Capitulo 18 Intercambio

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06 de Julio 2019

18:34 p.m.

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Podría simplemente pedirte que no te vayas...
¿Es mucho pedir?
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— Cariño — beso la mejilla derecha de Octavio, para que él después me de un tierno beso en los labios, haciéndome reír. — ¿Cómo están por allá? — se aleja de mí, para quitarse el saco y dejarlo en el perchero que está cerca de la comoda.

Caminamos hasta la sala mientras el toma mi mano y no la suelta para nada, algo que me hace sonreír por su forma de quererme.

— La empresa ya está, lunes a primera hora empiezan a seguir con el trabajo — Tomamos asiento, pero Octavio acomoda unos cojines detrás de mi espalda.

— Gracias — Agradezco por ello, ya que estos día, mi vientre ha estado creciendo mucho y es causante de más dolor de espalda y piernas. — María está en el patio con las niñas y los chicos salieron a tomar un trago, se llevaron a Alexis en ello — Digo en tono acusatorio — Solo les dije que no lo dejen mula, al veces son unos estúpidos ellos dos — Suspiro pensando en mi hermano.

— ¿No te molesta que beba? — Pregunta Octavio, pero se que está disfrutando ello.

— No, no me molesta. Simplemente que tome con moderación está bien. Pero a que no pueda caminar solo tampoco — Digo mientras su mano libre, hace pequeños dibujos en mi vientre. — Pero... ¿Nada? — Lorena no aparece, la madre de ella desapareció como una aguja en un pajal. Y de Ricardo, no hay información alguna — Siento que ellos están tramando algo y que ...

— Te pedí que dejes de preocuparte por el tema — Dice molesto y aunque no lo está z la manera de que habla lo aparenta — Podrán ir a clases, llevarán seguridad — Y aunque este tema, le pedí que no se realice, el se entercó que sí, que ellos deben llevar seguridad.

— Octavio... — Pero antes de que repliqué la desición que tomó, la voz despreciable de Damián inundan la sala

— Cuñada has caso, fin y al cabo él lo paga — si, irritación total es lo que siento al verlo llegar, está con su camisa arrugada.

— Recuérdame porque estás en mi casa — Gruñe Octavio ante mi molestia con que mantengo con aquel tipo.

Quiero llevarme bien, tanto con Damián como con Carlos, pero ambos son molestos, aburridos y siempre tratando de hacer que las niñas, Alexis y yo sintamos que aquí, somos la sobra.

— Será porque papá me ha llamado para que ayude en la investigación que casualmente, está chica trajo a tu vida — Toma una de las botellas que están en la repisa de la mesa de licores de la sala.

— Querido cuñado — El vaso que traía en manos lo dejó caer tras escuchar lo que dijo. Ello ocasionó que Se quebrará en pedazos — Lo único que tratas de hacer, es que cuando tenga la más mínima oportunidad, te ahorque hasta que dejes de hablar. No sé, bueno lo sé — Digo mientras Octavio va por una escoba y basurero para alzar el desastre que su hermano hizo — Sé que me odias, puede ser por todo, lo comprendo. Pero tu actitud no es comparado con nada de lo que... — Muevo mis dedos con diversión, mientras esa mirada que dice matarme ya, me tiene fijado sin moverse, creó que ni respira el pobre — De lo que es tu hermano. Se que te arde, que tu hermano, Octavio, tenga mas acceso a las empresas de tu padre. Tu manejas una empresa y él, casi todas. A la vez, tú y Carlos son descuidados con su dinero, piensas que Octavio no es bueno en lo que hace. Pero el trabaja, yo lo ayudó, trata de estar tiempo conmigo y con mis hijos y a la vez, él tiene en sus manos el empleo de muchas personas en sus manos — Alago ante ello, Octavio deja lo que trajo para que él lo alce — Limpia tu desastre, no podemos tener empleadas aquí, todo tenemos que arreglar nosotros mismos, ayúdame — Estiró mis brazos a Octavio para que me ayude a levantar del sillón.

Manipulado por mi Secretaria © [COMPLETA ✔️]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora