Capítulo 6

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La música alta martillaba en sus oídos, el ambiente estaba cálido y gotas de sudor descendieron de su frente perdiendose en su  escote, sus pies dolían debido al esfuerzo de estar parada desde hace unas horas( manejaba muy bien los tacones pero eso no signoficaba que fuera resistente al estar con ellos por mucho tiempo), y  anhelaba algo refrescante en ese momento. Se apoyó en el mesón del bar, levantando en turno sus pies para aliviar un poco el dolor de estos, de repente sintió un pequeño toque en su hombre y al dirigir su mirada se encontró con francois, quien le ofrecía una botella de agua, era un ángel. Le sonrió en agradecimiento y bebió de aquel líquido vital con ganas soltando un gemido de satisfaccion, ciertamente lo necesitaba pero el estar ocupada le quitaba aquel privilegio.

—Muchas gracias Francois, eres un ángel.

—No hay de que y no soy un ángel kohaku-chan-sonriendole- Temía que llegarás a colapsar por deshidratación, solamente ayude a mi amiga.

— Y por eso mismo eres un ángel –adulandola– A pesar que el club no está tan lleno hoy el trabajo es igual de pesado. Necesito vacaciones–soltando un suspiro de cansancio.

—Mmm....hasta ahora nunca hemos tenido vacaciones, ibara-sama no lo permite–dijo triste–Pero podemos pedir un fin de semana, de todos modos nos merecemos tan siquiera eso.

—¡JA! Lo dudó, ese viejo explotador dirá que perderá ingresos y bla bla bla. Es un milagro que nos de el domingo para descansar. Si por el mismo fuera, nos pudiera a trabajar 24/7 hasta matarnos.

—bueno, concordamos en eso–riendo entre dientes–Por cierto.....¿como sigues...de tus leciones?..¿ Todavía duelen?–pregunto con un dije de preocupación.

—Ah..bueno...ya no duelen pero aún se notan un poco. Dentro de poco ya me verás bailando de nuevo en el tubo–sonriendole entusiasta–Me hace tanta falta....¡Ya quiero que llegue ese dia!–dijo emocionada.

—Yo también lo espero kohaku-chan. Se siente raro no verte bailar pero como tu dices, pronto te veré hacerlo de nuevo–sonriendole.

Había pasado un mes desde el insidente con mozu ( quien ya no se apareció por el club), y en donde fue salvada por Senku, a quién por cierto solo pudo lograr ver dos veces ya que a estado ocupado y su tiempo libre se limitaba a los fines de semana. Aprovecho en esas dos oportunidades para agradecerle y se lo dijo tantas veces que se ganó un regaño de su parte. "Pareces un disco rayado leona, con una sola vez basta" le dijo esa vez, sonrió ante el recuerdo de la cara de fastidio de el.

Debido a los ematomas en su abdomen, se limitó a solo servir bebidas o ser acompañante y se aplicaba tres kilos de maquillaje para tapar los de su cara(  ok, quizás exageraba) pero así es como se sentía al tener tanto maquillaje, aún que en las últimas dos semanas se aplicaba menos.

No mentía cuando decía que le asia falta moverse al compás de la música, haciendo su rutina, escalando aquel caño de hierro para hacer sus maniobras. El baile era su desahogó, su mejor amigo, en el expresaba todo lo que no podía decir y era lo único que podía hacer bien( además de pelear claro) eran las únicas dos cosas que pudo aprender.

Miro de nuevo a su alrededor, era martes y el club no estaba muy concurrido pero al menos no vacío. De un día para otro ibara ordenó subir el precio a un ojo de la cara la entrada al club, las bebidas, aperitivos y aquellos "servicios" dados por las chicas y debido a eso los clientes fueron disminillendo, además de reducir el sueldo de todos. No podían quejarse por qué si no era capas y no les daba ni un centavo.
Por lo que Nikki pudo averiguar, al parecer el viejo verde se pasó de listo y le robo a quién no debía y el individuo al enterarse que fue el, mando a recuperar su mercancía no sin antes humillarlo y advertirle que no habria segunda oportunidad. Pero eso no fue lo peor. Como ya había negociado con varios compradores y estos habiendo pagado su parte,  al saber que no poseía la mercancía  le exigieron el reembolso y este se negó a dárselos, ante la negativa terminaron saqueando gran parte de sus bodegas dejándolo casi sin nada. Ciertamente ser un mafioso era jodido pero como dicen, cosechas lo que siembras, se hubiera ahorrado problemas si el no hubiera hecho esa estupidez.

Amar a un Yakuza Donde viven las historias. Descúbrelo ahora