Ryan (+18 - Gay)

Cap 15 - ¿Me esperarás?

- ¿Sabes que? - Negué con la cabeza - Creo que alguien me va a partir la cara.

- ¿Cómo? - Pregunté sin entender muy bien.

Sentí una corriente de aire detrás mío y segundos después vi a Sawyer tumbado en el suelo con la mejilla colorada. Me giré y le vi, con esa vena del cuello tan marcada que pensé que le explotaría y la cara roja como si fuera a echar humo por las orejas.

- ¡Sawyer! ¿Qué te crees que haces Ryan? - Fui corriendo a ver si estaba bien y le miré con desaprobación.

- ¿Y tú qué haces besando a otro tipo enfrente mía? - Dijo con notable rabia contenida.

- ¿Por qué? ¿Acaso estábamos saliendo o algo así? Yo no soy nada tuyo Ryan - Le escupí esas palabras a propósito.

- ¿En serio? ¿Acaso cuando me besabas no significaba nada para ti? - Abrí los ojos en desmesura y mis mejillas se colorearon de un color rojo vibrante.

- Eso ahora no importa - Murmuré por lo bajo.

- ¿Qué no importa? Todo estaba bien hasta que de repente tú me dejaste tirado por algo que no recuerdo y me ignoras, ¿eso no importa? - Me dolía, me dolía que le doliera.

- Es que me haces daño, yo no quiero a alguien tan inestable a mi lado Ryan - Dije en un tono más dulce, me estaba poniendo tan sensible que pensé que lloraría de nuevo.

- ¿Y qué hago para no serlo? No puedo hacer nada joder - Pegó una patada al suelo frustrado.

-  Cuando cambies avísame, vamos Sawyer - Le ayudé a levantarse y comencé a irme de allí.

- ¿Me esperarás? - Gritó a lo lejos.

- Eso depende de ti - Le respondí y me alejé por el pasillo.

Tenía ganas de llorar, era tan lindo que solo me apetecía abrazarlo y perdonarlo, pero a la vez tan impulsivo que sabía que me iba a hacer daño a mí y a él mismo. Estaba haciendo lo correcto, tenía que ayudarlo a cambiar, pero no estar en el proceso me iba a ser muy difícil.

- Dean no llores - Salí de mi ensoñación y me toqué la cara, nisiquiera me había dado cuenta de que había comenzado a llorar.

Sé que dije que no volvería a llorar por él, y, de momento, he cumplido mi promesa. No lloro por él, lloro por mí y no lloro por estar triste, lloro porque estoy feliz.

Le sonreí para que no se preocupara y seguí el camino hasta la enfermería, sinceramente me sentía un poco responsable por lo que le había ocurrido.

Ya no importaba, tenía que seguir adelante. Había dejado de lado mis estudios, a mi familia, porque solo estaba concentrado en él. Necesitaba mi espacio, necesitaba volver a ser el Oliver que era, ese fuerte y valiente y no en el que me había convertido, un Oliver cobarde y llorón.

Tenía que poner en orden mi vida antes de dejar que el amor volviera a mi vida, y, mientras hacía eso, confiaba en que a él le importara lo suficiente como para intentar cambiar, más que por mí por él mismo.

Y tras esa conversación no volví a habar con él, de hecho, desapareció de mi vida y pareció como si se hubiera esfumado. Se mudó con su madre a otra ciudad y así fui capaz de concentrarme en lo que de verdad me importaba. Hice nuevos amigos y subí mis notas de nuevo, gracias a él pude volver a ser yo mismo.

Pero, ni siquiera con el paso de los años había podido olvidarle, porque yo le había entregado mi corazón y aún lo tenía. Solo rezaba porque, en algún momento, volvieramos a reunirnos de nuevo.

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Esta capítulo ha sido mucho más corto que el resto pero no menos intenso por eso. Aunque lo parezca este no es el finl de la historia, ni mucho menos, es como si acabara la primera temporada y empezara la segunda puesto que el contexto será diferente a partir de ahora. Sé que quizás no os esperáseis el "final" de esta forma pero, pese a esto, me gustaría que entendiérais que esto es lo más sano para ambos y que este, repito, no es el final. Muchas gracias a todos por haber leido hasta aquí y regresaré muy pronto con la siguiente temporada.