Paralelo - Nomin

Capítulo 10

—Jeno, bebé...—canturrea Jaemin por como décima vez y Jeno pone sus ojos en blanco.

Ha pasado un buen y considerable tiempo desde el incidente y Jeno se ha mantenido firme y orgulloso, no ha habido una leve caricia, no había nada de contacto físico Jaemin-Jeno, y todos sabían lo que pasaba cuándo eso sucedía. 

Los días de Jaemin.

Todos conocían los días de Jaemin, Jaemin siendo una perra irritable en celo, todo el tiempo parecía hambriento y Jeno había usado la abstinencia un par de veces sólo porque le encantaba la energía sucia de Jaemin luego de un par de días, aunque en estos momentos, eran desesperantes.

Jeno rueda sobre la cama dejando caer a Jaemin, quien se encontraba sentado sobre él a duras penas, a un lado de la cama, haciéndolo gruñir de enojo. 

—Maldita sea Lee, te necesito—susurra Jaemin a un lado de la cama, golpeando con el puño cerrado la espalda de Jeno.

Jeno conocía las fases perfectamente. Esta era la primera, enojo. 

—No podrías perdonarme, una maldita vez, te he perdonado un millón, ¿Sabes? —Jaemin dice y Jeno sabe que lo dice entre dientes aunque no lo ve.

No obtiene respuesta y resopla. 

—Voy a tener que obligarte, no puedo soportar tu maldita actitud de niño. 

Jeno frunce el ceño ante las palabras y voltea de inmediato, lo toma de un brazo y lo arrastra más cerca. 
El puede ver que sus ojos se suavizan y la segunda fase comienza, suplica. 

—Por favor Lee, estás siendo un completo idiota conmigo—dice Jaemin, y sus ojos se ven más grandes, brillantes, su color es llamativo, diablos, como sabe cuánto ama Jeno su mirada inocente, lo enciende particularmente mucho.

Jeno gruñe. 

—Jaemin, cállate, por favor, ten un poco más de dignidad. 

Jaemin frunce el ceño, sus ojos siguen brillantes y su labio inferior sobre sale mucho, como la mirada de un niño.

—Tú solo estás tratando de ser duro conmigo, pero no está funcionando, no de la forma que esperas—susurra, su voz es más un suspiro.

Jeno toma una bocanada fuerte de aire, y cierra los ojos para evitar mirarlo. 

—No voy a tener sexo contigo—dice con firmeza, y de inmediato siente una mano por su estómago desnudo, sabe entonces que la fase tres, la que más odia, comienza.

Seducción. 

Abre los ojos de inmediato, y Jaemin lo mira con los ojos dilatados, mordiendo su labio con fuerza. 

El puede sentir la mano bajando por su pantalón, adentrándose en él, no puede hacer más que tratar de disimular su temblor desesperado. 

—Por supuesto que quieres—susurra Jaemin y siente su aliento cálido acercarse, Jeno aprieta la mandíbula. 

—Deja de joder, por la mierda—Jeno gruñe con desprecio.

Pero él hace caso omiso a sus palabras despreciativas y entonces acerca sus labios al cuello de Jeno, rozándole con paciencia, el mayor sabe que está conteniendo sus gemidos por el contacto de nuevo con la piel, entonces Jaemin toma su miembro con la mano dentro de su pantalón, el no puede evitar la creciente erección. 

—Al parecer no te molesta tanto, bebé... —Jaemin susurra sobre la piel perfumada de su cuello, y entonces comienza a succionar su piel con fuerza, esta vez, Jeno gime.

Siente la sonrisa de Jaemin en su cuello, el ha ganado. Y eso enoja a Jeno, pero él está aún más desesperado. Jaemin separa el contacto y le da la espalda, pero de nuevo se acerca a él. Entonces Jeno reconoce su erección chocando contra el trasero de Jaemin que se presiona contra su entrepierna, con mucha fuerza. Jaemin gime fuerte y se restriega un poco contra Jeno, para luego tomar su mano. 

—Te necesito...—susurra y lleva los dedos a sus labios—no importa si son tus dedos... 

El besa su dedo indice y pasa la punta de su lengua por este hasta el siguiente. 

