14.DIONISIO

139 13 0
                                    

2 de agosto de 453 a.C, Grecia
Aprovechando que habían cogido bastante dinero para posibles contratiempos durante el viaje, Mimi y Alba se permitieron el lujo de alquilar una habitación en un hostal para aquella noche.
Una horas antes habían bajado hasta una cala tranquila a orillas del mar a lavarse, pues debido a la dureza del camino de los últimos días no habían podido hacerlo todavía.
Esa noche, en aquel pueblo se celebraba una gran fiesta, para evitar que el dios del mar se sintiese ofendido y cargara contra pueblos de la costa como aquel.
En la plaza mayor los músicos tocaban alegres melodías mientras que la gente bailaba. A su vez, una pequeña procesión se preparaba, con un animal para sacrificar en el templo de la playa, situado a unos diez quilómetros de allí.
Las dos viajeras permanecieron en el pueblo bailando y bebiendo sin parar hasta altas horas de la noche.
Sin ni siquiera darse cuenta Alba perdió a Mimi en la multitud. En un momento dado, se encontró sola entre un montón de gente desconocida, que bailaba y cantaba alegre.
Como una hoja llevada por el viento fue cambiando de brazos y copa, hasta que sin ni siquiera saber cómo acabó dentro de un local, bailando como si no hubiera un mañana.
Al mismo tiempo, Mimi caminaba muy agobiada por el centro del pueblo, apartando a la gente como podía, mientras iba pasando. No podía perder a la chica. No debía. Después de un rato bastante largo, se rindió, retirándose a la playa.
Entre las olas, tranquilas, en medio de un suave vaivén, comenzaron a escucharse voces.
Mimi no se asustó en absoluto. Habían sido invocadas por ella.
-¿Dónde está la ninfa del tiempo?-preguntó.
-Donde se acaba la vida y dónde se para el tiempo con solo mirar. Dónde esa playa de arenas doradas acaba. Fijate.
Las hijas de Poseidón siempre le habían dado ese tipo de mensajes. En su pasado, buscando formarse como sacerdotisa, había comenzado a viajar por todo el país, en busca de lo trascendental. Al llegar a la costa había conocido a aquellas criaturas, tan increíbles como misteriosas.
Mimi se puso a pensar y al cabo de poco más de un minuto tuvo la solución. El acantilado.
Corrió hacia su destino y al llegar, vio a la joven sentada justo en el borde, con la mirada perdida en el mar.
-¿A que es bonito?-le preguntó, al verla llegar.
-Ya lo creo.
-Echo de menos mi tierra. Era tan bonita... Aunque he de admitir que esta también es preciosa.
-Alba...-susurró, acercándose a ella-Creo que puedo hacer que contactes con alguien de tu tiempo.
-¿¡De verdad!?
Mimi simplemente asintió.
-¡Enséñame como!
Sin mediar palabra, la sacerdotisa se colocó justo detrás de Alba y le puso las manos en la cabeza.
Se concentró y al cabo de unos pocos segundos en el interior de su cabeza se comenzaron a formar las primeras imágenes. Un bosque, una playa, volcanes, Islandia.
-Miki, ¡Mira esto! Asomada sobre un peñasco Alba miraba al horizonte. Justo enfrente de ellos había una playa de piedra gris y unas ruinas de mármol, más propias de la Grecia Clásica, que de aquella tierra de vikingos.
El chico se acercó a su compañera de trabajo y sorprendido vio el pelicuar conjunto.
De pronto la escena se cortó y se materializó otra muy distinta.
Tumbado sobre la cama y con una pequeña lamparita encendida, escribía algo en una libreta.
De prontó la Alba del pasado escuchó la voz de Mimi.
-Puedes hablarle ahora.
-De acuerdo.
Concentrando todas sus energías hacia el futuro susurró: "Ven a por mí. Sálvame. Tan solo te pido eso. Tan solo te pido eso"
Se volvió a concentrar en Mimi.
-¿Ya has hablado con él?
-Sí.
-De acuerdo.
Como por arte de magia la escena se esfumó y se mostró otra muy diferente, aunque también protagonizada por Miki.
Estaba en el paseo marítimo de Barcelona, mirando el mar. Hacia un día de otoño, así que el frío y el viento azotaban el mar, provocando un violento oleaje.
Mientras tanto Miki solo lloraba, dejando caer sus lágrimas, mientras que el viento le golpeaba en el rostro.
Alba supuso que esa era una escena más reciente y que estaba llorando su "muerte". Quiso repetir el mismo mensaje que antes, pero antes de conseguirlo su voz se perdió en el tiempo y sin ni siquiera saber cómo volvió a estar en aquel acantilado en Grecia.
-¿¡Por qué no me has dejado terminar?!
Alba estaba realmente cabreada con la sacerdotisa.
-¡No me vengas prometiendo cosas que luego ni siquiera vas a cumplir!¿¡No lo has visto llorar mi muerte?!¿¡No lo has visto?!
Esperó la respuesta de Mimi durante un par de segundos y al ver que no llegaba anunció que se iba al hostal a dormir.
Con paso firme desapareció por la suave cuesta que llevaba hasta el pueblo y dejó a Mimi sola, frente al mar.
Ni se inmutó. Comprendía el enfado de la joven, pero a su vez ella tenía sus razones. Si Miki hubiera escuchado todo el discurso que pretendía darle Alba a través de una voz en el interior en su cabeza, posiblemente se habría vuelto loco y eso era precisamente lo que menos quería.
Bajó a la orilla del agua y volvió a preguntar a las hijas de Poseidón.
-¿Dónde está Nox?
"Diosa de la noche y señora de todo lo que se oculta del sol, permanece en un lugar oscuro y perdido de toda civilización, junto a la mujer de los ojos de serpiente, que guarda su tesoro más preciado"
-Medusa...
NOTA DE LA AUTORA
Se viene. En menos de cinco capítulos la historia la historia acabará un ciclo y comenzará otro, el penúltimo de la novela.

ℚ𝕌𝕀𝕄𝔼ℝ𝔸//𝕆𝕋Tempat cerita menjadi hidup. Temukan sekarang