3.Pequeña broma

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Era una batalla de miradas, una batalla de azul contra verde con un silencio de contraste.

Esperaba una respuesta, con sólo unas simples palabras ya lo había delatado y esta vez no habría escapatoria.

Lo mire lentamente, se encontraba vestido totalmente de negro haciendo que esos ojos azules brillaran como linternas.

-Solo lo tome prestado-sonrió despreocupado.

Un fuego interno crecio en mí.

Me escaneó con su mirada y rió gratamente.

Intente ignorar su acción para acercarme a él sin mas rodeos.

-¿Sabes cuanto me costó hacerlo?-rechiste totalmente cabreada, él se quedó mirandome con expresión divertida cosa que puso mucho más nerviosa de lo que ya estaba-¡No puedes hacer eso! -conclui despeinandome el pelo.

-Creeme que para haberte esforzado no fue tan bueno, la Sra. Baker solo me dio nueve y yo me esperaba un diez-se atrevió a decir manteniendo su postura burlona.

Todo lo que queria en estos momentos era golpearlo pero aun me quedaba un poco de cordura.

Por suerte.

-Creeme que con esa postura de idiota dudo que consiguieras buenas notas-retruqué al instante, sus ojos brillaban.

Oh le estaba divirtiendo esta situacion.

-Conozco muchas posturas, si quieres te las enseño-hizo una pausa para luego dirigir su mirada a la cama-¡Anda! tienes suerte, mi cama esta hecha-agregó sin una pizca de vergüenza. Me quedé callada sin saber que decir, conteniendo la ira.

Relajate Elenna, puedes controlar esta situacion.

Solo Inhala y exhala.

Inhala y exhala.

No, esto no funciona conmigo.

Y aqui viene el vomito verbal.

-¡Eres un imbecil, guarro y egoista que solo piensa en si mismo! Y ni siquiera tuviste la gentileza de pedirme disculpas, ¿en serio crees que por hacerte del chulito conmigo haré pasar lo que hiciste?, era un trabajo importante ¿sabes? y tu carita bonita no arreglara esto, así que mas vale que te disculpes ahora y me devuelvas el trabajo-las palabras salieron sin poder controlarlo, mi garganta ardia y el dolor de cabeza que tenia iba aumentando.

El ojiazul ni siquiera hizo una mueca de arrepentimiento ante aquel nido de palabras que había soltado, fue totalmente lo contrario.

Sus ojos se achinaron con expresion divertida y sus labios saltaron a un costado sonriendo de forma engreída.

Eso hizo que me sintiera realmente estúpida en consecuencia.

¿Acaso estaba siendo muy patética al respecto?

-Es increíble como no puedes aceptarlo-espeto sin quitarme los ojos de encima.

-¿Aceptar qué?-pregunte irritada.

Ya no entendía para dónde iba a esta conversación.

-Que me lleve el credito de todo esto, no puedes aceptar que alguien por una vez en la vida te lleve la delantera-dijo lentamente acercandose a mi, no podia creer como estaba tan tranquilo ante todo esto.

-No me conoces para decir eso-respondi rapidamente dando un paso atras chocando con la pared.

-Tu tampoco me conoces Carson, y estas siendo la más prejuiciosa en esta habitación-dijo dando un paso mas adelante haciendo que la punta de sus zapatos chocasen con los mios.

Soportando a Jack. Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon