Te Recordaré |Venganza Y Avaricia: Dos Cosas Que No Deben Juntarse| (LIBRO 1)

12.5 ¿Me quieres?

Y ahí estaba yo, parada aun lado de la puerta de la oficina de la madre de Jackson con las piernas un poco temblorosas y una mirada desconcertada ante aquellas palabras inesperadas, trague saliva y intente recuperarme para responder, tome aire y hice una pequeña mueca

—¿Todo bien Harry?—Empece con un poco de inseguridad puesto que su tono de voz había llegado a preocuparme un poco—Te escucho algo... Serio—Mencione tomando el celular con fuerza entre mis manos

—Lamento la interrupción Kristal, enserio, no pretendo preocuparte pero es mi deber informarte de todo sobre lo que vayamos averiguando y, en verdad creo que debes saber varias cosas—Informa suavizando algo su voz, suelto un pequeño suspiro y aprieto los labios

—No te mortifiques por mí, si?, después de todo haces tu trabajo y para ser sincera necesito información—Murmuré pasando una mano por mi cabello y mirando al piso de abajo, todos se ven inmersos en su trabajo

—Esta bien, pero lo que te tengo que decir no es algo suave, ok?, y debido a la gravedad del asunto me veo obligado a contártelo en persona—Menciona para luego soltar un suspiro—Por lo cual estaba pensando en invitarte a desayunar mañana, que te parece?—Cuestiono en un tono algo más amable, tal y como lo conocí

Sonrió ante la idea, me suena genial, aunque tengo que admitir que mi estomago se revuelve un poco por las palabras "No es algo suave", ¿A qué se refiere con eso?. Dios, empiezo a preocuparme un poco

—Me parece muy bien—Acepto sin dudar con una sonrisa a pesar de que no me vea—Mándame la dirección y hora por un mensaje—Le digo apoyándome de el barandal que separa al pequeño balcón del piso de abajo—Gracias por todo Harry

—Sin problemas, y no te preocupes linda, es un placer. En fin, debo irme ya, mucho trabajo espera ser arreglado. Ya mañana tendremos tiempo de hablar más. Hasta pronto, Kristal—Se despide y escucho un pequeño sonido que indica que la llamada a sido finalizada.

Muerdo levemente mi labio inferior pensativa y aparto el celular de mi oreja con lentitud, admito que la curiosidad me esta comiendo viva pero ya tendré que aguantarme hasta mañana, suelto un suspiro y guardo el aparato en un pequeño bolsillo de mi vestido, me pregunto que estarán hablando Jack y su madre, tengo ya un rato considerable aquí afuera...

Me enderezo y me dispongo a regresar a dentro de la oficina, abro la puerta con cuidado y lo primero que oigo son sollozos silenciosos, enarco una ceja en alto y al abrir la puerta mis ojos dan con una escena que hace que mi corazón se rompa un poco

La madre de Jack esta sentada aun en aquella silla pero él no, en cambio se encuentra de cuclillas en frente de ella mientras la consuela, permanece con la mirada abajo mientras que ella limpia sus lagrimas con un pequeño pañuelo. Al estar por completo adentro de la habitación me quedo paralizada mirando a ambos, no sé como reaccionar para ser sincera, los ojos de ambos se fijan en mí y vuelvo a sentirme pequeña, mucho más porque veo los de Jackson rojos y cristalizados.

Relamo mis labios y me acerco a ellos en silencio y con cautela, cuando estoy a una distancia considerable les doy una sonrisa algo triste de labios apretados, Jack se levanta y pasa su brazo por encima de mis hombros, dándome un poco de seguridad, ni siquiera me inmuto a moverme, solo dejo a mi cabeza descansar un poco en su pecho y miro a la nada

—Oh, cariño, no estaba enterada de toda esta situación tan... Desastrosa—Balbucea ella dándome una mirada triste—Lamento mucho todo esto, y quiero que sepas que tienes todo mi apoyo incondicional, al igual que el de mi hijo, aunque creo que él ya te lo dio mucho antes

Sonreí con amabilidad, era un gesto muy lindo de su parte.

  Y a pesar de que para mi fuera una completa desconocida, muy en el fondo algo me decía que confiara.