Cap. 32

59 4 0
                                    

*en cuanto el albino dormia en la habitación los otros dos aprovecharon de ir a examinar la casa por partes divididas en caso de que van a quedarse por más tiempo deben de estar con el conocimiento de la casa entera para evitar tener que ir como idiotas buscando de un lado a otro lo que el menor pueda estar necesitando, el pelicrema se encontró con una habitación que parece ser almacén por las cosas que tenía, sobre todo la tabla de snowboarnig que por alguna razón estaba derecha en la pared, el resto eran balones y las otras cosas que han guardado cuando entrenaban, el pelirrojo a cambio solo estaba en el ático mirando alrededor algunas cosas que podía alcanzar a simple vista.*

H: no mentías cuando hablabas de conservar los recuerdos...

*dijo para sí mismo con una pequeña esfera en las manos, un recuerdo del cual celebraron navidad en equipo, si que fue un buen recuerdo, pero no se quiso quedar mucho tiempo y tras bajar encontró en el camino al pelicrema en dirección a la habitación del albino.*

H: ¿despertó?

G: eso estaba por ver...

*despacio abre la puerta para encontrar al albino todavía acostado en la cama de espaldas a la puerta, despacio se acercaron para ver como estaba, a pesar de todo, dormía como un ángel sobre una nube, un nudo en la garganta se les presentó a ambos por verlo en el momento que rápidamente fue interrumpido por el sonido del timbre.*

H: yo iré a abrir.

*y sin más baja con cuidado las escaleras hasta la puerta que tras abrir encuentra al celeste con un frasco de miel en las manos.*

H: buenas tardes kazemaru.

Kaze: buenas tardes, ¿shiro esta despierto?

H: está durmiendo en su habitación.

Kaze: ¿se puede ir a verlo?

H: no veo que sea malo, solo no hagas mucho ruido por favor.

Kaze: ..... De acuerdo.

*subiendo de regreso hasta la habitación del menor encontraron al pelicrema midiendo la temperatura del menor y colocándole un paño humedo un poco frío.*

Kaze: veo que tenía razón...

G: estos días fueron raros para los 3

Kaze: ¿a que te refieres?

H: cada vez que estamos los 3 algo sucede... Al menos por estos días así paso.

Kaze: mala suerte a lo mejor, deberían de ir con un espiritista

*se acerco al albino para verle mejor, si estaba dormido así que bajo el tono de voz.*

Kaze: traje un poco de miel para su resfrio, ¿desde hoy está así?

G: así nos dijo, tomo una ducha fría con el calor que hizo anoche.

Kaze: ni sabia que pasaría eso...

*suspiro un poco antes de quedarse en la orilla de la cama sin tener que interrumpir donde estaba el albino, luego de reojo miró a los dos muchachos por largo rato.*

G: ¿que pasa?

Kaze: nada.

H: ¿seguro?

Kaze: así es.

*un poco incómodos respiraron hondo.*

H: ¿no ha bajado nada?

G: solo un poco, al menos no es tan alarmante.

Kaze: ¿puedo saber cuánto tenia?

G: un poco más de 45.

Kaze: ¡¿que!?

G y H: shhhh!

Kaze: lo siento...

H: a la primera siempre da muy alto, no muy consecuente pero suele pasar.

G: seguro fue que intento cubrirse con las sábanas, normal el frío arrasa.

H: ¿recuerdas cuando todos casi nos quedamos atrapados en la nieve?

G: no me lo menciones... Tuvimos que esperar que nos sacara para ir por el resto, de verdad creyeron que nos enfermariamos.

*pero cuando se acordaron de la presencia del tercero voltearon a ver.*

G: ¿tu no te acuerdas?

Kaze: si... Me acuerdo...

*dijo algo incomodado, pero manteniendo la respectiva distancia.*

Kaze: ¿saben que...?

G y H: ¿que?

Kaze: de verdad parecen niñeras....

G y H: ¡¿que?!

Kaze: shhh! -.-

*no se lo esperaron.*

Kaze: ay por favor ¿que no se dieron cuenta? Parecen dos madres compitiendo por quien se queda con la custodia de un niño huerfano.

*por respecto a que el menor estaba ahi, se acercaron no con buena cara.*

G: no somos niñeras.

H: ni tampoco peleamos.

Kaze: ajá, como si les fuera a creer...

"Todo por culpa de ese reto"Where stories live. Discover now