Harry Potter one shots

24- Veinte Galeones-James Sirius Potter

Parte 2/2 ( Capitulo 6)

Quedan solo seis meses para que mi época escolar termine, y estoy deseando tener un trabajo en el mundo mágico. Todo va como debe ir, todo, menos James Sirius Potter, el chico de mis sueños que no ha parado de intentar mostrarme que ha cambiado y que no sigue diciendo cosas estúpidas e hirientes.

- Deberías hablar con mi hermano – Dice Lily mientras me entrega unas cosas que se me han caído de la mochila, como si se me hubiese desgarrado sola – Por favor, llevas un mes sin hablar con él, y aunque parezca imposible, el hecho de que te enfadases con él lo ha hecho madurar.

- Mira Lily, para ser tan pequeña, hablas demasiado bien, como tu tía la ministra – Digo con una sonrisa divertida al ver como la pequeña Potter habla en su nombre – Pero si él no viene a hablar conmigo, ¿qué debo hacer yo?

- ¿Quieres decir que si él viniese y hablara contigo, no te irías? – Pregunta Lily con una sonrisa enorme, asiento no muy convencida por su mirada tan parecida a la de su hermano mayor, y veo como hace señas tras una de las estatuas, donde aparece James con una caja de grajeas, mi dulce favorito – Gracias, acabas de conseguir que mi hermano me de veinte galeones.

- Gracias, Lily – Dice James empujándola lejos de mí y dejando en su mano de forma disimulada una pequeña bolsa de cuero que suena a veinte galeones – Bueno, hola.

- Hola, Potter – Saludo antes de susurrar "¡Reparo!" sobre mi mochila – ¿Tienes algo que decirme? Tu hermana piensa que sí.

James se sonroja y se rasca la nuca levemente, me mira de forma arrepentida y agarra mi mano con suavidad.

- Lo siento mucho – Susurra un poco avergonzado, ya que la gente que pasa a nuestro alrededor sé queda viendo su sonrojo – Yo, realmente siento mucho todo lo que dije, y el daño que sentiste por mi culpa. Me encanta que seas Slytherin, me encanta que seas tú, y lo que escuchaste, solo fueron palabras de un imbécil que ahora está bastante arrepentido.

- Potter, una oportunidad más – Digo acercándome a él. Acaricio su mejilla y, cuando James se inclina para besarme, hago una pedorreta con mi lengua y me río por su cara – Pero antes, quiero que tengamos una cita.

- Hecho – Dice inmediatamente y besándome de improvisto – Lo siento, llevo un mes sin ti.