36. Presentimientos.

4.2K 158 31
                                    

Las últimas horas habían corrido mucho más rápido que de costumbre.

Supuse que mis pensamientos entusiastas habían colaborado bastante para que el tiempo esta vez se pusiera en mi contra.

Me apoyé por la pared esperando que Candace saliera de su clase mientras que me dedicaba a vagar con el teléfono. Era la mejor distracción que podía optar teniendo tantas ideas flotando en mi mente.

-¿Que tal el desfile? -la voz de mi amiga apareció de imprevisto cerca mío. Le seguí el paso mientras que batallaba en guardar el aparato en el bolsillo trasero de mis jeans.

Rechisté por lo bajo suponiendo que había cogido un poco de peso por aquel detalle.

-¿Desfile? -contesté sin entender.

Candace rió traviesa.

-El de O'donell y tú-prosiguió con tono pícaro y blanqueé los ojos de forma automática.

Lo peor de todo era que aquel nombre que le había dado encajaba perfectamente con la escena que habíamos montado hace unas horas.

-Fue divertido recibir vistazos de muerte por parte de muchas-confesé sarcástica mientras que bajabamos de las escaleras.

Candace echó una risotada completamente divertida.

A ella le entusiasmaba mucho más que a mí toda esta situación.

Me mordí el labio al divisarle a lo lejos.

Se encontraba recostado por su coche jugando distraídamente con sus llaves.

Fuck.

Lucía como un maldito Adonis sin siquiera intentarlo.

Noté qué ahora su vestimenta había cambiado a una deportiva y recordé que había pasado las últimas horas entrenando.

Una vez que sus ojos se encontraron con los mios, me hizo una seña con el dedo índice para que me acercara.

Le hice una cara incrédula desde la distancia por la manera tan egocéntrica que me estaba pidiendo para que lo hiciera. Entonces Jack junto ambas manos con las palmas abiertas y sonreí complacida por aquella seña más gentil.

Me acerqué con pasos tranquilos disimulando los nervios que cosquilleaban por dentro.

-Hey-me limité a decir y él tomó mi mano acortando nuestra distancia.

Nuestros zapatos se chocaron entre si.

Noté que estaba algo despeinado y con las mejillas coloradas por el ejercitamiento físico. Algo que provocó una fuerte alteración en mi sistema.

Elenna controla tus hormonas.

-Muy bien, soy todo oídos-sé cruzó de brazos mirandome fijamente.

Le imité resguardandome en la tela de mi cazadora. El estacionamiento estaba lleno, Cam y Candace estaban a unos coches de distancia y pude notar por el rabillo del ojo que varios estudiantes nos miraban atentos.

Oh, esto se sentía horrible.

-¿No puedes esperar hasta esta noche?-expresé con tono resignado.

El chistó moviendo los ojos de un lado a otro y sonreí sin poder contenerme. Amaba cuando hacía esa clase de gestos tontos y aniñados.

-Cars no tienes idea las teorias que ya maquiné en mi mente, apenas pude concentrarme durante el entrenamiento. No aguantaré hasta esta noche-soltó de forma acelerada.

Soportando a Jack. Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora