Serendipity [ChanBaek] "Traducción"

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Chanyeol cree que podría asfixiarse en esta habitación. La idea de lo que sucede fuera de las paredes entre las que está atrapado lo abrumará eventualmente, más temprano que tarde, es optimista. Desde el incidente, el rey ha estado en el palacio más y más frecuentemente, manteniendo las ventanas y las puertas cerradas todo el tiempo, asegurándose de que no haya ninguna posibilidad de que el príncipe más alto se escape de su vista.

Por supuesto, el monarca no ha permitido que Chanyeol lleve consigo nada de tecnología, citando que sólo dañará más su mentalidad leer los artículos que circulan. Chanyeol no está seguro de que haya algo que pueda herir más que no tener forma de hablar con Baekhyun, ni de explicar la situación, ni de consolar al más pequeño contra los continuos vientos de preocupación que le acechan.

Incluso mientras mira fijamente al techo en blanco desde su posición al final de su cama, contemplando cómo dormirá esta noche, y si Baekhyun echa de menos la forma suave en que sus manos se encontraron bajo las mantas, no puede encontrar una razón para preocuparse por lo que está pasando en el palacio en este momento. El control de daños, los encubrimientos, los falsos encuentros... sólo deja su paz mental marchitándose, una apariencia de pánico tratando de salir de su pecho, el príncipe desprovisto de cualquier emoción aparte del vacío.

Los últimos dos días, se había estado tambaleando por la repentina partida, por el aislamiento demasiado rápido que se le había impuesto. Cuando se vio obligado a renunciar a su anillo y asistir a un encuentro muy público e incómodo con una mujer a la que nunca había visto antes, perdió la última esperanza. El rey trata de justificar sus acciones con una lógica destrozada, con una explicación que sólo corroe más el corazón de Chanyeol, pero la insinceridad de todo ello le lleva a sentarse solo en su habitación, con las manos sudorosas y la garganta seca.

Las reglas repentinas y la falta total de información lo sofocan tanto física como mentalmente, dejando al príncipe en un estado de angustia, de pánico hirviente, esperando cualquier oportunidad de respirar, de escuchar una actualización sobre la persona que ama. 

Normalmente, ser obligado a permanecer en su habitación habría sido un castigo sin complicaciones, incluso bienvenido. No hay nada que le guste más que estar en la cama mientras el viento frío flota a través de la ventana abierta, evitando las miradas indiscretas de los guardias y oficiales del palacio mientras el sueño hace que sus párpados se vuelvan pesados. Pero cuando la habitación está cerrada, cuando se ve obligado a escuchar sólo el silencio de su respiración, cuando no hay nadie a su lado que llene el silencio con palabras murmuradas y risas, el atractivo de su dormitorio se ha desvanecido por completo. Cada rincón de esta habitación contiene trozos de Baekhyun, tanto en sentido figurado como literal, y Chanyeol siente náuseas cuando mira cualquier cosa durante demasiado tiempo.

La cama carece del calor que el más bajito proporcionaba, pero sigue estando viva con su olor, con la huella en su almohada, con las palabras que se susurraban contra la cabellera del otro. Se niega a mover ninguna de las pertenencias de Baekhyun, a tocar la ropa que aún está colgada en el armario. Hay una voz en su cabeza que susurra que Baekhyun volverá a por ellos, incluso mientras observa la puesta de sol de otro día sin ningún contacto con el mundo exterior, sin ninguna palabra de la persona a la que quiere con cada fibra de su ser.

Es su culpa, su cerebro lo ha dejado muy claro las últimas noches, por dejarse separar de Baekhyun, aunque fuera por un breve momento en esa sala de reuniones, en un momento de confusión y miedo, y Chanyeol no sabe nada más aparte de que Baekhyun esta sangrando. Pero, sobre todo, se culpa a sí mismo por caer bajo el control del rey, aunque no está seguro de qué más puede hacer, no cuando, hasta ahora, toda su vida siempre ha estado contenido dentro de estos muros del palacio.