—O que importa si es dentro de mi—dice casi como un gemido mientras lame el tercer dedo esta vez con más esmero—O si es mi boca. 

Lleva los tres largos dedos a su boca y absorbe en un sonido sucio ahuecando las mejillas. Jeno se muerde el labio cuando el trasero de Jaemin presiona aún más moviendo sus caderas de arriba abajo, cuando toma con su mano libre la cadera de Jaemin para apretarlo, siente la humedad, no puede creer que esté tan cerca en tan poco. 

—Mmm—sale de la boca de Jaemin y se voltea en un quejido de Jeno— Creo que este gatito quiere un poco de eso. 

Hay un ronroneo y Jeno simplemente quiere que pare de hacer sonidos o se correrá en cualquier instante. Jaemin toma los pantalones del mayor y los tira hacia abajo, lleva su lengua por el cuello de Jeno, y si, Jeno no puede creerlo, pero el maúlla después y sabe perfectamente que está usando su juego favorito, al cual éste no se puede negar. 

—¿Papi está enojado con gatito?—dice poniendo sus rostros frente a frente, haciendo un puchero para él con los ojos brillantes.

Jeno gruñe cuando él se ayuda con su pie para bajarle el pantalón y roza su entrepierna. 

—Voy a arreglar eso—susurra y su voz deja de ser infantil y suena más sensual ahora, haciendo vibrar un frío por la espina dorsal de Jeno.

Jeno muerde su labio, Jaemin ronronea mientras pasa los labios por su oreja y sonríe contra esta cuando toma el elástico de sus boxers. El mayor está desesperado y solo puede gruñir entre dientes, contenerse con la mayor fuerza que alguna vez pudo ejercer. 

—El gatito quiere un poco de leche—susurra Jaemin bajando los boxers de Jeno—un poco de leche en su boquita.

Entonces gime fuerte, tan excitante y caluroso en su oído, y Jeno no puede evitar soltar un gemido que estuvo reprimiendo. Jaemin baja para saborear sus abdominales con esmero, los gemidos saliendo de su boca poniendo a Jeno al borde. Jaemin llega a la parte baja de su abdomen y pasa la lengua por toda su V con esmero, Jeno está viendo luces, está alucinando en el propio placer. 

—No hagas esperar mucho a este gatito, está tan hambriento—dice el menor usando su voz seductora y necesitada, Jeno a veces la odia, podría hacerlo correr con ello.

Entonces salta y gruñe fuerte cuando en un movimiento rápido Jaemin toma su miembro y lo lleva a su boca. Sus manos se descontrolan y toman el cabello de Jaemin para acercarlo, éste hace movimientos con su lengua que hacen que sus caderas se eleven, tocando la parte posterior de su garganta.

—Maldición—Jeno apenas puede pronunciar, está cegado y sólo puede tirar del cabello de Jaemin para llegar más adentro.

Entonces siente el cosquilleo por su estómago y tiembla de placer, corriéndose en la boca del menor con intensidad, oleadas de placer arrasando con su cuerpo, dejándolo con la respiración entre cortada. 

Jaemin lo suelta haciendo un sonido con su boca, se coloca a su altura en la cama y le sonríe. 

—Delicioso—susurra y lame sus labios. 

Jeno se recupera con paciencia, su pecho sube y baja, entonces lo mira, sus ojos dilatados, su cabello desordenado, sus labios brillantes, su piercing tentándolo, los mechones rojos brillan más que nunca, como el fuego en su mirada. El quiere odiarlo, demasiado. Pero maldita sea, no puede pensar, el sólo lo toma del cuello bruscamente comiendo su boca como si no hubiera un mañana. Jaemin no tarda en responder, sus piercings chocan, y cuando Jeno introduce su lengua en la cavidad bucal de Jaemin no puede evitar gemir con fuerza, con desesperación sintiendo su calentura consumirle. 

—Jodeme, por favor, hazlo—gime el menor mientras Jeno absorbe la piel de su mandíbula, dejando marcas mientras se dirige a su cuello—estoy tan apretado para ti. 

Jeno sonríe y aprieta el trasero de Jaemin con fuerza, haciéndolo gemir sintiendo sus manos impacientes por arrancar su propia ropa y ser jodido. 

Jaemin no es el único que ha ganado, no.