la mayor parte de su vida, Chanyeol había aprendido las leyes de la manada en caso de necesitar salvarse de los ataques de la familia Kim. Un traidor siempre era un traidor, aunque se rodee de riquezas, el hedor a la traición permanecerá en él, y eso era lo que Chanyeol veía en los actuales alfas. Así que, valiéndose de alguien más "respetable", el joven alfa había mandado un mensaje de advertencia a su jefe en el restaurante avisando de su paradero y del motivo de estar ahí.

Los cinco alfas de la guardia se posicionaron frente a Jongin, gruñendo y mostrando sus dientes en posición de ataque. Chanyeol compartió una mirada preocupada con sus amigos. Si bien su causa era importante, no quería arriesgar la vida de Kris y Sehun por un asunto que era completamente suyo.

-¡Ni lo pienses!- gruñó Sehun, dando a entender que iría con Chanyeol hasta el final.

-Pero...

-Estamos contigo, y lo terminaremos juntos- gruñó por su parte Kris, dando por terminado el asunto.

El lobo de Chanyeol agachó la cabeza a modo de entendimiento y miró una última vez a Baekhyun. Los gritos de este suplicando que parara con la pelea eran ensordecedores, pero, por primera vez en su vida, Chanyeol y su lobo eran uno, y no pararían hasta asegurarse de que su pareja estaría a salvo, incluso si eso le costaba la vida.