10 años después
Caminaban tomados de las manos hace mucho que no salian por motivos de tiempo y de trabajo, su hija había audisionado para ingresar al grupo de baile nacional de Seúl, con mucho esfuerzo había sido aceptada y ahora estaba viajando rumbo a Japón para competir con otros países. Sus padres siempre estuvieron orgullosa de ella, pues al ser hija única le dieron la atención que merecía y el cariño correspondido, claro, con algunos consentimientos de Hyunjin.
— Iré por un helado — hablo el chico dirigiendose al carrito que estaba cerca de ellos mientras ella caminaba a unas bancas que habían en el parque.
— De chicle, por favor — grito para que la oyera.
Una vez que se sentó en la mesa un chico de cabellos castaño claro se puso frente a ella y le sonrió tímido.
— Disculpe, esto, se le cayó — le tendió la pequeña billetera que ella solía llevar a cualquier lado.
Le agradeció con una sonrisa amable y una reverencia.
Hyunjin vino minutos después con el seño fruncido y le tendió el helado molesto. La chica arqueo una ceja y tomo el helado sin antes darle una sonrisa pero solo se ganó nada.
(...)
— ¿Se puede saber por qué estás molesto? — se atrevió a preguntar la chica una vez que estuvieron en la casa que ambos habían comprado.
El chico solo bufó y subió a su habitación.
Una vez que ella se acostó a su lado paso su brazos por el abdomen del chico formando un abrazo pero este retiro las manos de su cuerpo y se levantó.
— ¡Hwang Hyunjin! — el tono de voz que uso no era el de uno molesto, tenía curiosidad de saber lo que pasaba con su esposo pero el no le daba ninguna respuesta.
— Pregúntale al chico del parque — debe ser una broma.
— Está bien, iré a preguntarle, ya que mi esposo está molesto por algo estúpido.
Salió de la habitación antes que el y bajo al living para dirigirse a la puerta de la casa.
La tomo de la muñeca cortando toda distancia que había entre ellos.
— No puedes ponerte celoso y luego besarme
— Sigues siendo hermosa, y.... Me puse celoso porque te sonreía de una manera coqueta y no me gustó para nada.
— A ti te sonrien todas las mujeres que te ven y no hago una escena de celos.
— Ese no es el punto
—¡ Vamos!, eres guapo y todas te quedan viendo, todavía no olvidó que eras el chico mas popular del instituto.
— Y tú la más deseada.
¿Que? Dijo..... La más deseada.
Entonces se le ocurrió jugar un poco con el, se acerco casi besando sus labios, esos que tanto le volvían loca porque los tenia muy esponjosos y apetecibles.
— ¿Para quienes? — pregunto sobre sus labios y puso notar el nerviosismo que comenzó a tener Hyunjin — ¿Para ti o tus amigos?
— Y-Yo n-no recuerdo
— Está bien — se alejo con una sonrisa en su rostro.
Sonrió con alegría de haber logrado su objetivo, entonces ella bajo su mirada a la entrepierna de Hyunjin y su amigo ya había despertado.
¡Dios! Tan rápido.
Se dió la vuelta y fue a la cocina a buscar algo de comer, un fuerte agarre en la cintura la hizo saltar en su lugar, Hyunjin había pegado su cuerpo al cuerpo de la castaña haciéndole notar su erección.
— H-hyunjin — suspiro la castaña.
— No me puedes dejar así — dijo con voz ronca, entonces la chica lo tomo del cuello y comenzó a besarlo.
Hwang tomo las piernas de su esposa y la hizo sentar en frío mármol de la cocina, se posicionó entre las piernas de ella y comenzó a besar sus labios de manera brusca para después comenzar a dejar marcas en el cuello de ella.
Tomo las piernas de la chica y con mucho cuidado subieron los escalones que daban a la habitación de ambos. Hace mucho tiempo que no habían tenido nada que ver con el sexo. Estaban muy ocupados para tener intimidad entre los dos.
La dejo sobre la cama y comenzó a bajar los besos hasta su ombligo, retiró la camisa de ella dejándola solo en brasier, mientras que ella se encargaba de sacar la camisa de su esposo a pesar de los años todavía seguía teniendo el cuerpo marcado y eso la volvía loca.
Al cabo de unos minutos estaban completamente desnudos.
GI, se arrodilló frente al miembro de su esposo y comenzó a masturbarlo con sus delicadas manos, metió el miembro a su boca y comenzó a chuparlo, estába nerviosa, nunca antes le había hecho un oral a Hyunjin. En cambio el la hizo pararse y la pego contra la cama, paso su miembro por la entrada de la castaña y comenzó a penetrarla con embestidas suaves pero profundas.
Gemidos y mucho sudor abundaba en la habitación de ambos, las estocadas que Hyunjin daba eran más rápidas, estaban a punto de venirse, unas estocadas mas lentas y profundas y darían por terminada su gran tarde
— AAh! — gimió alto la castaña y beso por última vez a su esposo.
Se taparon con la sabanas y Hyunjin salió de ella para abrazarla y besarla.
— Ahora entiendes que eres completamente mia — hablo burlón.
— Y tú mío — le siguió el juego.
— No sabía que podías hacer eso
La castaña se sonrojo y se tapó con la sabanas.
— Y-yo tampoco.
El chico sonrío y beso la frente de su esposa.
— Te amo, amor
— Yo te amo más
Dai-n.
Ahora sí, gracias por todo el apoyo que ha recibido está temporada y la primera, gracias por las vistas y espero que sigan apoyando mis demás historias, muchas gracias.
