Jane Houston es una persona tímida, optimista y callada. Es reservada con cada persona que conoce ya que tuvo un pasado demasiado duro. Su único amigo es Will Byers, con el único con quién comparte sus sentimientos y gustos. Vive en una casa llena d...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Cuando Will abrió los ojos, todos suspiraron con alivio. Jane mira a Max de reojo ya que la nota muy asustada y con muchas preguntas en la cabeza. Sin embargo, si Jane no supiera que está ocurriendo, se encontraría en el mismo lugar que la pelirroja. Will no vuelve a hablar durante recorrido para salir de la escuela ya que Joyce lo toma por los hombros y le hace apurar el paso.
- Sabe que puedes llamarnos cualquier cosa, señora Byers - le asegura la morocha, tratando de sonar amable.
- Sí, lo sé - hace un intento por sonreír y sube al auto junto a su hijo.
El motor arranca y los cinco niños lo observan hasta que se pierde de vista. Max es la primera que rompe el silencio:
- Eso fue aterrador - dice, mirándolos. - ¿No los asustó?
- Dos episodios en dos días - murmura Lucas.
- Está empeorando - habla Mike, frunciendo el ceño.
- No nos deja ayudarlo... - se lamenta Jane.
- ¿Será la visión verdadera? - pregunta Dustin, acomodándose la gorra.
- ¿Qué es la visión verdadera?
Todos se giran para ver a Max y Mike le da un codazo a Lucas para que respondiera.
- Um... Eh... No es nada... Nada.
Al día siguiente, aún sin saber nada de Will, Jane decide tomar la iniciativa y llamar a su casa. Sus cinco hermanos la miran extrañados pero desayunan mirando la pequeña televisión.
- Hola... ¿quién es?
- Soy Jane Houston, la amiga de Will... - contesta tímidamente la morocha.
- ¡Oh, Jane, cariño! - exclama Joyce, con un toque de alegría. - ¿Cómo estás?
- Preocupada, quería saber cómo está Will.
Joyce suspira.
- Tiene fiebre, no podrá ir a la escuela hoy.
Jane baja la mirada y apreta los labios.
- Oh, bueno... Le avisaré a los chicos.
- Gracias por llamar, él te manda saludos.
- Igualmente y... no hay de qué.
Corta la llamada, toma un waffle y se sube a la bicicleta lo más rápido que puede. Quiere despejarse, pensar en otra cosa que no sea Will... Aunque no tiene nada de malo pensar en él, se dice por dentro. Pero solo desea que se cure, que deje de tener visiones y que vuelva a ser él. Cuando llega a la escuela, se da cuenta de que sus amigos ya han dejado su bicicleta. Así que mira alrededor y se sorprende cuando los encuentra frente a un bote de basura.