24.- Escena

1.3K 183 46
                                    

No he podido dejar de pensar en Liam. Sus oscuros ojos sobre mí analizando todos los pensamientos que pasaban por mi cabeza, sus delicados dedos alrededor de mi cuerpo, apretándome contra su cuerpo, su figura imponente cuando estoy cerca de él, su cara pincelada perfectamente en mis retinas cuando duermo, me persigue, me aturde, me dan ganas de gritar, porque quiero dejar de pensar en él, dejar de pensar que pueda amarme ¿por qué te aferras tanto a él, corazón? ¿por qué con solo unas caricias no puedo dejar de acordarme de su calidez? Quisiera poder sacarme de mi cabeza todos mis recuerdos, sacarlos con un aparato que me permita olvidar lo que se siente amar y no ser correspondido.

—¿Estás bien?—un chico alto, pelimorado se me acerca ofreciéndome una linda sonrisa. Siento un revoloteo de mariposas en la parte baja de mi barriga, que guapo que es por Dios, si se maquillara un poco podría pasar como un famoso o influencer.

—S-sí—tartamudeo, levantándome rápidamente del asiento del bus y yendo disparado hacia la salida.

Una presencia se alza conmigo cuando salgo victorioso del vehículo. Me giro y veo como el poste sigue sonriendo hasta acercarse a mí y rodearme con sus brazos. En vez de sentirme agradecido, la piel se me pone de gallina y lo aparto con mis manos.

—¿Quién eres? No te conozco, por favor no me toques.

—¿Tú no eres Nathaniel?—abro los ojos sorprendido—. Soy amigo de Danna, me llamo Baekhyun.

—El coreano ese....

—¿Disculpa?

—Nada...—digo ahora siendo el que sonríe. El recién llegado nota mi sonrisa y la imita haciendo que sus ojos se achinen en una linda eyesmile. Se ve demasiado tierno que me derrito de ternura.

Pero no tanto como Liam, ese si es tierno y tiene hoyuelos, hermoso, papucho.

Niego con mi cabeza, espantando todos esos pensamientos pecaminosos al que escapó de mí sin decirme nada, negando todos mis sentimientos una y otra vez. Hay que ser mejores, Nate, mejores.

—¿Y qué te trae por aquí, Baekhyun?—le pregunto después de sentarnos en una banca. Al diablo el colegio.

—Bueno pues, Danna me dijo que estabas pasando por malos momentos con tu crush.

Me golpeó la cara con la mano mentalmente. Esta niña, no puede dejar de contar mis chismes a otros. Qué vergüenza, por dios.

—Y pues yo también he tenido mis problemas amorosos ¿sabes? Me enamoré de una chica y un chico a la vez. Me gustaba Taeyeon por su carisma, talento y sus ocurrencias, podía ponerme a cantar todas esas baladas tontas o también me hacía comer todos los platos exóticos que encontraba, pero por la noche, me encontraba con Chanyeol y mis sentimientos reprimidos por mi mejor amigo, surgían como una llovizna peligrosa, no podía dejar de verle los labios, sus largas piernas, sus gordas mejillas y diablos, me volví loco y lo hicimos mientras Taeyeon estaba de viaje en Taiwán.

—¿Y cómo terminó todo?

—Pues yo solo solito en mi habitación. Y ellos se hicieron novios.

Abro la boca sorprendido. No me lo esperaba.

—Yo tampoco me lo esperaba, bro. Te juro que me dolió como mil demonios—le quedo mirando porque me ha leído la mente—. Pero todo fue mi culpa, si hubiera sido sincero con Chanyeol y Taeyeon no hubiera pasado a mayores—se queda viendo a las personas pasar alrededor de nosotros.

—A mí me pasa algo similar—me mira consternado—No de enamorarme de dos personas sino que la persona que le gusto es homofóbico. Hace unos días casi lo hacemos, y me sentí tan feliz de ser correspondido, sin embargo, nos atrapó un amigo y él se fue sin decirme nada, solo me dejó.

Mi primer y último crushDonde viven las historias. Descúbrelo ahora