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No puedo dejar de abrazar y besar a mi hija, la extrañe tanto qué quiero estar pegado a ella en todo momento. Todos permanecen en silencio dejándome disfrutar de este momento. Pasan unos minutos hasta que finalmente Felix habla.
-¿Qué les parece si bajamos al living y preparo un poco de Té? -Lo escuché decir. -Y para ti pequeña unas galletas, ¿Quieres? -Preguntó esta vez dirigiéndose a Aika.
-¡Shi quelo! -Dice en un gritito contenta por obtener galletas.
Soltamos una risa divertida debido a su emoción. Me levanté con mi hija en brazos y nos dirigimos hacía las escaleras para así bajar a la planta baja. Una vez abajo veo a Felix dirigirse hacía la cocina para preparar té para todos como prometió.
El living consta con cuatro sillones, dos individuales, uno para dos personas y por último uno mas grande dónde pueden entrar cuatro personas, y en él medio una mesita ratona.
Me dirijo hacía uno de los sillones individuales y me siento con mi hija encima, Minho al igual que yo, se sienta en el sillón individual qué está en frente mío. A mi derecha Changbin se sienta en el sillón para dos personas y finalmente Felix que vuelve con una bandeja con galletas y té para todos, se sienta al lado de su pareja.
Nos mantenemos en un silencio agradable mientras disfrutamos un delicioso té y galletas, debo admitir que Felix es un buen cocinero.
-Pabi. -Escuché la pequeña voz de mi hija, tiene un poco de migajas en sus mejillas y las limpio con mis manos. -Abua.
Inmediatamente veo a Minho levantarse y dirigirse hacía la cocina, para luego volver con una vaso de agua para Aika. Sorprendido le agradezco y con cuidado le paso el vaso para qué con sus manitas lo agarre y tome.
De vez en cuándo doy pequeñas miradas a Minho, quiero saber cómo entro mi hija a este Mundo pero no sé si sea el momento justo ahora. Al parecer Minho se da cuenta de mis miradas ya qué asiente con la cabeza dandome a entender qué me explicaría.
-Cuando te dejé con Changbin y Felix, fui a ver si alguien necesitaba ayuda. -Comienza. -La vi correr junto a esos NoHumanos en dirección a la Línea Negra, cuándo me acerqué vi a un hombre, lo extraño es qué él salió corriendo al lado contrario de esos Humanos. Quise ayudarlo también pero ya estaba muy lejos.
Un hombre... Sabía de quién se trataba, mi hija estaba con él. No había duda de qué él qué la dejó a su suerte con esos Humanos, era mi padre.
-¿Sabés quién es?
-Si, claro.. Ese hombre era mi padre, ni siquiera puede ser llamado así. -Comente con rencor.
-Qué clase de persona puede hacer eso. -Dijo Changbin con indignación.
Solté un suspiro pesado, ya no importa, pero de todas formas no se iba a esconder tan fácil de mí.. Lo que hizo fue muy peligroso, ese hombre no tiene corazón.
