Sin Vuelta Atras.

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Pov Baekhyun.

Luego de sumergirme en un mundo de pensamientos horribles, volví a la triste realidad.

Realmente me dolía haber vuelto a recaer, me dolía no haber podido cumplir con la promesa de no volver a lastimarme, era tanto el dolor que mi corazón sentia en este momento, que el dolor de mis brazos rasgados habia pasado a un segundo plano. Mi mente no paraba de procesar todo lo que había ocurrido. La noticia de mi madre. Los rasguños en mis brazos. Chanyeol.

Siempre, ante cualquier situación, él estaba presente en mis pensamientos.

Me levanté y observé mi aspecto en ese maldito baño, realmente daba pena. Tenia unas ojeras enormes, estaba pálido y mis labios estaban lastimados, la camiseta que llevaba estaba llena de manchas de sangre, provenientes de mis brazos anteriormente lastimados. Cualquiera que me viera en estas condiciones, sentiría pena o quizás asco.
Luego de observarme y odiarme por unos segundos, decidí que no podía seguir asi, debía tomar una ducha, tal vez eso despejaria mi mente almenos unos minutos. O eso creía.

Lentamente y con pesadez, me desnude frente al espejo, y como era de esperarse, sólo tuve un sentimiento. Asco.
Rápidamente me metí bajo el agua caliente, sentí como mis brazos ardían, me dolia todo el cuerpo, era un dolor inexplicable. En el fondo, creía que ese era el dolor que alguien como yo debía sentir. Deje que el agua haga su trabajo y me quede allí aproximadamente unos 10 minutos.
Luego de terminar con mi baño, me coloque una toalla para salir de allí y me dirigí hacia mi habitación. Al pasar por la habitación de mi madre, la observe dormida. Se veía tan tranquila, tenía un semblante calmado. Recordé lo que había ocurrido horas antes, lo mal que la trate sin saber los motivos de su tristeza, lo único que podía sentir era culpa. Todavía me costaba trabajo asimilar todo lo que había ocurrido horas antes. Nuevamente, las lágrimas se asomaban, sabía que ella no se merecía nada de esto. Jamas.

Quisiera que nada de esto estuviese pasando.

Camine sin ganas hacía mi habitación, me puse ropa limpia y me recoste sobre mi fría cama. Otra vez mi cabeza estaba dando vueltas, me sentía muy cansado, debía descansar, era muy tarde.

Sabia que al día siguiente debía ir al colegio, pero no sabía de donde iba a sacar las fuerzas para hacerlo. Pero el saber que allí podría ver a Chanyeol me reconfortaba un poco.
Él, a pesar de conocerlo hace poco, lograba hacer que mi mente se despejara, que la tristeza desapareciera, no sabía cómo lo hacía, pero de lo que estaba seguro es que sacaba mi mejor versión. Una que nadie habia visto, una que ni yo conocía.

Recordé lo que había hecho por mi horas antes. A pesar del frío y del peligro de la noche, fue a buscarme a ese parque, sin importar lo que podría haber sucedido.
Su compañía junto con su silencio me hacia sentir relajado. También recordé su llamada antes de entrar a mi casa y sus palabras.

"Un día sin sonreír, es un día perdido. Así que sonrie para mi, si tu lo haces, yo lo haré tambien"

Esa frase resonaba en mi cabeza, una y otra vez.
Recordé la sonrisa que me había sacado, había sido tan real y única, sólo el podía lograr algo así.

Creí que luego de cruzar esa puerta, mi vida tomaría un nuevo camino, pero todo lo que pensaba se había esfumado con la noticia de mi madre. Comenzaba a creer que tal vez, la felicidad no era para mi. Que debía conformarme con la vida que tenía.

En el fondo, muy en el fondo, sabía que yo merecía toda esta tristeza.

Las personas como yo merecen esto.

Marcas Permanentes [ChanBaek]Where stories live. Discover now